La situación del Granada CF se asemeja bastante a la del Titanic. Un barco, cuyo destino inevitable parece el hundimiento, pero que cuenta con una orquesta de incondicionales que no cesa de apoyar a los suyos. En plena crisis, el capitán de la embarcación ha cambiado. Abel Resino ha dejado su hueco a José Ramón Sandoval. El preparador madrileño llega con el sueño de obrar un milagro en forma de permanencia. La mayoría del granadinismo, por su parte, se pregunta si Sandoval será el entrenador idóneo para reflotar al conjunto nazarí la próxima temporada de la deriva que supone Segunda División. Pura elucubración. Lo único cierto es que el extécnico del Rayo y del Sporting, entre otros, ha firmado por cuatro partidos. El primero lo afronta con apenas un día y medio de preparación. El domingo a las cinco de la tarde el Getafe espera a los andaluces en el Coliseum Alfonso Pérez.

Cambio de entrenador en busca del milagro

El jueves por la noche el Granada tiró por la borda gran parte de sus posibilidades de seguir en Primera División. Al finalizar el encuentro, los jugadores volvieron al campo para agradecer el apoyo a parte de la afición y pedir perdón por su nefasta temporada. El ambiente era de despedida. El público cambió el “¡Sí se puede!” por el “¡Volveremos!”. La grada y el equipo parecían resignados al peor de los destinos.

La directiva nazarí se removió ante ese aire melancólico de club recién descendido. En un intento por rebelarse al destino, Pina y Cordero decidieron cesar a Resino y contratar a Sandoval. “El objetivo es un gran reto y creo que lo vamos a conseguir”, afirmó el nuevo entrenador rojiblanco en su presentación. El presidente, que explicó que lo único que buscaba era una reacción, fue todavía más tajante. “Pienso que es imposible que el Granada descienda”, declaró el murciano.

Deportivamente, poco se puede intuir de lo que decida Sandoval. Los equipos del madrileño siempre se han caracterizado por ser valientes y querer ser protagonistas. Sin embargo, donde tiene que trabajar más es en la faceta psicológica. Levantar cuatro puntos con doce en juego para un equipo en estado de depresión parece imposible. Convencer en 48 horas a una plantilla tan tocada de su propia valía es un reto de enorme complejidad incluso para los motivadores más contrastados.

El Getafe, a sellar la permanencia

Tras una temporada movida, el equipo azulón afronta este partido con los deberes prácticamente hechos. Cosmin Contra, Quique Sánchez Flores y Pablo Franco. Hasta tres entrenadores han pasado por el banquillo getafense esta campaña. Curiosamente, ninguno de ellos ha sido destituido. Pese a estas extrañas circunstancias, el equipo del sur de Madrid ha estado siempre bien posicionado en la tabla. La permanencia es cuestión de tiempo. Más tarde o más temprano, la entidad presidida por Ángel Torres, que nunca ha descendido a Segunda, se asegurará su 12ª temporada en la élite.

Pablo Franco volverá a contar con algunos de sus hombres más habituales después de las rotaciones que realizó en el Camp Nou. Se prevé que futbolistas como Diego Castro, Sarabia, Escudero y Vigaray regresen al once inicial. El Getafe llega al choque de este domingo tras perder en las tres jornadas anteriores. Los de Franco cayeron abultadamente a domicilio contra el Athletic por 4-0, perdieron en casa 0-1 frente al Levante y fueron goleados en casa del FC Barcelona por 6-0.

Un Coliseum inexpugnable

Desde que volvió a la élite, el Granada se ha enfrentado en siete ocasiones al Getafe. El balance es de dos victorias para cada equipo y tres empates. En el Coliseum Alfonso Pérez, el conjunto rojiblanco nunca ha logrado el triunfo. Los azulones se impusieron en la 2011-2012 por 1-0. En las temporadas 2012-2013 y 2013-2014, el partido finalizó en tablas: 2-2 y 3-3 respectivamente.

Posibles onces