Uno de los jugadores que sin duda estarán en el punto de mira en la final de la Copa del Rey será Neymar da Silva. El extremo brasileño, uno de los artífices del título liguero del Barcelona y de la clasificación del conjunto blaugrana para la final de la Champions League, tiene todas las papeletas para ser de los protagonistas en la gran final del Camp Nou.

Con el título de Supercopa de España de la pasada campaña y más recientemente campeón de la Liga BBVA, Neymar se enfrenta a uno de los trofeos que aún no ha conseguido desde que es jugador blaugrana. La Copa del Rey, competición del KO por excelencia en España y con el Barcelona como principal vencedor, el brasileño vio como el equipo dirigido por Gerardo Martino se quedaba a las puertas de ganarla la pasada temporada.

La jugada que pudo cambiar una temporada

Corría el minuto 88, casi 89 de partido en Mestalla. Mateu Lahoz ya había dado la orden a Clos Gómez, se iban a añadir tres minutos de descuento. El 2-1 seguía campeando en el marcador del mítico estadio valenciano. Di María había adelantado al Real Madrid en la primera parte, y Gareth Bale hacía inútil el gol del empate de Marc Bartra en la segunda mitad. Pasaban los minutos y el marcador seguía sin moverse.

Martino ya había gastado todos sus cambios. Adriano, Alexis Sánchez y Pedro habían reemplazado a Fàbregas, Jordi Alba y Bartra, pero pese a la elctricidad de los jugadores, la línea defensiva blanca seguía repeliendo los ataques del cojunto azulgrana. Fue entonces cuando aparecerían los protagonistas de la jugada.

Recibe Messi de espaldas al pico del área. El argentino está muy marcado por Xabi Alonso, por lo que cede el esférico a Xavi. El de Tarrasa no se lo piensa dos veces y marca la jugada con la mirada. Rápidamente Alexis inicia el desmarque y arrastra a Modric y a Sergio Ramos en su carrera, quedan Pepe y Carvajal para marcar a Iniesta y Neymar.

Xavi se decide al fin a dar el pase en profundidad. El destino sabrá sie ese balón buscaba al brasileño o al de Fuentealbilla, pero el caso es que el manchego, para sorpresa de los blancos, se cruza en la trayectoria del balón pero lo deja pasar. En prácticamente décimas de segundo, las dos líneas defensivas del Madrid se rompen, y Neymar se queda en el mano a mano con Casillas.

El de Móstoles sale rapidamente a tapar el disparo, la estrella de la canarinha tiene un sólo momento para decidir por donde tirar. Opta por la puntera, al palo largo, quizás la opción más difícil. Y el balón, caprichoso, es repelido por el poste y se lo devuelve mansamente a las manos de Iker. El guardameta blanco respira tranquilo y en una reacción de puro instinto toca el palo que le dará el título copero a los merengues.

Ha pasado más de un año después de aquel fatídico 16 de abril y ahora el brasileño tratará de resarcirse de aquella jugada tras haber sido fundamental en la temporada en todas las competiciones, especialmente en la Copa del Rey, donde a falta de de la gran final de Mestalla es el segundo máximo goleador de la competición con seis tantos, a sólo uno del sevillista Iago Aspas.

Seis goles en tan sólo cinco partidos son números al alcance de muy pocos. Neymar comenzaría su aventura copera frente al Elche en la ida de los octavos de final, donde marcaría el primer y último tanto de la noche y donde provocaría el penalti del tercer gol, que lo transformaría Messi.

Pero sería frente al Atlético de Madrid donde el brasileño tendría el máximo protagonismo. El Barça se había puesto por delante en la ida tras ganar (1-0) en el partido de ida. Sin embargo, Fernando Torres pondría patas arriba el Calderón marcando a los pocos segundos de comenzar el partido de vuelta, metiendo una gran presión a los de Luis Enrique. El brasileño tendría su momento de gloria en dos contrgolpes. El primero de ellos, en una combinación letal entre Leo y Suárez, que finalizaría con un gran disparo cruzado del 'once' al que nada podría hacer Oblak.

El segundo de ellos, en otra contra llevada por el argentino, donde le pondría un gran balón a Jordi Alba. El lateral, llegando a la línea de fondo y con un pase acrobático, cedió el balón a Neymar que con dos toques volvería a silenciar el Manzanares; el primero para zafarse de Oblak y el segundo para meter el balón en el fondo de la red.

Ya en la vuelta de las semifinales en El Madrigal ante el Villarreal y con el cómodo 3-1 de la ida, Neymar acabaría por encarrilar la eliminatoria adjudicándose otro doblete, el tercero de la competición y convirtiéndose en el que más ha conseguido en esta edición.

Así pues, y siguiendo el gran estado de forma que atraviesa tanto el equipo como el propio jugador, Neymar se postula como el máximo protagonista frente al Athletic de Bilbao este sábado. Un Neymar que quiere brillar y demostrar que sus galones en el vestuario culé siguen intactos pese ese fatídico disparo en la última final del torneo del KO.