Es bien conocido que la Segunda División es una categoría complicada, por estar muy reñida y ser muy física, por todo lo que se juegan muchos clubes que pasan por ella con su primer equipo tras haber tenido un mal año en Primera, por la madurez que exige. Para filiales, como Barça B o Real Madrid Castilla, el objetivo suele ser la salvación, mantenerse en una zona cómoda de la clasificación, y que sus futbolistas ganen enteros en una categoría 'trampolín' para, con un poco de suerte y destreza, dar el salto definitivo al primer equipo.

Una plantilla sin veteranos

Tras conseguir acabar 2013/2014 en tercera posición en la tabla, por segunda vez en su historia, el Barça B regresaba al trabajo en verano con grandes ausencias en sus filas. Sin los capitanes: Ilie, que puso rumbo a Alemania, Masip, quien subió al primer equipo, Sergi Gómez y Planas, que pasaron a vestir la celeste del Celta de Vigo, ni el medio campo titular de la campaña anterior: Espinosa, que se fue al Villarreal, Edu Bedia, que siguió los pasos de Ilie, ni Denis Suárez, cedido al Sevilla.

Regresaron de sus cesiones Joan Román y Robert Costa, sin embargo Jordi Quintillà y Sergio Ayala tuvieron que buscar nuevos destinos, mientras Agostinho Cá se quedó para entrenar con el filial, sin tener ficha. Del Juvenil A llegaron José Aurelio Suárez, Maxi Rolón y Ondoa, además de Godswill, que debido a una grave lesión se quedó sin ficha y Joel Huertas, que marchó cedido al Badalona, así como el camerunés Wilfrid Kaptoum, tras realizar la pretemporada con el conjunto.

El equipo también se reforzó con Diagne (central/lateral), Gumbau (medio), Bicho (medio ofensivo), Cámara (medio ofensivo) y Halilovic (medio). La incorporación del croata fue una de las primeras en anunciarse y la que más impacto causó a nivel de medios, dadas las grandes expectativas que se tenían sobre la joven promesa y su futuro en el primer equipo.

Munir y Sandro, los elegidos de Lucho

Durante la pretemporada, fueron varios los jugadores del filial citados por el primer equipo: Halilovic, Edgar Ié, Grimaldo, Patric, Munir, Adama, Sandro y Samper. Conforme pasaron los días, el grupo se fue reduciendo, y solo unos pocos viajaron al 'stage' de Inglaterra y participaron en encuentros amistosos, pero al comenzar la competición, todos regresaron al filial, a excepción de Munir y Sandro, que siguieron trabajando bajo las órdenes de Luis Enrique.

Munir debutó en competición oficial en la primera jornada de Liga BBVA, y lo hizo con su primer gol en la categoría, ante el Elche en el Camp Nou. Sandro, que vivió ese momento especial para su compañero desde el banquillo, tuvo que esperar al siguiente fin de semana para estrenarse en El Madrigal, donde dio la victoria al equipo con un gol en tiempo añadido. Los dos continuaron sumando experiencias a máximo nivel, con participaciones en Champions y Copa del Rey.

Sandro se incorporó al filial en octubre, Munir en enero

Con Luis Suárez ya en activo, tras haber cumplido sanción, Sandro se incorporó a los entrenamientos con el Barça B en octubre, debutando en Liga Adelante 2014/2015 en la derrota ante el Tenerife, en el Heliodoro Rodríguez López, el 26 de ese mismo mes. Munir se mantuvo un tiempo más con el primer equipo, con el que a menudo entrenó a lo largo de toda la campaña, y regresó al filial en enero.

Aparente buen comienzo

El conjunto de Eusebio inaguró 2014/2015 con una derrota en el siempre complicado El Sadar, ante el Osasuna, que se impuso por la mínima. Este fue el primer encuentro oficial de Diagne, Bicho, Halilovic y Gumbau como barcelonistas, mientras Kaptoum debutaba en la categoría, como titular, firmando una más que decente actuación. Tras este tropiezo, llegaron tres victorias consecutivas: dos en el Mini Estadi, ante Sabadell y Zaragoza, y una tercera en Mendizorrosa, sobre el Alavés.

Ante el conjunto maño se estrenó Robert Costa, quien había subido del Juvenil A la temporada anterior, pero había salido cedido, a la vez que regresó a los terrenos de juego Joan Campins, quien había vivido un auténtico calvario con las lesiones, desde su llegada a Can Barça. El lateral mallorquín pudo disponer de algunos minutos, al tomar el relevo de Patric.

En la quinta jornada, el propio Patric anotó un gol en propia puerta, que dio la victoria al Llagostera, recién ascendido a Segunda División por primera vez en su historia, en el Mini. Este resultado ponía fin a la imbatibilidad de los azulgranas en su feudo, y rompía la buena racha de victorias que había encadenado el equipo, que comenzó entonces a tambalearse, hasta perder del todo el control.

Varapalo en Copa Catalunya

Tras empatar en su visita al Mallorca, donde Cámara anotó su primera diana como culé, el filial cedió ante el Lugo, encuentro en el que debutó el canterano Maxi Rolón, y sacó un punto de El Sardinero, para después superar al Alcorcón 4 a 1, en un partido en el que destacó la figura de Adama Traoré. El de L'Hospitalet se echó el equipo a la espalda, firmando una brillante actuación en la que sirvió tres asistencias e hizo el tercero para los catalanes.

El Barça B no volvería a ganar hasta pasadas seis jornadas, y entretanto, el Europa, de Tercera División, se encargaba de sacarle los colores, al superar a los azulgranas por 3 a 0 en el Nou Sardenya, apeándoles de Copa Catalunya apenas en cuartos de final, en una eliminatoria a partido único. La sanadora victoria llegó en el derbi catalán con el Girona en Montilivi, y se dio gracias a un solitario gol de Halilovic.

El croata, según palabras de Eusebio, se iba adaptando al juego del Barça, tras haber estado acostumbrado a hacer y deshacer a su antojo en otros equipos. Según el técnico, el centrocampista tenía que acostumbrarse a mantener la posición y cumplir su función dentro del conjunto, aspectos en los que iba mejorando con el paso del tiempo.

Desastroso cierre de 2014

Si bien al filial le faltó suerte para extraer puntos en partidos en los que comenzó adelantándose, y acabó cediendo, en muchas ocasiones demostró tener cero ideas, erró en demasía en defensa y sufrió para crear arriba, una tónica que se repetiría cada vez con mayor frecuencia. El golpe más duro llegó en el enfrentamiento con el Valladolid a domicilio, el último antes del parón navideño, en el que los azulgranas fueron humillados con una derrota por 7 a 0.

Juste debutó oficialmente ante el Recre, el 18 de enero

El comienzo de 2015 no fue mejor: el líder, la UD Las Palmas, se llevaba los tres primeros puntos del Mini, y una semana después, el filial volvió a caer fuera de casa, ante el Leganés. El conjunto de Eusebio recuperó a Munir ante el Recreativo, y se llevó los tres puntos, en un día en el que destacó el debut oficial de Sergio Juste, que entró por Patric en el minuto 90, casi de modo simbólico.

Dos semanas más tarde, y tras caer ante el Osasuna por la mínima, con el mismo once con el que había superado al conjunto andaluz, el Barça B se impuso al Sabadell en la Nova Creu Alta, donde se produjo el debut de José Aurelio Suárez bajo palos. El asturiano relegaba a la suplencia a Ortolá, que había sido incuestionable en las veintidós jornadas anteriores.

Eusebio, destituido

Entre semana el equipo jugó un amistoso en Ciudad Deportiva ante el Beijing Guoan, donde los no habituales tuvieron ocasión de participar, y Samper pudo agarrar ritmo, tras superar un proceso gripal y estar ausente. En este encuentro Sergio Juste fue titular y actuó como capitán, Lucas tuvo que retirarse lesionado y participaron los juveniles Rodri y Moha.

Vinyals tomó las riendas del filial, tras la salida de Eusebio

El fin de semana el equipo volvió a la competición regular, con la visita a la Romareda, donde cayó goleado por el Zaragoza. El 9 de febrero el club anunciaba la destitución de Eusebio Sacristán como entrenador del filial, tras 150 partidos oficiales en el banquillo, y ponía a Jordi Vinyals al mando. El vallisoletano dejaba un vestuario sacudido, además de por los malos resultados, por las declaraciones del propio técnico, que había criticado individualismos, sin decir nombres, pero señalando a Adama, a quien condenó a la suplencia durante semanas.

El estreno de Vinyals en el banquillo trajo consigo cambios en la alineación, Sergio Juste fue titular por primera vez y vistió el brazalete de capitán, mientras Adama regresaba al once y Patric figuraba en el medio del campo, en la posición de interior en la que actuaría el resto de la temporada. Pese a los múltiples golpes de moral que se llevó el conjunto, en forma de expulsiones, goles en propia puerta y remontadas de los contrarios, el juego gradualmente mejoró, pero ya era demasiado tarde.

Se consuma el descenso

Diez jornadas después, Vinyals pudo disfrutar de su primera victoria como técnico del Barça B, ante la Ponferradina, en un partido que los azulgranas acabaron con diez, por la expulsión por doble amarilla de Sergi Palencia y Grimaldo, y que salvó Suárez con una genial actuación bajo palos. Durante la semana que siguió, se produjo el regreso de Godswill a los campos, al participar en un amistoso con el Juvenil A, en el que fue titular y disputó 60 minutos, a la vez que el club informaba de la lesión de tobillo de Bagnack, que le haría perderse el resto de la temporada.

El equipo volvería a sumar otros tres puntos a domicilio, en su visita al Mirandés, donde Adama fue clave para conseguir el resultado. El equipo, que ya sufría mucho en defensa, se quedaba además sin Grimaldo, que tuvo que ser sustituido debido a una lesión. En los últimos compromisos en Liga Adelante, ex azulgranas como Jeffren Suárez y Sergio Araujo serían verdugos del conjunto catalán, en sendas derrotas.

Y se consumó el descenso, en la derrota en casa ante el Leganés el pasado 31 de mayo, pues solo un milagro podía salvar a un equipo hundido desde hacía muchas semanas. Quedaba una jornada más por disputar, para cerrar una campaña desastrosa, en la que incluso la proyección de algunos jugadores se había visto frenada por la caótica situación del conjunto, que la próxima temporada militará en Segunda División B.

El equipo más goleado de Segunda

El Barça B cerró la temporada como colista, con 36 puntos, dos menos que el Sabadell, sumando nueve victorias, nueve empates y veintidós derrotas,siendo con diferencia el equipo más goleado de la categoría. A favor, solo contabilizó 55 dianas, con Dongou como máximo realizador, con 11, seguido por Sandro, con 8 y Cámara, con 6. El camerunés fue el jugador más utilizado, disputó 39 partidos - un total de 3.063 minutos -, seguido por Grimaldo, Adama, Gumbau y Samper.

De los recién llegados, fue Gumbau el que corrió mejor suerte, o al menos el que disfrutó de la confianza de ambos técnicos y el que más oportunidades tuvo. El ex del Girona llegó a relegar a Samper al banquillo durante algunas jornadas, ocupando así la posición de pivote, y actuando en otras ocasiones como interior, e incluso de central, en la recta final de campaña. El centrocampista gallego Bicho fue el que dispuso de menos minutos de juego.

De los que subieron del Juvenil, Kaptoum apuntó muy buenas maneras, pero una lesión en los isquiotibiales, por la que sería después operado, le privó de hacerse con un hueco en el equipo. Por otra parte, y contra todo pronóstico dado que se trataba de su primer año en la categoría de plata, José Aurelio Suárez 'arrebató' el puesto a Ortolá bajo palos, desde su debut ante el Sabadell en enero.

El año en el que el primer equipo celebraba su segundo triplete histórico, el filial barcelonista se despedía de Segunda División, tras una campaña nefasta e improductiva, tanto a nivel de conjunto como individual, salvando detalles, como algunas de las cabalgadas de Adama por la banda derecha, o toques de clase, de mago, de Sergi Samper. Lo mejor que le podía pasar al Barça B era que la temporada tocase a su fin, y comenzar de cero, dando paso a un tiempo de reflexión y cambios, para que la Masía continue siendo una fuente inagotable de talento y grandes futbolistas.