La brillante temporada de Jordi Masip en su último año con ficha del filial dio de sí partidos donde el guardameta sabadellense se convirtió en protagonista, tal fue el caso del empate con el líder en Segunda División entonces, hoy militante de la categoría máxima, el Eibar. La actuación estelar de Masip, uno de capitanes y veterano del Barça B, evitó que el conjunto vasco pudiese hacerse con los tres puntos en su propio campo.

De ser convocado, el guardameta podría regresar este sábado a Ipurúa, donde más de uno se echó manos a la cabeza, porque la pelota no entraba, había un muro bajo palos, el infranqueable Jordi Masip, que se ganó a pulso un huequito en la plantilla del primer equipo, donde sin embargo vive sumido en el ostracismo. El bueno de Masip, el primero en llegar a un equipo sin porteros, tras la lesión y consecuente marcha de Víctor Valdés, la salida de Pinto y el adiós de Oier.

Líderes

Se va a cumplir apenas un año del que se llegó a calificar como el mejor partido disputado en Ipurúa en 2013/2014, temporada del meritorio ascenso, al menos hasta aquel 29 de marzo. El Eibar, en esta ocasión flamante conjunto de Primera División, recibe la visita de un Barça líder gracias al tropiezo del Real Madrid en San Mamés la jornada anterior, y a la contundente goleada de los azulgranas sobre el Rayo, el domingo a mediodía.

Ipurúa, la casa del líder la temporada pasada, en Liga Adelante, recibe al primer clasificado, esta vez en la categoría máxima, con todos los honores. También Masip ha dado un salto de gigante desde aquella cita, en la que bloqueó disparos de Yuri, Arruabarrena, Albentosa, y remates de cabeza de Raúl Navas, así como despejó a córner acciones de David Mainz, para evitar a toda costa la victoria de los locales.

El cancerbero, que llegó a La Masía en 2004, tenía contrato hasta junio de 2015 y cumplía su quinta temporada en el filial, cuando el FC Barcelona le ofreció la renovación. Él lo tenía claro: solo seguiría si le ofrecían ficha del primer equipo, pero se lo había ganado a pulso, y en julio de 2014 el de Sabadell estampaba su firma en la extensión de contrato que le ata al club hasta 2017, con una clausula de rescisión de 35 millones de euros.

De indiscutible a olvidado

El acuerdo, que se había anunciado en mayo, convertía a Jordi en el tercer portero, pese a ser el primero en llegar. Era un reto, él lo sabía, y así lo asumió. A sus 26 años, y tras haber sido indiscutible bajo palos en el filial la temporada pasada, donde llegó a disputar 34 partidos, todos como titular, con un total de 3.060 minutos, habiendo sido uno de los capitanes, la presente campaña está pasando casi en blanco para Jordi.

En 2014/2015 solo ha jugado un partido oficial con el primer equipo, figuró en el once inicial en Copa del Rey, en la victoria por 8 a 1 sobre el Huesca, el 16 de diciembre de 2014. Desde entonces, y pese a que se intuía que los tres porteros se repartirían las tres competiciones en disputa, Ter Stegen acabó por acaparar los encuentros de Copa, sumiendo a Masip en el ostracismo más absoluto.

Pero los guerreros de verdad nunca se rinden. Aunque a veces no sale todo de cara, el futuro es de aquellos que no desisten, y que como Masip tienen la humildad y las ganas de querer aprender, de no bajar los brazos. Ipurúa devuelve el protagonismo al canterano, con recuerdos de momentos dulces que han quedado en la memoria de todos para siempre.