Ambiente festivo en Los Cármenes para el derbi andaluz que enfrentaba al Granada CF con el Málaga CF. Partido muy igualado ya que ambos conjuntos llegaban con un sólo punto de diferencia en la tabla. Y encuentro con hermanamiento entre aficiones, como ya sucediera la temporada pasada. Un derbi, sí, pero sin ninguna rencilla. Todo lo contrario: jolgorio en los aledaños del estadio y en las gradas, repletas de granadinistas y de más de mil malaguistas. Los rojiblancos fueron los que salieron más contentos del estadio, pues el equipo pudo lograr la segunda victoria en casa en lo que va de temporada, gracias al hat-trick anotado por El Arabi.

Obligado por las bajas, Lucas Alcaraz cambió el once de los últimos partidos pero no el esquema de juego. El trivote que tan buenos resultados le está dando al equipo volvió a reinar en el centro del campo granadinista, aunque esta vez estuvo formado por los ya habituales Iturra y Fran Rico, a quienes acompañó Yebda. Y es que Recio no pudo participar en este partido debido a una cláusula en su contrato de cesión del Málaga. Otro cambio obligatorio fue en el lateral diestro, que no pudo ocupar Nyom por sanción. El joven Foulquier le sustituyó. Y en el centro de la defensa, el técnico andaluz prefirió apostar por la pareja formada por Diakhaté y Murillo, en lugar de Diego Mainz.

Bernd Schuster, por su parte, puso en liza un once formado por Willy Caballero en la portería; Gámez, Sergio Sánchez, Angeleri y Antunes en defensa; Tissone y Darder en el doble pivote; Fabrice, Portillo y Eliseu por delante y como delantero centro al joven Samuel, salvador del equipo en la anterior jornada contra el Betis, cuando anotó un gol in extremis.

El partido comenzó con respeto por parte de ambos equipos. Sin dominio claro de ninguno de ellos. Parecía que el hermanamiento que reinaba entre ambas aficiones también se trasladaba al terreno de juego. Ni Granada ni Málaga llegaban con excesivo peligro a la meta contraria. La primera ocasión más clara fue para el Granada. Buonanotte se zafó bien de su marcador y dio un buen pase a Foulquier, quien centró buscando a El Arabi, pero Sergio Sánchez despejó sin problemas. Corría el minuto ocho de partido.

El Málaga también lo intentó por medio de Portillo. El canterano disparó desde fuera del área, pero su lanzamiento lo atajó sin problemas Roberto. Después el balón iría de un área a otra, pero sin excesivo peligro para ambos guardametas.

El conjunto rojiblanco gozó de una nueva oportunidad en el minuto 12. Brahimi se internó en el área después de recibir el balón en la frontal, procedente de un saque de esquina botado por Fran Rico y peinado posteriormente por Diakhaté. El franco-argelino amagó el centro, pero optó por el disparo a puerta, y  ya, casi sin ángulo, mandó el balón fuera.

El conjunto de Schuster respondió con un lanzamiento de Fabrice. Antunes dio un buen pase al joven camerunés, quien se revolvió muy bien en el borde del área y regateó, pero su disparo se marcho a córner. Muy impreciso el Málaga en los metros finales, al igual que el Granada durante la primera parte. Aunque la ocasión más clara en la que perdonó el conjunto rojiblanco fue una jugada tras un buen centro de Foulquier por la banda derecha, que El Arabi no acertó a rematar bien con su pierna izquierda. El marroquí llegaba solo, pero su disparo se marchó por encima del larguero de la portería de Willy Caballero.

Willy Caballero evitó el gol del Granada en la primera mitad

Precisamente el guardameta argentino sería el protagonista de las siguientes jugadas de peligro del Granada. El portero sacó una mano providencial en un disparo de Foulquier con su pierna derecha, en el minuto 40. Y también un minuto más tarde, esa vez en una jugada tras un saque de esquina botado por Fran Rico, que tocó de cabeza Murillo y que permitió a Buonanotte disparar a puerta. Pero de nuevo Caballero evitó el gol del Granada, despejando el balón con el pie.

Otra ocasión clarísima para el Granada antes de llegar al descanso fue para Brahimi. El franco-argelino no aprovechó un pase entre líneas de Buonanotte. El balón se le enredó entre las piernas y perdió así una buena oportunidad de poner por delante al conjunto nazarí. Con ese 0-0 se llegó al tiempo de descanso, en una primera parte que estuvo bastante igualada y en la que Caballero fue el protagonista en los minutos finales, evitando el gol del Granada. Todo apuntaba a que tanta igualdad sólo se podría decidir por algún detalle.

Un error de Angeleri condenó al Málaga que supo despertar

Lo que decidió que la balanza se decantara para uno u otro equipo en el comienzo de la segunda mitad fue un error defensivo. Angeleri perdió el balón ante la presión de un incansable Fran Rico. El gallego se llevó bien el balón y disparó a puerta, pero ahí estaba de nuevo Willy Caballero; sin embargo, el argentino despejó con su mano izquierda para el centro del área y llegó El Arabi, libre de marca, para anotar con su pierna derecha el primero para el Granada. El delantero marroquí desenfundó su imaginaria pistola para celebrar el primer tanto de una noche de fiesta en las gradas de Los Cármenes.

Pero el Málaga, lejos de amilanarse, despertó y tuvo diez minutos de asedio a la meta defendida por Roberto para tratar de buscar el empate. Y lo logró seis minutos más tarde. Schuster introdujo en el terreno de juego a Juanmi en lugar de Frabrice y el delantero, que tan sólo llevaba un minuto sobre el verde, anotó el gol del empate para el conjunto malagueño. Antunes disparó desde fuera del área, Roberto no blocó bien el balón y su rechace lo aprovechó Samu para asistir a Juanmi, quien batió sin contemplaciones a Roberto.

El Arabi no perdonó

Pero el acoso malaguista a la meta de Roberto cesó. El Granada comenzó a insistir en la recuperación en el centro del campo y de nuevo aprovechó otro fallo del conjunto de Schuster. Yebda robó un balón, que pasó a Brahimi y éste llegó a la línea de fondo para centrar. Ese centro encontró un rematador que esta noche no perdonó: El Arabi. El delantero marroquí anotó el segundo gol, que adelantó al Granada en el marcador en el minuto 58 de partido.

Alcaraz introdujo entonces a Piti en sustitución de Buonanotte, manteniendo así su apuesta ofensiva. Y más tarde retiró a Yebda, a quien sustituyó el joven Fatau, quien jugó uno minutos más en Primera División. Con las sustituciones el partido bajó en ritmo. Ambos equipos trataban de controlar en el centro del campo, pero se produjeron muchas faltas e interrupciones, así como pérdidas de balón. Circunstancias que tan sólo beneficiaron a un equipo, el Granada CF.

El Arabi marca su primer hat-trick con el Granada

La sentencia del partido llegó en el minuto 76. De nuevo El Arabi aprovechó un buen pase de Brahimi, tras una gran jugada individual del franco-argelino, para poner el 3-1 en el marcador. El delantero marroquí disparó con su pierna derecha solo dentro del área malaguista y puso la guinda a una noche de fiesta en Los Cármenes. Y también para él, pues es la primera vez que consigue un hat-trick como jugador del Granada.

El Arabi tras marcar su 'hat´trick' . Foto: Antonio L. Juárez

En los diez minutos finales hubo alguna ocasión más. Piti lanzó una falta con su pierna zurda, que recordó al gol anotado la pasada jornada en el campo del Levante y que dio la victoria a los rojiblancos. Pero esta vez, Willy Caballero volvió a hacer una gran intervención y despejó el balón. Con los olés en la grada, llegó el cambio del héroe de la noche: El Arabi se marchó para dejar su sitio a Riki. El madrileño también tuvo alguna oportunidad, la más clara en el minuto 90, con un disparo con su pierna izquierda al que de nuevo respondió Caballero con una gran parada. Pero ya no hubo más.

Este resultado permite al Granada marcharse a un nuevo parón liguero por el compromiso de las selecciones, con la tranquilidad de haber logrado la segunda victoria de la temporada en casa. Tres puntos que le permiten sumar 17 y situarse en la novena posición momentáneamente, a la espera de lo que suceda en el resto de partido de esta décimo tercera jornada. Pero, en cualquier caso, llegar en una cómoda posición a su próximo compromiso contra el FC Barcelona, en el Camp Nou. El Málaga, por su parte, se queda con trece puntos. Ahora a cuatro de distancia con el descenso, pero si suman los últimos clasificados, se quedará a tan sólo uno por encima de los puestos de peligro.