Este martes, volvió una de las competiciones más especiales y atractivas del mundo del fútbol: la Champions League. Con ella, el retorno de la batalla por el trono de príncipes goleadores. En cabeza sigue reinando Raúl González, el ex capitán del Real Madrid con 71 tantos en 144 partidos. La guerra por la corona esta vez está más disputada. Los dos herederos del récord son Lionel Messi y Cristiano Ronaldo con 67 goles y 68, cada uno.
El astro argentino ha liderado la cadena de sucesión desde que cogió el mando del Barça en el primer equipo azulgrana, siendo así el pichichi cuatro veces consecutivas en Europa.
Cuatro veces rey de Europa
En la temporada 2008-2009, con Guardiola dirigiendo la orquestra, Lionel Messi consigue 9 goles en 12 partidos que le impulsan a ganar su primer Balón de Oro como mejor jugador del mundo, siendo el primer canterano del Barça en lograrlo.
La campaña siguiente (2009-2010), tras haber ganado el triplete con el Barcelona, Messi sigue haciendo historia con 8 tantos en 11 partidos. Ese año, los azulgranas también se llevaron la Champions y el argentino fue el primer jugador en marcar 4 goles en un mismo partido de la fase eliminatoria de la Champions League. Otra vez volvia a reinar en Europa con su Balón y Bota de Oro como mejor jugador del mundo.
Una característica innata, un olfato y desmarcaje dignos de imaginación culminaron en 2010-2011 con 12 goles en 13 partidos en Europa. Messi no desvanece: el balón y el gol están conectados a su naturaleza.
No cansado de escribir historia y hacer recordar a los culés de la rareza de jugador que tenían ante sus ojos, en 2011-2012 llegó a la cúspide con 14 tantos en tan solo 11 partidos. Fue en aquel partido contra el Milan, en donde alcanzó la cifra de 14 goles e igualó a José Altafini en el récord histórico de goles en una sola temporada desde la creación de la Copa de Europa en 1955. Ese año, la Pulga se galardonó como el primer futbolista (y hasta ahora el único), en conseguir más de una Bota de Oro (dos) y un Balón de Oro (tres), en toda la historia del fútbol.
A las puertas de Raúl
Dispuesto a seguir por el juego de tronos y desbancar al símbolo del madridismo, Raúl González, Messi empezó la temporada 2012-2013 sin Guardiola, pero bajó las ordenes de un estimado conocido: Tito Vilanova. El 20 de noviembre, tras contribuir con un par de tantos al 0-3 del Barcelona sobre el Spartak de Moscú, se posicionó como segundo junto a Ruud van Nistelrooy en la lista histórica de máximos artilleros de la Liga de Campeones. Messi, al marcar en Moscú, igualó uno de los records de Raúl: haber anotado en 19 ciudades distintas en la máxima competición europea de clubes. Aún le quedaba el más importante.
Pero un seguido de fortuitos sucesos lo apartó de la línea de sucesión. Esa temporada marcó 5 goles en siete partidos, pero Messi ya no estaba al cien por cien. Frente al PSG en París, el 3 de marzo 2013, se le diagnosticó una elongación en el bíceps femoral de la pierna derecha, tan solo fue una semana de baja.
El bíceps femoral, su talón de Aquíles
A raíz de la lesión contra el PSG empezó a encadenar una serie de molestias que no le dejarían volver a ser él mismo. El Barcelona perdió en semifinales de la Champions contra el Bayern, un partido que ni siquiera pudo contar con la presencia del argentino. La Pulga, siempre recordará ese año como su primer pequeño bache en su carrera futbolística, pequeño porque pese a ese contratiempo volvió a ganar la Bota de Oro y el Balón de Oro.
Todos tenemos en mente la temporada 2013-2014, empezó con buen pie a nivel de conjunto, pero no para Messi. El 28 de setiembre recaía del bíceps femoral de la pierna derecha que lo apartó de los terrenos de juego tres semanas, y por lo tanto de la fase de grupos de la Champions. Si eso no era suficiente, el 10 de noviembre su otro bíceps femoral decía basta y el argentino se retiraba de los terrenos de juego hasta pasadas las navidades.
Pese a que no fue el mejor año de La Pulga, arrolló récords en la Liga y en la Champions llegó a la suma de 67 goles en dicha competencia frente al Manchester City. Esa cantidad de goles lo posicionó como el máximo goleador con un solo equipo en toda la historia de la máxima competición continental europea. El Barça cayó frente al Atletico de Madrid sin que Messi pudiera barrer la portería de Courtois y su cifra goleadora en Champions queda intacta hasta la fecha en 67 goles en 86 partidos. Mordiéndole la cola, está Cristiano quién esa temporada volvió a aprovecharse del bajón del argentino quién tan solo pudo disputar 7 partidos y anotar 8 goles, de manera que el portugués se posicionó como máximo anotador de la competición con 17 goles en 11 partidos, sumando un total de 67 goles en 104 encuentros.
Messi, el ave fénix
Tras un año negro, vacío de títulos tanto a nivel colectivo como individual, una temporada dura también por temas físicos y extradeportivos que arrollaron tanto al equipo como al argentino, ha nacido un nuevo Barça y con él, el retorno de Messi.
Este 2014-2015, Messi vuelve a ser Messi. Un reflejo de La Pulga que conocimos el día que Rijkaard lo hizo debutar y Guardiola perfiló. Un Messi resurgido de las cenizas azulgranas como un ave fénix, entregado al equipo y respaldado por Luis Enrique, con una nueva faceta más asistente, pero nunca sin perder su olfato goleador. Un Leo que quiere seguir haciendo historia, demostrar al mundo del fútbol que sigue vivo y que viene para machacar a todo aquel que le pase por delante. En tan solo un amistoso -el Gamper- y las tres primeras jornada de Liga, Lio ya marcó tres goles, ofreció cuatro asistencias y remató doce veces a portería en cuatro partidos.
El choque de trenes está servido, el juego empezó este martes para los blancos y este miércoles para los azulgranas. Messi está dispuesto a destronar a Raúl González y al otro aspirante al trono, Cristiano Ronaldo, quién ya ha sumado un gol este martes en Champions alcanzando la cifra 68. Este año presenciamos el retorno del Rey.