El Barça llegaba al Coliseum con una buena renta, pero también con el recuerdo de la eliminatoria remontada por los azulones, y por tanto no corrió riesgos. Messi volvía a la titularidad por primera vez después de la lesión, y Neymar hacía lo propio tras una semana en la que ha padecido problemas estomacales. Sergi Roberto y Fàbregas destacaban como pareja de interiores, secundados por el camerunés Song.

Por su parte, Luis García solamente introdució una novedad salientable en su once inicial, ya que dio la sorpresa colocando al juvenil Vigaray en la posición de lateral derecho. Por lo demás, exceptuando las rotaciones habituales en el torneo del KO, el esquema era totalmente predecible.

El partido comenzó muy intenso, con un equipo visitante que no se dedicó a especular con el resultado, y en el minuto 3 Messi ya metió el miedo en el cuerpo a Codina con un buen zurdazo que se marchó rozando el poste. Instantes más tarde, sería Tello quien no estuvo acertado ante el marco getafense.

Los azulones, al igual que en la ida, intentaron defenderse con rigor y salir rápido al contragolpe, y de este modo gozaron de una gran oportunidad llegada la veintena de minutos. Un centro de Lafita, prolongado por Colunga, llegó a los pies de Juan Rodríguez, que totalmente solo delante de Pinto, no supo definir ante la gran estirada del guardameta gaditano.

Criba de lesiones

A partir de aquí, el panorama se transformó por completo. Una desafortunada acción de Neymar, que estaba siendo el hombre más activo y destacado, le causó una lesión en el tobillo derecho que le obligó a retirarse del verde. Mañana, tras el examen médico, conoceremos el alcance real de la dolencia del brasileño.

Poco tiempo después, era el Getafe el damnificado. De nuevo sin ningún rival de por medio, el central Alexis Ruano notó un dolor en la zona de la pubis, que provocó una nueva sustitución, en esta ocasión con Lisandro, el jugador cedido por el Benfica, de protagonista.

Gol y descanso

Tras este bajón de intensidad, cuando todo apuntaba a que nos iríamos sin ver puerta al descanso, apareció Tello para ceder en bandeja el gol a Leo Messi y de paso sentenciar aún más la eliminatoria, por si ya no lo estaba.

Llegábamos así al final de los 45 minutos, con un precio demasiado caro para ambos equipos en cuanto a lesiones, si tenemos en cuenta la poca importancia de lo que se estaba disputando sobre el césped del Coliseum Alfonso Pérez.

Salida de vestuarios, y nuevo gol del Rey

Todavía algo conmocionados, y sin tiempo para que algún revulsivo saltara al campo, los jugadores del Getafe pudieron asistir en directo a la facilidad de Messi para superar a dos defensas y al portero y estrellar el balón en las redes con una suficiencia casi insultante.

El argentino, desde que pisó el campo mediado el segundo tiempo del partido de ida, ha anotado todos los goles del equipo. Dato muy significativo.

Esto supuso un claro punto de inflexión en el devenir del choque, pues ambos conjuntos aflojaron la marcha en demasía. Poco más pudimos ver que una eterna sucesión de cambios y pases que se morían rápidamente en los pies del rival.

Mención aparte merece la entrada de Xavi Hernández, que sumó su partido número 700 con la camiseta del Barcelona en partido oficial, y continúa siendo el hombre que más veces ha portado la casaca blaugrana. Todo un mito, sin duda.

Como colofón, a 5 minutos del final del encuentro, tuvimos la oportunidad de deleitarnos con una intervención antológica de Jordi Codina en una gran muestra de reflejos ante Leo Messi, que no fue capaz de completar su hat-trick particular.

Un escollo menos en las aspiraciones azulgranas, que se verán las caras con el Levante de Joaquín Caparrós en la ronda de cuartos de final.