Velocidad, agilidad, verticalidad y profundidad. Aleix Vidal reúne muchas cualidades pero son esas, las principales, las que han llevado al catalán nuevamente al conjunto azulgrana toda vez que ha despuntado en Almería y explotado en el Ramón Sánchez Pizjuán.

Apenas tres millones le costó al Sevilla contratar a Aleix Vidal el pasado verano cuando éste despuntaba en el conjunto almeriense que tras despedir a Crusat recibió a Vidal, un futbolista con mucha proyección. Diestro que jugaba en su banda natural y con una velocidad endiablada, en los Juegos del Mediterráneo fueron hábiles para dar la oportunidad al eléctrico velocista dotado de un buen uno contra uno.

Tras el paso por Almería, el bueno de Monchi, secretario técnico del Sevilla, puso la lupa ante el talento de Aleix Vidal y por esa insignificante cifra de tres millones recaló en el conjunto hispalense de un Unai Emery que le ha cambiado la vida.

Unai Emery, que de laterales ofensivos entiende como el que más, poco a poco le fue dando minutos y, primero como extremo en el 1-4-2-3-1 y luego como lateral, Aleix fue cumpliendo con creces a las expectativas. El que también fuese entrenador del Almería, ya ha sido reconocido en infinidad de ocasiones por ese talento de reconvertir extremos en laterales, como también ha conseguido hacer el Barcelona en antaño. Alberto Moreno, Bernat, Alba o Aleix Vidal han pasado por las manos del Unai antes de hacer el salto al estrellato futbolístico por antonomasia. 

Vidal ha ido poco a poco, sin prisas pero sin pausa, cogiendo su sitio en el fútbol nacional. El catalán, que llega por 18 millones, no podrá jugar hasta enero pero hasta la fecha deberá, y tendrá la oportunidad, de entrenar como lateral con su ejemplo a seguir en cuanto a aclimatación con el puesto y el estilo se refiere, Dani Alves. El brasileño, que también llegó del Sevilla, puede ejemplificar a la perfección el camino a seguir para Vidal. Rápido, eléctrico y versátil, Aleix lo tiene todo para triunfar como lateral en su casa, en el Camp Nou.

Lo consiguió, con mucho trabajo, en el Ramón Sánchez Pizjuán. Ahora, en el templo culé, los Neymar, Suárez, Piqué o Messi le acompañarán y aconsejarán en su acomodamiento para la competencia, bonita y a la par feroz, que le espera con Dani Alves, su ejemplo a seguir al que le tendrá que quitar su puesto a partir del 1 de enero, cuando se pueda sentir nuevamente futbolista. La velocidad del catalán tardará en verse en el Camp Nou pero una vez se presente allí ya no se irá.

VAVEL Logo
Sobre el autor