Dos grandes conjuntos se verán las caras en el Etihad Stadium, donde empezará la eliminatoria de los octavos de final de la Champions League. El City, un grande de la época moderna, ha impuesto miedo a base de goles y de victorias contra el Barcelona, todo un histórico que quiere volver a recuperar su trono europeo.

La eliminatoria de octavos es la primera para los jugadores de Pellegrini, que con la llegada del jeque han visto como han pasado de la League One a ganar la Premier League y luchar por revalidar el título doméstico. Pero la competición europea se les ha atragantado y es la primera vez en su historia que llegan a la fase de eliminatorias. Por parte azulgrana, el equipo está acostumbrado a llegar a estas alturas en los últimos años, ya que ha llegado a semifinales en las 6 temporadas anteriores.

Estilo ofensivo, equipos goleadores

El gol es el mejor aliado de los dos conjuntos. Cifras casi idénticas en las respectivas ligas domésticas hacen pensar en la enorme capacidad ofensiva de los dos equipos. El City ha marcado 68 goles en 25 partidos, mientras que el Barcelona ha marcado 69 goles en un partido menos, 24.

Tanto uno como el otro equipo son los máximos goleadores de sus ligas y, también, de los menos goleados. Así se demuestra el equilibrio que tienen entre el ataque y la defensa, la capacidad que tienen de ganar partidos y la enorme entidad del cruce de Champions League.

Versatibilidad inglesa

El equipo de Pellegrini es un equipo muy completo a nivel ofensivo. Son capaces de marcar gol de cualquier manera, ya que tienen muchos jugadores ofensivos y de características muy distintas.

Crean mucho peligro con centros laterales y con las llegadas de sus centrocampistasCon las incorporaciones de Navas y Negredo, el City ha adquirido otra dimensión y tiene otra variante en el ataque. El extremo dota al conjunto citizen de la posibilidad de asistirlo una y otra vez para buscar el desborde contínuo y los centros al área para el posterior remate. Su capacidad para regatear en la banda derecha es incuestionable y con su pie derecho pone centros medidos que son un regalo para delanteros como Negredo, Dzeko o Jovetic. Navas se combina los centros con Zabaleta, un viejo conocido de la liga española, que sube la banda a menudo para crear superioridad.

En la banda izquierda no hay un extremo puro, pero los laterales tienden a subir mucho para aprovechar el espacio creado por Nasri o Silva, que se van hacia el centro. Así, el City amenaza con centros laterales desde las dos bandas y se vuelve un equipo muy difícil de defender en este aspecto.

Pero no todo son centros al área y buscar la altura de sus delanteros, ya que con Agüero también es muy peligroso el juego asociativo. El delantero argentino, baja confirmada para la ida de los octavos y seria duda para la vuelta, dota al conjunto inglés de mucho desequilibrio por dentro, ya sea con el uno contra uno o moviendo la pelota muy rápido entre los jugadores del centro del campo. Cuando se asocian Silva, Nasri, Touré y Agüero por dentro, con la ayuda de Fernandinho, el balón circula muy rápido y son capaces de encontrar espacios por dentro aunque la defensa esté muy cerrada.

La fuerza física, otro argumento

Por si no habían suficientes variantes, el City tiene dos portentos físicos como son Touré y Fernandinho. Tanto uno como otro son peligrosísimos entrando de segunda línea y poseen un disparo muy potente que les permite disparar desde muy lejos.

Su despliegue físico es muy importante para Pellegrini pero las ganas de llegar al área rival les hace descolgarse demasiado y partir al equipo si uno de los pivotes defensivos no está cerrando bien.

El juego de posesión azulgrana, como acostumbra

El juego del Barcelona también es muy ofensivo. Pero es muy distinto al del equipo de Pellegrini. Sin delanteros puros, sin extremos para centrar balones pero con la misma capacidad para crear peligro. En vez de buscar las bandas y los centros, los pupilos de Martino buscan la combinación de Messi, Xavi, Iniesta y Cesc para crear espacios ante las defensas más cerradas.

La verticalidad culé se basa en los extremos, que buscan balones en profundidad a la espalda de los centrales con desmarques de ruptura en diagonal. En cuanto hacen la diagonal, los laterales buscan abrir el campo y, así, mantener la amplitud para no crear en el campo del rival un embudo sin solución.

La superioridad en el centro del campo, clave

Para el Barcelona es clave crear superioridades en el centro del campo, por eso Martino alineará, con mucha seguridad, a Busquets, Cesc, Xavi e Iniesta juntos en el Etihad Stadium. Con los 4 centrocampistas más Messi, Martino quiere contrarrestar el trivote que puede formar Pellegrini con Touré, Fernandinho y Javi García.

Si los jugadores del Barcelona pueden crear superioridad y dominar el centro del campo, el Barça podrá llevar el ritmo del partido y se sentirá más cómodo. En caso contrario, en situaciones de igualdad numérica, físicamente el City es superior y podría discutirle el dominio a los de Martino.

¿Y si hay situaciones de ida y vuelta?

El partido loco favorece, a priori, al CityUna de las situaciones que odiaba Guardiola era un partido roto con poco centro del campo y transiciones rápidas. Vilanova tampoco quería dichas situaciones, pero con Martino es distinto. El técnico argentino quiere que el Barcelona lea el partido y juegue de la manera que más daño puede hacerle al rival. Frente al Ajax en el Camp Nou, Celta en Balaídos, Rayo en Vallecas... el Barcelona ha tenido fases con ataques muy rápidos aunque eso suponga correr riesgos atrás.

Pero todas estas situaciones las ha tenido ante equipos que no tienen la entidad del City. Es cierto que el equipo de Manchester tiende a romperse y, en cuanto pasa, sufre mucho en defensa. Pero la capacidad física de los hombres de Pellegrini supera la del Barcelona, cosa que hace suponer que un partido roto le daría cierta ventaja a los locales.

Partido de muchos goles... o no

Aunque los dos equipos son muy goleadores y sus registros son los mejores de sus respectivas ligas, los dos entrenadores saben de la importancia de mantener la portería a cero, sobre todo los locales. El valor doble de los goles fuera de casa cobra una importancia vital en estas eliminatorias y el Barcelona querrá aprovecharse de ello.

El equipo que salga con ventaja del primer partido tendrá mucho ganado en la eliminatoria. El azar ha querido que el mundo futbolístico viva uno de los mejores duelos que se pueden ver en la actualidad. En un mes, uno de los dos quedará fuera de la carrera por la Champions y otro estará más cerca del trono europeo. Mientras tanto, a disfrutar del fútbol.

Fotografías: telegraph.co.uk, espn.co.uk y Carla Cortés - VAVEL.