Las vistas del partido parecían puestas en la vuelta de la Copa del Rey, donde el Barça jugara ante el Villarreal el miércoles. El técnico asturiano decidió hacer algunos cambios (pocos), el equipo lo notó en cierta medida, sobre todo en la salida de la pelota desde atrás, pero supo remediar las rotaciones y poner tierra de por medio en un gran partido.

No pareció nada fácil, el césped de los Carmenes parecía en mal estado, algo irregular, lo cual impedía la buena salida del balón azulgrana. Gerard Piqué y Sergio Busquets (entró en el minuto 75), el primero sancionado y el segundo en el banquillo, no pudieron ayudar al equipo en esa faceta, pero finalmente, el equipo no lo necesitó.

El Barcelona comenzó mal, desenchufado, endormiscado. En los primeros minutos del encuentro el Granada fue bastante superior, defendiendo bien la salida del balón azulgrana, sin dar opciones al conjunto culé. El equipo de Luis Enrique necesitaba la victoria tras caer ante el Málaga en casa, y lo consiguió con una auténtica exhibición de Luis Suárez.

Rakitic aprovechó un error defensivo

Foto: Miguel Ruiz (FC Barcelona)

El mediocentro croata, que no estaba apareciendo demasiado en el partido, aprovechó un error de Cala tras un disparo de Luis Suárez y consiguió el primer gol del partido, lo cual hizo despertar al Barcelona de la pequeña siesta de algo más de 20 minutos. Tras esto, el equipo se puso el mono de trabajo y encarriló el partido.

Después del primer gol, todo pareció bastante más fácil. El Granada, aunque no estaba defendiendo como otros equipos ante el Barcelona, se tuvo que abrir más, por lo tanto, el Barça encontró más espacios y llegaron más oportunidades.

Aunque el equipo azulgrana atacaba mejor, la defensa todavía estaba algo dormida. Mathieu y Bartra estuvieron bien, pero en ciertas ocasiones, los atacantes del Granada parecían algo más fuertes, por lo tanto, tuvo que aparecer Claudio Bravo, que prácticamente al finalizar la primera mitad se hizo notar sobre el terreno de juego y evitó el empate a uno.

Luis Suárez volvió a marcar, pero Bartra erró

El ariete uruguayo está en racha. Después de marcar dos goles ante el Manchester City en el Etihad Stadium, consiguió el segundo gol azulgrana nada más comenzar en la segunda mitad, zafándose perfectamente de la defensa del Granada y encarando a Oier sin ningún tipo de temor.

Foto: Miguel Ruiz (FC Barcelona)

Minutos más tarde, el defensa catalán, Marc Bartra, erró en defensa y tras dejar escapar a Lass Bangoura, cometió un penalti, que sirvió para que Fran Rico, canterano madridista y recientemente renovado, acortara distancias con un buen disparo que estuvo a punto de detener Claudio Bravo.

Tras el gol nazarí, el Barcelona estuvo varios minutos desaparecido, no se encontró sobre el terreno de juego, el ataque, comenzando por Neymar y acabando por Lionel Messi, estuvo bastante flojo, y el centro del campo no generaba opciones, por lo tanto, Luis Enrique, decidió hacer entrar a Rafinha en lugar del egarense, Xavi, que no estuvo demasiado fino durante la hora de partido que jugó.

Lionel Messi sonrió de nuevo

El delantero argentino estaba teniendo un partido realmente gris, pero tras la entrada de Rafinha en el minuto 66 al terreno de juego, todo cambió. Los balones llegaban con bastante más precisión al ataque, y cuando pasa eso en el Barcelona, lo más normal es que veamos goles.

Luis Suárez, extremadamente generoso, le regaló el gol a Messi tras un estupendo pase de Ivan Rakitic. El uruguayo, tras marcharse de Oier, le dio el balón al argentino, que estaba muy bien posicionado en el centro del área, y este, aprovechó el regalo de su compañero, y no falló.

Foto: Miguel Ruiz (FC Barcelona)

Con el 1-3 en el marcador de los Carmenes, todo se calmó, el Barça controló el balón con menos problemas, los atacantes azulgranas descansaron un poco más. El centro del campo ya obtuvo el balón, Rakitic y Rafinha formaron una gran pareja, y tras la entrada de Busquets (minuto 75) por Mathieu, la defensa ya se convirtió en un auténtico muro.

Neymar y Mathieu no jugarán ante el Rayo

Dos jugadores bastante importantes en el esquema y las rotaciones de Luis Enrique no podrán jugar el próximo partido de Liga ante el Rayo Vallecano. Tras un partido algo bronco, en el que tres jugadores del conjunto azulgrana vieron amarilla (el otro fue Luis Suárez), el brasileño y el francés llegarán ‘limpios’ al partido ante el Real Madrid.

Aunque Suárez vio la amarilla y podrá jugar el próximo partido, Luis Enrique decidió sustituirle antes de finalizar el partido. El delantero uruguayo, junto a Ivan Rakitic, fue el mejor del partido, y se le vio bastante desquiciado en el banquillo tras ser sustituido. No lo debemos olvidar, el uruguayo está en racha.