El equipo azulgrana viajaba la capital de España para visitar a uno de los equipos que mejor juego realizan en esta Liga BBVA, el Rayo Vallecano. El conjunto franjirrojo, ligado al fútbol de ataque desde la llegada de Paco Jémez, siempre se ha caracterizado por un tipo de juego netamente ofensivo, en muchas ocasiones se podría decir que hasta suicida, pero que no deja a nadie indiferente. Por su parte, los chicos de Luis Enrique, sabían de la importancia de un buen marcador para hacer desaparecer las malas sensaciones tras lo ocurrido en París y, de paso, continuar en cabeza de la tabla en la lucha por la Liga.
Claudio Bravo toma la delantera
Si había algún futbolista del Barcelona para el que era especial el partido de hoy en Vallecas ese era Claudio Bravo. La desafortunada actuación del alemán André ter Stegen en París le había hecho ocupar muchas líneas en los periódicos durante la semana. El permanente duelo entre porteros podía vivir hoy un capítulo importante y Bravo puso todo de su parte para que así fuese.
Tras unos primeros minutos inciertos, una buena jugada del rayista Alberto Bueno acabó con una formidable parada del guardameta chileno. El disparo raso y cruzado del ex jugador del Valladolid fue respondido de la mejor manera, evitando así el primero de la tarde, por un arquero que quiere ser el portero titular del Barcelona. Su seguridad en los balones aéreos, su juego de pies y su buen hacer en otra jugada ante Leo Baptistao le hicieron salir con la moral bien alta de un partido con pocas notas positivas, pero que si hay alguna que destaque por encima del resto es la suya. Además, con los noventa minutos de hoy sin encajar un gol, Claudio Bravo pasó a formar parte de la historia barcelonista con el mejor inicio de Liga imbatido, superando al mítico Artola y su marca de los 560 minutos.
Paco Jémez lo pone fácil
Paco Jémez es un técnico especial. Independientemente del rival o sus propios jugadores, su manera de ver el fútbol es diferente a la del resto. Sus ideas y su forma de ver el fútbol es innegociable, aunque en días como hoy puedan dejarlo en evidencia. Hablamos del Zdeněk Zeman del fútbol español y todo lo que ello supone, más en partidos de este calibre.
Su línea adelantada contra equipos como el Barcelona son una auténtica mina de oro a explotar por jugadores de la talla de Messi o Neymar. Los centrocampistas piensan, ejecutan y los delanteros corren al espacio. Sólo una mala interpretación del Barcelona permitió al Rayo no irse goleado del encuentro.
Empeñado en triangular en corto y acabar por las bandas, los azulgranas desaprovecharon múltiples superioridades y desmarques de sus atacantes para golear en Vallecas. Sólo Mathieu en algunas ocasiones y Munir leyeron el partido. Más verticalidad y menos fútbol en corto, no había espacio, el partido lo requería así. Al final un 0-2 que sabe a poco y que deja un mal sabor de boca en el aficionado culé, satisfecho únicamente por el resultado final.
La sociedad Messi-Neymar parece no tener límites
Trece goles entre ambos y tres puntos nuevos que llevan su sello. El entendimiento sobre el campo de Messi y Neymar en este arranque de temporada son las mejores noticias para el Barcelona. Con los de hoy, nueve han sido los goles anotados entre ambos en la última semana en una relacion interdependiente que parece no tener fin.
Juegan más juntos, más centrados y se asocian más. Se buscan, se miran y disfrutan sobre el terreno de juego. La buena relación entre ambos se puede vislumbrar nada más saltar al césped y el mayor beneficiado es el equipo culé. Tras un año de adaptación muy limitado por su condición en el campo y los problemas fuera de él, la pareja Neymar y Messi está ante su año. Un año para poder soñar.