Eibar y Levante se reencuentran tras seis temporadas, y en esta ocasión lo harán por primera vez en la Liga BBVA. El conjunto guipuzcoano se estrena esta temporada en primera división, pero no es ni por asomo la cenicienta del campeonato. Parece que la entidad vasca ha llegado para quedarse y está siendo una de las revelaciones en lo que va de curso. Sin embargo el Levante, ya asentado en la máxima categoría después de cuatro años en la élite, no logra encauzar su situación y está sufriendo para puntuar, instalado en los puestos de descenso desde el arranque de la temporada.

El conjunto local ha hecho de Ipurúa un fortín, en el que se sufre para lograr puntuar. No en vano los de Gaizka Garitano vencieron aquí a la Real Sociedad y empataron contra el Villarreal. Mucho tuvo que sudar el Deportivo de La Coruña para arrancar un 0-1 que sacaba por primera vez los tres puntos del feudo armero; un estadio pequeño, con capacidad para unos 6000 espectadores –el menor aforo de la categoría– y en fase de ampliación, pero que siempre se llena y cuyo público es un jugador más que presiona a los rivales y lleva en volandas a los suyos.

El Levante sólo ha ganado un partido, en Granada

La escuadra armera no sólo ha sumado en su campo, también ha sacado tajada fuera con una victoria en Elche y un empate a cero en San Mamés ante los leones. Ocho puntos en total, cuatro en casa y cuatro como visitante, que colocan en octava posición a los de Garitano, sorprendiendo a muchos de los que no apostaban por este equipo y lo consideraban firme candidato al descenso o, al menos, un rival fácil de batir.

El Levante, por su parte, no puede decir lo mismo. Las ilusiones con las que los valencianos iniciaron la liga se han ido poco a poco empañando a lo largo de las primeras seis jornadas a causa de los malos resultados. Es cierto que el calendario no ha ayudado; Athletic Club, FC Barcelona y Villarreal han sido tres de los contrincantes a los que el cuadro dirigido por José Luis Mendilibar se ha tenido que enfrentar, pero la imagen mostrada no ha sido la esperada y queda la sensación de que jugando con otro brío se podría haber conseguido más premio ante el Málaga o frente al Rayo Vallecano.

Los números del bloque de Orriols no son tan halagüeños como los que ostentan los vascos, y los granota sólo tienen cuatro puntos, ocupando la penúltima posición. Sólo les sigue el Córdoba, a la distancia de una única unidad. Pero el problema va mucho más lejos: el Levante es el equipo menos goleador de la liga –con sólo una anotación en seis partidos– y el tercero más goleado –doce tantos encajados en el mismo período–. Los de Mendilibar no consiguen mantener el nivel de firmeza defensiva que siempre ha caracterizado al conjunto, y tampoco logran una solución para sus problemas a la hora de definir al finalizar las jugadas de ataque.

Los granota son los menos goleadores y de los más goleados

Pero no está todo perdido para el bloque granota, que vendrá acompañado gracias al desplazamiento organizado por el club y la Delegación de Peñas. Quedan aún 32 jornadas y la zona baja de la tabla está muy apretada. De hecho, el Levante tiene a tiro incluso al Espanyol, situado en duodécima posición. Ganando en el feudo vasco, y siempre que el resto de resultados acompañasen, los granota podrían incluso colocarse en el decimotercer puesto, una situación mucho más tranquila que sin duda contribuiría a rebajar la tensión para así poder despegar por fin y enderezar la senda. Además, la única victoria levantinista por el momento se ha dado como visitante, en Granada.

Será pues un partido extraño, con los papeles cambiados, pero digno de ver. Dos viejos conocidos, un duelo inédito en la máxima categoría. Dos conjuntos que comparten colores y humildad. La euforia de unos contra la necesidad de los otros. Se espera que ambos conjuntos pongan la garra y el empeño con el que tienen acostumbrado a su público, también se confía en ver un fútbol rudo entre dos bloques siempre correosos, que exprimen al máximo sus posibilidades y sus ventajas. En definitiva, un choque emocionante, en el que sólo puede haber un vencedor; y ese seguirá haciendo historia o tendrá que esperar una semana más para ascender otro escalón.

Precedentes

Hay que remontarse hasta noviembre de 2008 para hablar del último duelo entre ambas entidades azulgrana en Ipurúa. Fue en la temporada 2008/2009 y ambos conjuntos militaban entonces en la Liga Adelante. El marcador ni se movió y hubo reparto de puntos. Dos años y medio antes de esto, en la 2005/2006, también en segunda división, el resultado fue de tablas, esta vez con empate a uno. No hay precedentes de choques entre Eibar y Levante en primera división; ésta será la primera vez.

Posibles onces

José Luis Mendilibar no podrá contar con Nikos, David Navarro, Juanfran, Toño y Rafael Martins, que no han llegado a recuperarse de sus lesiones. Además ha decidido no contar para este encuentro con Gavilán y Simao Mate. El Eibar no tiene bajas de relevancia, así que Gaizka Garitano tendrá todos sus efectivos disponibles.

Jugador a tener en cuenta

Mikel Arruabarrena (31 años, Tolosa, España): el delantero tolosarra es un jugador extremadamente incisivo y polivalente. Es capaz de jugar de mediapunta o también compartir línea de ataque con su compañero, el exlevantinista Ángel. Ambos forman una dupla muy peligrosa. Arruabarrena es una seria amenaza para las defensas y los guardametas rivales, que siempre tienen que estar atentos a sus movimientos. Su posición, normalmente un poco más retrasada que la del tinerfeño, es una buena baza para que utilice su picardía y se cuele en el área aprovechando los huecos que le abre el siempre desestabilizador canario. Fue el segundo máximo anotador del conjunto armero el curso pasado, y esta temporada ya se ha estrenado.