Samper es un virtuoso. Pocos jugadores, a su edad, tienen la capacidad de cargarse todo un Barcelona a sus espaldas. El centrocampista catalán puso el fútbol sobre el césped de El Alcoraz. Vale que era contra el Huesca. De acuerdo, estaba acompañado de dos teóricos titulares (Rakitic e Iniesta). Sí, él juega en una competición superior a la del equipo rival. Pero Samper, a parte de realizar una gran partido, hizo una propuesta de club: esto es lo que yo propongo, la más pura filosofía Barça.

Samper propone la más pura filosofía Barça

El hijo predilecto del barcelonismo dominó los tempos del partido y el Barça arroyó al Huesca. Tevenet propuso un partido suicida. Ni apretó arriba, ni se encerró atrás. Los jugadores del Barça recibieron a placer en todas las zonas del campo. Los jugadores del Huesca nunca dieron la sensación de dar ese plus necesario para plantarle cara al gigante. Intentaron combatir a un tanque, con tirachinas desviados. Rakitic, Iniesta y Rafinha recibieron constantemente en zona de tres cuartos.

Rakitic aprovechó un balón parado para poner el primero en el marcador. En el marcador y en la escuadra. La misa escuadra en la que tres minutos después, Iniesta colocó un derechazo sublime. El de Fuentealbilla le pegó desde la parte situada a la izquierda del semicírculo. Golpeó el balón con el exterior y la coló en la escuadra larga. Un Goya convertido en gol. Una auténtica obra de arte.

Un Goya convertido en gol. Una auténtica obra de arte de Iniesta

Si el nombre destacado en verde es Samper, el señalado en rojo fue Douglas. El lateral brasileño jugó los 90 minutos y alimentó esta 'opera buffa' que se está creando a su alrededor. D. Pereira es el antónimo de Samper en el campo. El centrocampista juega liberado, como si llevara 10 años de carrera en primera división. Conduce, amaga, calibra. Se atreve con todo. Tiene un desparpajo inaudito. Douglas es lo contrario. Está cohibido, se paraliza. Cuando recibe el balón parece que sus músculos se agarroten, se congelen. Falla entregas fáciles, centra mal hacia el área rival y fantásticamente bien hacia la propia. Incluso es capaz de sacar, literalmente, balones del estadio.

Crece la "opera buffa" de Douglas

Rafinha se mostró activo, Bartra estuvo imperial una vez más y Pedro no acaba de arrancar. Es cierto que marcó un buen gol pero no está fino en el regate, el desmarque ni en sus movimientos. Si tuvo una buena actuación, pese a no intervenir en exceso, Edgar Ié, el central portugués del Barça B. El nacido en Guinea Bissau es el central más en forma del equipo de Eusebio y el Barça debería pensar en recolocarlo en el lateral derecho, en vista a la temporada siguiente.

Edgar Ié y sobre todo Samper marcan el futuro próximo del Barça. El canterano barcelonés hizo entrega de su propuesta de futuro. En las manos de la dirección técnica está cogerla o apostar por otro estilo. Parece que Zubizarreta y sus ayudantes tienen todas sus cartas puestas en Samper. Samper es la excusa oficial de Zubi para no fichar a Kroos. Parece una buena excusa.