El Granada Club de Fútbol ya ve la salvación muy cerca gracias a un épico triunfo ante el Fútbol Club Barcelona. Los granadinos impusieron una férrea defensa, consiguieron adelantarse rápido en el marcador y aguantaron el chaparrón de los del Tata Martino durante todo el encuentro.
El equipo rojiblanco llegaba al encuentro tras tres derrotas consecutivas y con el descenso amenazando de cerca. Lucas Alcaraz introducía en el once inicial a Orestis Karnezis en lugar de Roberto, que se caía a última hora por una lesión arrastrada del partido ante el Málaga. Además, Foulquier ocupaba el lateral izquierdo granadino por la sanción de Bryan Angulo.
El Barcelona, por su parte, acudía a la cita en Granada tras la dura eliminación en Champions a manos del Atlético de Madrid y con la imperiosa necesidad de ganar para seguir luchando por la liga. El Tata Martino tenía problemas en la defensa, con las bajas de Pique, Puyol y Marc Bartra, lo que hizo que Busquets ocupara el centro de la zaga con Mascherano y Song ejerciera de medio centro. A su vez, el técnico argentino daba descanso en los laterales a Dani Alves y Jordi Alba e introducía en el once a Martín Montoya y Adriano.
El Granada se adelanta pronto
El Barça comenzó el encuentro como siempre, teniendo la pelota en su poder y haciendo posesiones largas pero sin un juego rápido. El Granada esperaba atrás e intentaba salir con balones largos buscando la segunda jugada a través de El Arabi. Los azulgranas, sabedores de que Foulquier se estaba desempeñando a banda cambiada, buscaban con precisión los balones a la espalda del defensor francés. Así llegó la primera ocasión del Barcelona en un remate de cabeza de Montoya que se atajaba Karnezis.
Brahimi abrió el marcador en el minuto 15
Cuando se cumplía el primer cuarto de hora de juego el Granada conseguía ponerse por delante en el marcador. Los mediocampistas nazaríes apretaron a Alex Song en la medular, le robaron el balón y Fran Rico introducía un pase a la espalda de Busquets para que Brahimi aguantara la embestida de Montoya y batiera a Pinto por el palo corto. Los rojiblancos hacían diana en su primera ocasión y volvían a dejar en evidencia las carencias de la defensa culé.
Tras el gol, el Granada comenzó a defender más atrás y el Barcelona empezó a crear peligro serio a la portería de Karnezis. Los culés abrían el juego a las bandas y Neymar entraba en acción para poner en aprietos a Nyom cada vez que lo encaraba. A su vez, Montoya y Pedro Rodríguez seguían buscándole las cosquillas a Foulquier por el lateral izquierdo del Granada. Los ataques azulgrana se sucedían con sendos cabezazos de Neymar y Messi que no conseguían encontrar la puerta granadinista.
Cuando más apretaban los visitantes, Neymar caía al suelo en un choque con Iturra y el juego se detenía varios minutos, lo cual le vino de perlas al Granada para tomar aire y frenar el ritmo barcelonista. Antes del descanso, el Granada tuvo su segunda ocasión del partido tras un disparo de Piti desde la frontal que Pinto no acertaba a blocar y el rechace le quedaba a El Arabi que la estrellaba contra el meta barcelonista.
Karnezis emerge en la segunda parte
A la vuelta de vestuarios, el Barça continuó su acoso a la meta de Karnezis, metiéndole una marcha más a su juego. El Granada, prácticamente metido en su área, achicaba balones uno tras otro. Cesc Fabregas, Neymar y Messi se introducían entre la zaga granadina y las ocasiones visitantes se sucedían cada vez con más peligro.
Cuando peor lo pasaba el Granada surgió la figura del meta griego Karnezis. El internacional heleno estuvo muy seguro durante todo el partido y sacó manos espléndidas en la segunda parte para salvar a su equipo, como en un disparo de Iniesta desde la frontal o una falta botada magistralmente por Messi y en la que Karnezis volaba para sacar el balón a corner.
Mediada la segunda parte, Lucas Alcaraz dio la alternativa a Christian Bravo, canterano del Granada que hacía su debut con el primer equipo. El chileno entraba sustituyendo a un Brahimi fatigado. Poco después, Piti sufría un tirón en un salto y tenía que ser sustituido por Coeff.
En los compases finales del encuentro, Illori salvaba para el Granada un balón que se colaba en la portería local tras haber superado Neymar a Karnezis. Poco después, Murillo caía lesionado en un lance con Lionel Messi. El colombiano intentó seguir durante varios minutos pero finalmente tuvo que ser sustituido por Diego Mainz.
En el tiempo de descuento y con el Barcelona totalmente volcado en la meta del Granada, El Arabi tuvo la ocasión de matar el encuentro. El marroquí encaró mano a mano a Pinto pero su disparo fue directamente al muñeco. Y así finalizaba el encuentro, con el éxtasis del público de Los Cármenes que veían como la leyenda del “Matagigantes” volvía a renacer en Granada.
Bálsamo para el Granada
Con esta victoria, los nazaríes llegan a los 37 puntos y pueden dejar el descenso a seis puntos esta semana. En su visita a Sevilla, el próximo sábado, el Granada intentará sumar otra victoria que daría la permanencia virtual.
El Barcelona, por su parte, ve como la liga se le puede poner muy complicada si mañana vence el Atlético de Madrid en Getafe. Los azulgrana llegan tocados a la final de Copa del próximo miércoles y su temporada empieza a tornarse en negro. El Granada remató la semana de dolor del Barça y deja al Tata Martino muy cuestionado.