El próximo domingo, el conjunto dirigido por Luis Enrique se planta en el Camp Nou ante el Espanyol en la penúltima jornada de la competición liguera y debe ponerse el uniforme de trabajo si no quiere perder la Liga en el último suspiro. Para ello, el Barça necesita que aparezca una de sus piezas fundamentales: Leo Messi.

El crack argentino le tiene tomada la medida al equipo perico y le ha anotado quince dianas, convirtiéndose así en el máximo goleador histórico del derbi. De los 24 partidos oficiales, entre Liga, Copa del Rey y Supercopa de España, Messi ha marcado dos dobletes, un hat-trick y un póker de goles, completando de esta forma sus 1888 minutos jugados contra el Espanyol.

La última vez que ambas escuadras se vieron las caras fue en la vuelta de los octavos de final de la Copa del Rey, partido en el cual Leo dio una asistencia a Munir y éste marcó un doblete para lograr el 0-2 definitivo. En la ida, el ‘10’ azulgrana fue fundamental para la victoria del Barça (4-1) anotando un doblete y dando dos asistencias de gol. De esta forma, el argentino se quitó el mal sabor de boca que le dejó el encuentro de Liga, ya que no pasaron del empate a 0.

Por su parte, el jugador del Espanyol que más goles ha anotado frente al Barça ha sido Marañón, con nueve tantos. Y le sigue, Tamudo, con ocho. Este jugador catalán es muy conocido entre los blaugranas por el famoso “Tamudazo”. Aquel nueve de junio de 2007, el ‘23’ blanquiazul dejó mudo al Camp Nou con un doblete. El Barça empató el encuentro y el Real Madrid aprovechó para llevarse la Liga en el último momento.

Aún está en el recuerdo ese momento y podría llegar a repetirse si el Barça no aprieta los dientes y muestra su poderío en el tramo final. Dos candidatos, Atlético de Madrid y Real Madrid, están al acecho en busca de algún fallo culé. A pesar de ello, el equipo de Luis Enrique depende de sí mismo para llevarse esta Liga.

Las estadísticas avalan al Barcelona

El conjunto azulgrana ha jugado un total de 98 partidos en su casa frente al Espanyol, de los cuales 74 ha salido victorioso, 12 ha empatado y otros 12 ha perdido. Las cuentas salen favorablemente hacia el Barça aunque cuando se trata de fútbol, nunca se sabe. Sin embargo, los números cambian cuando es el Barça quien juega en campo ajeno. En este caso, desciende a 37 las victorias, 30 los empates y 31 las derrotas.

Por tanto y en esta situación actual, el equipo de Luis Enrique tiene sus cartas a favor: las estadísticas y Leo Messi pero, tal y como los acontecimientos han ido transcurriendo en las últimas semanas, el Barça debe dar el último apretón para que la competición liguera no se les escape de las manos. El que juega con fuego, bien puede acabar quemado.

Un último empujón

Los jugadores azulgranas saben de la importancia de estas dos últimas jornadas donde se decide todo y no pueden fallar. Los resultados anteriores han sido muy holgados (0-2 al Betis, 6-0 al Sporting de Gijón y 0-8 al Deportivo de la Coruña) aunque su juego ha ido decayendo en este tramo final de la temporada.

Leo Messi no marcó en el último partido jugado ante el Betis, pero sí lo hizo en el anterior ante el Sporting. Durante toda la campaña, el juego del argentino ha sido espléndido y fundamental para el equipo. Sin embargo, desde la jornada 30 de Liga ante el Villarreal sufrió un “bajón” en el que estuvo cinco partidos consecutivos sin marcar y el Barça lo notó porque perdió tres partidos, empató uno y ganó otro.

La plantilla se encuentra en un momento de la temporada tan crucial que la concentración debe ser máxima porque un fallo puede provocar la pérdida del trofeo liguero.

Fdo: Nuria Gras