El Ciutat de València es uno de los campos más complicados de Primera División. Las dimensiones favorecen al conjunto 'granota' que trata de cerrar todos los espacios posibles provocando un cerrojo inquebrantable en muchas ocasiones. Los de Joaquín Caparrós llegaban al encuentro en una zona tranquila de la tabla, seis puntos por encima del descenso y en 12ª posición, pudiéndose permitir una derrotar ante el líder. Por su parte, los de Martino llegaban al choque líderes, con el permiso del Atlético de Madrid, con la clara misión de llevarse unos tres puntos importantísimos. La victoria del Real Madrid en Cornellá obligaba al conjunto culé a llevarse los tres puntos, el factor ansiedad podía ser una buena baza para Caparrós.

Los problemas para el Levante podían llegar de cara a portería, con tan solo 18 goles es uno de los equipos menos goleadores del campeonato. Para más inri, el Barcelona es el segundo equipo que menos goles encaja tras el Atlético de Madrid. Caparrós mostró sus intenciones desde el día anterior al encuentro, entrenó un 4-5-1 con El Zhar como falso nueve y con la posibilidad de jugar con cinco defensas. El Levante iba a plantear una muralla que iba a desquiciar al Barcelona con el tiempo si se mantenía el empate. Sin Neymar ni Andrés Iniesta, los blaugranas perdían dos bazas a la hora de romper la defensa granota.

El balón parado manda

Un día más, ya son ocho goles en trece partidos, el Barcelona encaja un gol a balón parado. En el minuto 10 de partido, cuando los equipos trataban de encontrarse a sí mismos, el Levante golpeó primero. Un córner forzado por El Zhar acabó con un remate de Vyntra al fondo de las mallas, el griego consiguió evitar la presión de Cesc Fábregas y remató por encima de Piqué. Valdés pedía explicaciones a sus compañeros que miraban al horizonte pensando: "un día más la misma historia". El Barça debía remontar pero el Levante planteba un partido correoso, de garra y acierto. Con prácticamente nueve jugadores defendiendo, Xavi y Cesc debían dar un paso adelante para crear ocasiones.

Ese paso no llegó pero los visitantes consiguieron hincarle el diente al Levante a balón parado. En el minuto 19, Piqué iba a igualar el encuentro con un gran testarazo desde el punto de penalti. El Barça empataba dándole al Levante de su propia medicina. A partir de aquí empezó el dominio estéril del Barcelona. Posesiones largas, pases en corto o centros al área se repetían constantemente pero siempre ocurría lo mismo, el Levante se sentía cómodo y no concedía ocasiones. Pedro fue uno de los mejores en el conjunto culé, el canario intentaba romper la defensa con regates y desmasques aunque dos líneas de cuatro jugadores locales impedían todas las ocasiones. Messi, poco participativo, debía aparecer más en la segunda mitad para que el Barcelona se llevase los tres puntos como en las últimas cinco visitas al Ciutat de València.

Una fortaleza inexpugnable

El Barcelona salió a por todas en la segunda mitad, quería resolver cuanto antes. El Levante se limitaba a parar las internadas culés como podía, dos líneas de cuatro jugadores que hacían prácticamente imposible cualquier combinación. Cesc primero y Xavi un minuto más tarde avisaban desde fuera del área, empezaban a carburar los visitantes. En el minuto 59 se iba a producir una de las jugadas del partido. Messi encontró a Fábregas en la frontal que le devolvió una pared de tacón, el astro argentino se internó en el área consiguiendo disparar pero Keylor Navas sacó una mano prodigiosa. Además, el rebote le cayó a Xavi que disparó sin portero pero Juanfran rechazó el disparo. 

Juanfran iba a convertirse en el héroe del Ciutat de València por segunda vez. Messi controló en el área, se acomodó el balón y disparó cruzado con la mala fortuna para el Barcelona que Juanfran iba a sacar un pie prodigioso. El Barça empezaba a entrar en un estado de ansiedad preocupante. Los visitantes se excedieron buscando centros al área cuando el Levante se siente mucho más cómodo en esa faceta, en ningún momento creó peligro. A falta de 20 minutos, Pedro López iba a poner el corazón en un puño a todos los aficionados del FC Barcelona. Un gran centro al segundo palo le cayó al lateral que voleó rozando el palo. Los granotas se lo creyeron e Ivanschitz avisó con un testarazo que pudo blocar Valdés con una gran estirada.

A por la victoria con la cantera

Martino sabía que necesitaba cambiar algo, miró al banquillo y tuvo que echar mano de la cantera. Sergi Roberto, Tello y Dongou entraron para buscar la victoria culé. Tello fue el más activo en el ataque blaugrana, buscó el uno contra uno y consiguió que tambalease la defensa local. El partido parecía de frontón, el Barcelona lo intentaba una y otra vez pero el Levante se mostraba muy sólido atrás. La ocasión más clara iba a llegar en el minuto 86 cuando Keylor Navas se estiró para despejar a córner un latigazo de Messi. El Levante avisó en una contra y provocó que el Barça se resguardase más que en las jugadas anteriores, una derrota hubiese sido durísima para el conjunto blaugrana. Los minutos finales consistían en centros al área que despejaba el Levante como podía, Alexis se encontró un balón muerto que Juanfran conseguía despejar a córner. Del Cerro Grande levantó los brazos al cielo de Valencia para señalar el final del encuentro, dos puntos muy importantes se le escapan al Barcelona ante un meritorio Levante que hizo su partido a la perfección.

Con este resultado el FC Barcelona adelanta al Real Madrid por un punto a la espera que el Atlético de Madrid juegue ante el Sevilla. Para el Levante es un punto muy valioso, un punto que la mayoría de equipos no conseguirán y que provoca que asciendan a la 11ª posición por delante del Getafe.