La temporada pasada, antes de la visita del Celta de Vigo al Camp Nou, los azulgranas viajaron a Madrid para jugar uno de los Clásicos que paso a la posteridad. El 23 de marzo de 2014, el Barça lo volvió a hacer. Como en 2009, 2010 y 2012, los catalanes, llenos de orgullo, se llevaron los tres puntos del campo del eterno rival. Fue una noche de locura y preciosidad futbolística que coloco la Liga en un puño. Podía haber sido de gloria para Di María y Benzema, pero finalmente se coronaron, una vez más, Iniesta y, especialmente Messi. Su hat-trick que ya está en los libros de historia. Los azulgranas ganaron por 3-4, con remontada incluida a los blancos.

FOTO: FC Barcelona


La casualidad ha querido que el FC Barcelona y el Celta de Vigo se vuelvan a enfrentar después de un Clásico. Esta vez, el resultado no ha sido tan favorable para los culés, donde perdieron por 3-1 en el Bernabéu y encajaron la primera derrota de la Liga. Esta vez la remontada no la protagonizo el equipo azulgrana, si no vino a cargo de los blancos, que fueron capaces de remontar el gol de Neymar en los primeros minutos de partido y ya en la segunda parte, mostraron dominio total del partido.

Este Sábado, después de la derrota ante el eterno rival y tras ganar el pasado miércoles la Supercopa de Catalunya en la tanda de penaltis, Luis Enrique se enfrentara con el equipo que estuvo entrenando la pasada temporada y donde tendrá que demostrar que el juego mostrado en la segunda parte en el Bernabéu fue solo un despiste, y que ha venido a cambiar al conjunto azulgrana para volverlo a lo más alto, tras un año bastante difícil para los culés y con muchas dudas, sobre todo en defensa.

Luis Enrique volvió al Camp Nou 10 años después

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Partido especial para Luis Enrique. Con la última visita de los gallegos al Camp Nou, fue la vuelta de Luis Enrique al campo culé. El que fue la temporada pasada entrenador del Celta de Vigo, volvió al Estadio prácticamente una década tras su último partido con el primer equipo azulgrana. Lo jugó el 16 de mayo de 2004 contra el Racing (1-0). El jugador asturiano formó parte de la plantilla del Barça entre 1996 y 2004. En estos ocho años llegó a jugar un total de 300 partidos oficiales, marcó 109 goles y levantó hasta siete títulos: una Recopa de Europa, una Supercopa de Europa, dos Ligas, dos Copas del Rey y una Supercopa de España.

Luis Enrique salió al Camp Nou con una línea de cinco defensas cuando no tenía el balón, con Fontàs combinando la posición de mediocentro y de central. Un sistema nuevo para los gallegos, como tampoco era habitual para ellos el planteamiento de ceder el esférico por completo al rival.

Sonrisas y lágrimas

El FC Barcelona venció al Celta de Vigo por 3-0 en su última visita al Camp Nou, con dos goles de Neymar y uno de Messi. Tras el triunfo en el Bernabéu, el conjunto azulgrana salió como un rayo, pero en el minuto 20, el Camp Nou se quedo helado, Víctor Valdés sufrió una lesión en la rodilla. Valdés paro una falta (que inicialmente el árbitro había pitado como penalti), pero inmediatamente se lanzo al suelo con evidentes muestras de dolor en la rodilla y, entre lágrimas, abandonó el terreno de juego en camilla. Aunque Neymar ya había avanzado a los azulgranas en un gol en los primeros minutos de partido, la retirada del portero marco trágicamente el partido. Durante diez minutos el Barça se quedo en 'shock' total.

Los azulgrana encontraban a Messi con cierta facilidad. Un buen síntoma. De entrada, el juego del Barça era lúcido y elegante, con Iniesta gigante. El equipo era un volcán en erupción y antes del cuarto de hora había dispuesto de dos oportunidades claras más en las botas de Neymar y Messi.

Aún con el miedo en el cuerpo por saber que efectos tendría la lesión de Valdés, llego un último susto, en una noche llena de sobresaltos. Pinto rechazo un balón en el cuerpo de Bermejo y corriendo hacia atrás para evitar el gol se choco con el palo. Con los tres cambios realizados y el '13' tendido en el suelo, se vivieron instantes de incertidumbre que esta vez, por suerte se quedaron en un susto.

El adiós más cruel para Valdés

Tras 22 años en el club azulgrana, Víctor Valdés vivió el 26 de marzo de 2014, su peor noche. El guardameta se lesionó de gravedad y se perdió lo que quedaba de temporada y de su carrera en el club de su vida y el Mundial de Brasil. No es la primera lesión de Víctor Valdés que sufría la temporada pasada, ya que en el mes de noviembre, con la selección española, sufrió una rotura miotendinosa proximal en el gemelo interno de la pierna derecha. Una lesión que lo dejó fuera del equipo durante ocho partidos, los últimos de 2013. Volvió a jugar en el primer partido del año, ante el Elche en el Camp Nou.

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Víctor Valdés decidió en enero de 2013 que no renovaría su contrato con el FC Barcelona, que finalizo el pasado 30 de junio. Con la grave lesión que sufrió Valdés, el club volvió a ofrecerle la renovación, por miedo a que se quedara sin club después de la recuperación.

El ex guardameta azulgrana, había firmado un precontrato con el Mónaco. Esto no sirvió de nada, ya que el club francés dejó tirado al portero en el último momento, decidiendo no contratarle a pesar de tener un acuerdo firmado para los próximos cuatro años. El motivo de esta decisión fue la lesión de ligamentos que sufrió la pasada temporada. El pasado mes de julio pasó una revisión médica con el Mónaco que no superó.

Aún con el misterio sin resolver, de donde jugara Valdés cuando se recupere de su grave lesión, Valdés se ha estado entrenando con el Bayern de Munich durante el mes de agosto mientras se recupera de la lesión. Ahora Valdés encara la última fase de su recuperación y busca destino, y para ello ha llegado a un acuerdo para entrenar con el United durante unas semanas. Sin embargo, y pese a que el meta catalán se encuentra ya en la ciudad inglesa, e incluso ha visto en directo el partido en Old Trafford, no tiene nada claro si terminará fichando por los tres veces campeones de Europa.

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