La cuenta atrás acababa con el pitido inicial de Undiano Mallenco en el Vicente Calderón. Todas las cábalas formuladas daban paso al espectáculo del fútbol, con una primera y una tercera posición en juego en el estadio rojiblanco.

Simeone ponía en liza a un once de garantías, pese a la baja de Tiago y la suplencia de Mandzukic: Oblak, Juanfran, Godín, Giménez, Siqueira, Koke, Gabi, Mario, Arda, Griezmann y Torres. Por su parte, Luis Enrique sacaba el once de gala pero con un cambio por las molestias de Suárez: Bravo, Alba, Piqué, Mascherano, Alves, Busquets, Rakitic, Iniesta, Messi, Neymar y Pedro.

Presión alta combinada con repliegue intensivo

El Atlético empezaba presionando arriba para no dejar salir al Barcelona, sabiendo que la pelota larga iba a tener menos importancia por la baja de Suárez. Si el Barça lograba superar la primera línea de presión, el Atleti replegaba en campo propio, incluido los dos delanteros.

Y aún con el estilo de partido que va teniendo como tónica en los últimos enfrentamientos, la primera parte fue bastante abierta con opciones para ambos equipos.

El Atleti probó a Claudio Bravo en un par de acciones en las que el portero chileno salvó al Barcelona del 1-0 con dos manos de muchísimo mérito. El Barcelona contestaba con dos disparos de Messi tras jugadas colectivas, uno de ellos a las manos de Oblak y el otro por encima del larguero.

Foto: clubatleticodemadrid.com

Dominio azulgrana en campo rival

El Barcelona empezó a encontrarse más cómodo tras el arreón inicial del Atleti y tenía la posesión en campo rival, calmando el ritmo del partido y buscando a Messi entre líneas. Mario y Gabi sufrían para poder tapar al argentino, que campaba a sus anchas por las espaldas de los mediocentros.

Pero el Atleti cada vez ajustaba más las marcas y en el partido pasaban menos cosas, tanto para un equipo como para el otro. Torres y Griezmann estaban desaparecidos en tareas ofensivas, como el azulgrana Pedro que tampoco entraba en juego.

Dos chispazos del Barcelona sin acabar de concretar servían para cerrar la primera mitad, con la sensación que el equipo entrenado por Luis Enrique quería ganar por sí mismo pero que no iba a ser nada fácil.

Salida fuerte en la segunda mitad

El Atlético de Madrid salía a por el partido en el segundo acto, inquietando a Bravo y forzando córners. El Barcelona volvía a tener problemas en la salida de balón y el conjunto rojiblanco se aprovechaba de los errores para jugar en campo rival y acercarse a Bravo.

El Atleti inquietaba con jugadas a balón parado y pérdidas en la salida azulgrana

Pero el Barça iba afinando en la salida y la presión del Atleti remetía, lo que le permitía al conjunto visitante tener posesiones más largas en campo rival. Aún así, el ritmo del partido era bajo, más favorable al Atlético que al Barcelona.

Y como la mayoría de equipos de Primera División, la atención también estaba en otro partido y de Cornellà no llegaban buenas notícias tras el gol de Cristiano Ronaldo. Ese gol hacía que el Barcelona no sería campeón si no ganaba y quedaban treinta minutos para el final.

Pero Messi quería ser campeón en Madrid

Poco después de la notícia de Barcelona, en Madrid se producía su réplica. Messi combinaba con Pedro en el interior del área, rodeados de muchos defensores colchoneros, y acababa enviando el cuero al fondo de la portería de Oblak con un disparo fino y colocado.

Una arrancada eléctrica del argentino ponía el 0-1 y cogía una asa del trofeo liguero, pero los jugadores sabían del peligro del Atleti y buscaban el segundo. Por su parte, Simeone buscaba la reacción de su equipo y hacía entrar a Raúl García por Mario y, minutos más tarde, era Mandzukic el que entraba en el terreno de juego por Arda Turan.

Messi ha completado una Liga espectacular y ha vuelto a ser decisivo cuando el equipo más lo necesitaba

Y tras un fallo de Neymar, después de un contragolpe de libro comandado por Messi, Stuani alegraba a los azulgrana marcando en el Power8 Stadium el empate a uno, dándole márgen al equipo azulgrana en los 20 minutos restantes.

Pero rápidamente Marcelo se encargaba de poner la pelota en el tejado del Barcelona y ponía el 1-2 en el campo del Espanyol, junto con el empate del Valencia ante el Celta (1-1), obligaba a ambos a ganar para conseguir los objetivos.

Tramo final con nervios

Entraba Xavi por Iniesta, Mathieu por Alba y, más tarde, Rafinha por Rakitic por parte del Barcelona. El Atlético se acercaba por los terrenos de Bravo y el Barcelona quería mantener la posesión para no sufrir más avisos rojiblancos.

Un disparo de Siqueira lo envió Bravo a córner para recordar que no estaba todo hecho. En el saque de esquina no pasaba nada y Bravo blocaba con facilidad. Poco más de 2 minutos más el descuento separaban al Barcelona del final deseado, pero el Atleti apretaba con todo. Una falta de Giménez sobre Neymar daba aire a los azulgrana y Messi estaba a punto de meter el segundo, pero Oblak rechazaba el disparo del argentino.

Pero tras unos minutos con faltas continuadas, el Barcelona era el campeón de Liga, en el Calderón. Casualidades del destino, caprichoso como él sólo, hacía que fuera el mismo día pero un año más tarde que el título del Atlético en el Camp Nou.