La deficiente temporada llevada a cabo por el FC Barcelona, obliga a los encargados de diseñar la plantilla del primer equipo, a efectuar una pequeña revolución en busca de recuperar las sensaciones perdidas en los último años. En las últimas tres campañas, el conjunto barcelonista ha denotado un bajón respecto a las primeras tres cursos con Guardiola en el banquillo. Más allá de los resultados, las sensaciones que ha dejado el Barça de las últimas temporadas obliga a Andoni Zubizarreta y a Luis Enrique, a salir en busca de jugadores con hambre de títulos y lo que es más importante, con unas características especiales que les permita poder triunfar en un club de la envergadura del FC Barcelona.
Una Liga y una Copa del Rey en tres años, es un bagaje que décadas atrás hubiera supuesto un gran ciclo, no obstante la excelencia vivida en los últimos tiempos, convierte ambos títulos en un pobre botín para el que ha demostrado ser el mejor Barça de la historia. El trabajo en la secretaría técnica durante los próximos meses, es el que deberá dilucidar si el conjunto azulgrana vuelve a subir los escalones descendidos recientemente, o si por lo contrario el equipo de Luis Enrique debe partir de cero en busca de una nueva ruta hacia el estrellato.
El centro del campo ha sido quizás la zona más damnificada durante la última campaña. Con un Sergio Busquets lejos de su mejor versión, Xavi e Iniesta irreconocibles en algunas fases de la temporada y Cesc Fábregas firmando de nuevo un año irregular, que con toda probabilidad le costará el adiós del club de sus amores, la línea medular será con toda seguridad la más reforzada en el mercado estival. La llegada de Rafinha aporta por ahora un haz de luz a la oscuridad que ha reinado en el centro del campo culé durante todo el curso, pero hasta tres jugadores más podrían reforzar la que debe ser la espina dorsal de un Barça renacido.
Los elegidos por la secretaría técnica son Marco Reus (Borussia Dortmund), Koke (Atlético de Madrid) e Ivan Rakitic (Sevilla). Los tres futbolistas han cuajado una fantástica temporada con sus respectivos equipos, y más allá de sus números parecen concordar con el perfil de jugador que podría encajar a la perfección en el esquema de juego azulgrana. Al parecer la llegada de Rakitic es tan solo cuestión de tiempo, puesto que el jugador croata podría pasar la revisión medica previa a la firma del contrato en los próximos días, Reus y Koke en cambio serán negociaciones a largo plazo.
El “ADN Barça” se cotiza alto, más si cabe durante los meses venideros en los que los clubes son sabedores de que el FC Barcelona ansía encontrarlo. Los nombres anteriormente citados disponen a primera vista del “gen”necesario para triunfar con la camiseta azulgrana, no obstante y dejándonos guiar por los últimos precedentes, nada puede asegurar que un recién llegado encaje en un planteamiento aparentemente diseñado para él. La llegada de Cesc Fábregas hace ahora tres temporadas parecía ser un valor seguro, en lo que la masa social barcelonista consideraba como un fichaje esencial de cara a la conservación y prolongación del legado futbolístico más exitoso de la historia del club. Pasados tres años ha quedado claro, que la busqueda del “ADN Barça” es tan compleja que incluso los jugadores que parecen disponer de él, pueden no saber desarrollarlo cuando tienen la posibilidad de hacerlo.