"El Valencia es un gigante dormido al que pienso despertar". Miroslav Djukic arrivó a Valencia con un mensaje optimista que caló en la sufrida afición de Mestalla, que se siente identificada con quien fue pieza clave del Valencia en su época dorada. Tras tres meses de competición la ilusión que había despertado el equipo se ha tornado en resignación por el juego desplegado y los resultados obtenidos. Por la avenida de Suecia ya no queda ni rastro del equipo bronco y copero que conquistó dos Ligas frente al Real Madrid de los Galácticos, y, que maravilló a Europa con su juego vertical. La fuga de estrellas de los últimos años ha provocado una progresiva pérdida de calidad en el plantel valencianista. Sin jugadores que marquen las diferencias, la afición exige coraje y orgullo para defender el murciélago, algo que tampoco se está produciendo.

"El Valencia es un gigante dormido al que pienso despertar"

Lo cierto es que el Valencia cuenta con una de las plantillas más equilibradas del campeonato, que le debería servir para situarse en los puestos de arriba y luchar por volver a la Liga de Campeones, un objetivo vital para la economía de guerra del Valencia. Al equipo le cuesta mucho hacer goles, y bastante poco recibirlos, los 19 goles encajados en 11 encuentros corroboran esta afirmación. Djukic apuesta por un 4-2-3-1, el esquema más utilizado en Mestalla en las últimas temporadas. La portería estará ocupada el domingo por Diego Alves. El portero brasileño estaba en todas las quinielas para abandonar Mestalla durante el verano, pero su gran trabajo bajo palos le han convertido en el encargado de defender la meta valencianista.

La defensa, un punto débil

La línea defensiva habitualmente está formada por Bernat, Ricardo Costa, Mathieu y Joao Pereira. El lateral derecho portugués es el jugador con el que más se identifica el público, su entrega en cada jugada le han convertido en indiscutible en el once valencianista. En la izquierda, Bernat, un jugador de banda reconvertido a lateral, que le ha ganado el puesto a Andrés Guardado. Ricardo Costa es el capitán del Valencia, el central es uno de los mayores peligros a balón parado, no en vano, es el segundo máximo goleador del equipo ché.

En el centro del campo, el entrenador serbio ha apostado por un doble pivote formado por Javi Fuego y Banega. El "10" argentino es el futbolista con más calidad de la plantilla, esa que muestra con cuentagotas en los partidos. Suya es la responsabilidad de hilvanar las jugadas de ataque del equipo ché, sin embargo Éver Banega no está rindiendo a un buen nivel en este inicio de temporada, y el Valencia ha encajado más de un gol por pérdidas de balón en zonas peligrosas del terreno de juego.

Fede Cartabia ha sido la noticia positiva del Valencia en el arranque liguero. El canterano valencianista se ha hecho con un puesto en el once titular. Su velocidad y desparpajo han encandilado al aficionado valencianista, que ya le ha tributado más de una ovación para reconocer su entrega. Pese a ser zurdo, Fede ha ocupado ya las dos bandas del ataque valencianista, dependiendo de las exigencias de Djukic. La otra banda es probable que sea para Sergio Canales. El futbolista cántabro aún tiene que coger el ritmo de competición tras el calvario de lesiones que ha sufrido desde su llegada a la ciudad del Turia. Feghouli ni está ni se le espera, así que Canales parte con ventaja respecto al argelino.

Los dos puestos del ataque están ocupados por Postiga y Jonas, toda vez que Pabón parece haber agotado su crédito. Jonas Gonçalves ha sido el salvador del Valencia en varios partidos. Sus goles han impedido que el conjunto ché ocupe una posición en la tabla aún peor de la que ostenta en este momento. Por su parte Postiga, llegó como el sustituto de Roberto Soldado, pero el portugués solo ha podido celebrar 3 dianas, que no han significado ningún punto para el Valencia.

En el banquillo esperarán su oportunidad los Alcácer, Parejo, Oriol Romeu y una pléyade de futbolistas de calidad que hacen aún más incomprensible la imagen que está mostrando un equipo que no hace mucho era temido allende los Pirineos. Si a la situación actual que atraviesa el Valencia, le unimos que el Coliseum es un estadio que tradicionalmente no se le ha dado bien, es obvio que al Getafe se le presenta una oportunidad de oro para aumentar su casillero de puntos, e intentar colarse en puestos Champions.