El escenario no puede ser más perfecto: el Allianz Arena. La afición bávara estará al acecho de los azulgranas y será una olla a presión, aún así el Barça no debe dejarse llevar por la intensidad local. El equipo de Luis Enrique arrastra un resultado favorable de la ida y jugará con ello, intentando controlar el partido y creando ocasiones de gol en el momento justo.

El Barça buscará su primera victoria en Múnich y la que le lleve a la final de Berlín el próximo 6 de junio. No será fácil porque el Bayern ha ganado sus cinco partidos en casa de camino a las semifinales. Además, el último choque en el estadio germano se selló con una contundente victoria del Bayern (4-0), dirigido por Juup Heynckes, en la temporada 2012/13.

El 3-0 en el Camp Nou es un magnífico resultado, pero todavía quedan 90 minutos de lucha para sellar definitivamente el pase a la siguiente fase. El entorno azulgrana reconoce que a pesar del buen juego hecho en la ida y la ventaja en el marcador, aún queda un choque crucial, que será más difícil que el anterior.

Por ello, toda la plantilla del Barça está en alerta, ya que el conjunto de Pep no pierde en casa en esta edición de la Champions League y ha marcado 13 goles en sus dos últimos partidos, logrando remontar un 3-1 frente al Oporto, en los cuartos de final.

Un Barça a tope

Luis Enrique, entrenador azulgrana, ha sabido dosificar a sus jugadores para que lleguen frescos al tramo final de la temporada. Y así lo están demostrando, ya que los resultados no engañan. En Champions League no pierden desde septiembre ante el PSG, en la fase de grupos (3-2) y han solventado con éxito los octavos de final ante el Manchester City, con un 1-2 en la ida y un 1-0 en la vuelta. Del mismo modo que cosecharon dos buenas victorias en cuartos de final frente al PSG, un 1-3 en París y un 2-0 en Barcelona.

Las sensaciones son muy buenas, desde la portería hasta la delantera, están logrando realizar una gran temporada. A pesar del ‘mal juego’ que desplegaron en el comienzo de campaña; ahora, la situación es bien distinta.

Todos aportan cosas buenas al equipo. Desde la mejorada versión de Dani Alves al despliegue físico de Rakitic, recuperando balones. Con un Leo Messi mágico que llena de asistencias a sus compañeros y sin olvidarse de marcar goles espectaculares a la par que importantes.

Luis Suárez se ha asentado en la plantilla y ha adquirido una conexión letal con sus amigos de baile: Neymar y Messi. El brasileño se ha destapado y deja fluir su calidad en cada encuentro, ayudando al equipo con sus goles.

Bayern sin Robben, Ribery ni Alaba

Paisajes bien distintos son los que se encuentran en Alemania. Después de perder 3-0 en el Camp Nou con un equipo plagado de bajas, el panorama no parece cambiar para el partido de vuelta. Pep Guardiola sigue sin poder contar con sus puñales en ataque: Robben, Ribéry, y su calidad en la defensa: Alaba y Badstuber.

A priori, todo apunta a que el técnico del Bayern repetirá el once de Barcelona, pero no es seguro que haya algún cambio en el once inicial. Sabiendo que al conjunto azulgrana le costó 77 minutos anotar el primer gol, los bávaros intentarán aprovechar sus oportunidades y sellar su portería para lograr dar la vuelta al marcador.

Guardiola no renuncia a su estilo de juego y buscará el control de la pelota, las posesiones largas y las jugadas fabricadas desde atrás. Thomas Müller y Lewandowski pondrán la velocidad en la delantera y en la mediapunta, Thiago, que buscará asistirles de la mejor forma posible. Las jugadas a balón parado serán, también, otra de sus bazas para poder hacer daño al Barça.

Foto: uefa.com

Los azulgranas tienen mucho recorrido ganado y esperan rematarlo este martes a las 20:45 horas en el Allianz Arena. 90 minutos decidirán el camino de ambos equipos, sólo uno puede llegar a Berlín.