Tras su breve paso por el FC Barcelona, con el que se comprometió el verano pasado hasta el 30 de junio de 2017, fijando su claúsula en 12 millones de euros, Diawandou Diagne marcha cedido a su club de procedencia, el KAS Eupen belga, y podrá de esta manera continuar jugando en Segunda División.

El defensa, internacional con Senegal, que llegó para reforzar la retaguardia del Barça B hace apenas un año, y puede actuar tanto en el centro como en el lateral, fue uno de los jugadores más utilizados en el filial, especialmente durante el tiempo en que Eusebio estuvo en el banquillo.

Diagne, que debutó con la azulgrana en partido oficial en la primera jornada de Liga Adelante, ante el Osasuna en El Sadar, disputó 28 encuentros en su primera campaña en el club, totalizando 2.286 minutos, y dio buena muestra de su polivalencia, al rendir en diversas posiciones sobre el terreno de juego.

Una amarga primera campaña

El futbolista, que está a apenas unas semanas de cumplir 21 años, dejó buenas sensaciones desde el principio, por su actitud y esas ganas de aportar en cualquier posición en la que se le probase, sin embargo se acabó sumergiendo en la nube de oscuridad que se extendió gradualmente sobre el equipo, e incluso pasó un período irregular, en el que se vio relegado al banquillo.

Durante su primer año en el filial vivió la amarga experiencia de un descenso de categoría, al que el conjunto barcelonista se vio condenado, tras infinitas jornadas de desencanto. Formó pareja de central con Edgar Ié, Bagnack, Robert Costa, Sergio Juste e incluso Gumbau, al que en las últimas jornadas se pudo ver en la zaga. Diagne vuelve a su equipo de origen, en principio por una temporada, para seguir formándose y compitiendo a buen nivel.

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Sobre el autor
Noelia Déniz
Siempre un placer hablar de deportes, y particularmente de fútbol formativo y la cantera del FCBarcelona