La eliminatoria ante el Valencia se dejó prácticamente sentenciada en el Camp Nou con una contundente victoria por 7-0. Como consecuencia de ello Luis Enrique ha decidido que Gerard Piqué, Javier Mascherano, Luis Suárez y Andrés Iniesta no viajen a Valencia para jugar la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey en Mestalla.

A estas bajas por decisión técnica hay que sumar la ya habitual de Rafinha por lesión, y la de Leo Messi. El argentino ha pasado hoy mismo por el quirófano para someterse a una litotricia con el fin de poder superar los problemas renales que arrastra desde finales de 2015. Estos problemas se habían manifestado de nuevo recientemente, y tanto el técnico, como el Barça y el jugador, han decidido aprovechar esta semana en la que el compromiso parece carecer de importancia para llevar a cabo esta leve operación.

Casualmente los cuatro jugadores que han sido descartados para el partido en Mestalla están a una amarilla de la suspensión en Copa del Rey, y por lo tanto, de perderse la final de esta competición en la que presumiblemente debería estar el FC Barcelona. Luis Enrique no quiere afrontar ningún tiempo de riesgo y tirará de jugadores de la cantera para este encuentro, en el que no se debería de sufrir salvo sorpresas mayores. Los cuatro jugadores, además de Leo Messi, con el que entrenaran el miércoles, se quedan en Barcelona para centrarse en mantener la distancia con los máximos competidores en Liga.

Los cuatro descartados por Luis Enrique, más los que aún puede hacer el asturiano, deberán acudir a la Ciutat Esportiva de Sant Joan Despí para realizar el entrenamiento matutino que les preparará de cara al partido del próximo domingo ante el Celta de Vigo en el Camp Nou. Los azulgranas afrontan con ganas el encuentro después del doloroso 4-1 infligido por los gallegos en Balaídos.