Una zaga compuesta por cinco defensores siempre ha sido poco habitual en la Liga BBVA. Jugar con tres centrales y dos carrileros siempre aporta un plus de ventaja a la hora de defender tanto en zona como marcaje de hombre a hombre, pero a la hora de organizar el juego de ataque, esta formación puede resultar bien inútil si los hombres de banda no ayudan en labores ofensivas. Uno de los motivos que justifican la derrota del Levante ha sido precisamente la falta de ideas en ataque provocada por este sistema táctico.

Primer error tras dos jornadas de aprobación

Lo que está claro es que no ha sido ni mucho menos la primera vez que Lucas Alcaraz ha optado por esta formación. En el Coliseum se pudo ver como Vyntra, Juanfran e Iván Ramis ocupaban el centro de la zaga, mientras que Toño e Iván López se postulaban como carrileros. Fue en Getafe donde se pudo ver por primera vez como el equipo lo pasaba francamente mal cuando los laterales no apoyaban el avance de los centrocampistas, y el partido lo acabaría decidiendo un tanto de Víctor Casadesús desde el saque de esquina.

Fotografía: LFP.es

En el aspecto defensivo, hay que destacar que el equipo supo mantener la contundencia atrás para repeler una y otra vez los contínuos ataques de un Getafe que hizo trabajar a Juanfran, Vyntra y compañía. Pero el gol madrileño nunca subiría al electrónico, y la portería a cero unida a la imbatibilidad de Mariño en la siguiente jornada frente al Córdoba harían que el sistema táctico tuviera la aprobación del aficionado granota.

Alcaraz repitió formación tanto contra el Getafe como contra el Córdoba

Cierto es que ni el Córdoba ni el propio Getafe no son ni mucho menos los equipos más goleadores de la competición, y que Mariño no tendría demasiado trabajo en el Ciutat de Valencia en el partido contra el conjunto andaluz. Pero el caso es que por segunda jornada consecutiva, Alcaraz optó por el 5-3-2 para intentar conseguir la victoria. En este caso, el equipo supo aprovechar tanto la indecisión en ataque como la inseguridad en defensa del equipo blanquiverde para llevarse la victoria, y la tímida presión de los visitantes hizo que tanto Iván López como Toño tuvieran una mayor presencia en ataque, por lo que se vio un juego mucho más vertical y con más profundidad en las bandas, dando lugar al único tanto del partido, obra de David Barral.

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Y tras dos partidos donde el sistema fue clave para la consecución de los tres puntos, en Anoeta se pudo ver como la alineación falló y en gran manera. A diferencia del Getafe y del Córdoba, la Real Sociedad quiso llevar la batuta del encuentro desde el minuto uno, y entre Xabi Prieto y Yuri, el conjunto vasco tuvo demasiadas facilidades para superar a Iván López. A Vyntra no le quedaba más remedio que apoyar al lateral granota, mientras que en la banda contraria, el equipo tenía que utilizar tanto a Toño como a Juanfran para evitar los contínuos desbordes de Carlos Vela.

Todo ello acabó con lo que deseaba David Moyes: sólo un central para cubrir a Finnbogason. Pese a tener tres defensas en el centro, la profundidad en las bandas de los 'Txuri - Urdin' dejaba en una clara ventaja al delantero islandés, que en el primer tanto remataría completamente solo en el corazón del área, algo un tanto extraño para un equipo que defiendía en zona y con cinco defensores.

Fotografía: LFP.es

En ataque, el equipo fue de menos a más, sobre todo en el último cuarto de hora de la primera parte y en los primeros diez minutos de la segunda. El continúo dominio del cuadro vasco hacía imposible las subidas de los carrileros, pero cuando Morales apareció para dar profundidad, empezaron a abrirse los huecos por las bandas, y sobre todo Toño tuvo buenas oportunidades para colgar balones al área.

Alcaraz se decantó por El Zhar y dejó en el banquillo a Barral

Sin embargo, apoyando a Víctor Casadesús no estaba Barral, sino El Zhar, y el jugador franco-marroquí apoyaba más al propio Toño en la banda que al jugador mallorquín, que en muchas ocasiones se quedaba solo ante los centrales locales y ante el guardameta Rulli. Las sensaciones no fueron malas en el descanso, pero tras el inexplicable tanto de Markel Bergara, Alcaraz dio por terminado la defensa de cinco y retiró del campo a Iván Ramis. Inexplicable por el simple hecho de que el vasco remató de cabeza sin prácticamente saltar en un saque de esquina, y dado que es su tercer tanto en su carrera deportiva, sorprendió mucho que marcara con tanta facilidad.

Once inicial y final del Levante en Anoeta

Alcaraz dio entrada a Camarasa para reforzar el centro del campo y añadió dos hombres claramente de aspecto ofensivo como son David Barral y Kalu Uche para intentar marcar el gol que metiera al equipo en el partido. Pero después de tres jornadas con un 5-3-2, un cambio drástico a un 4-3-3 con dos laterales ofensivos terminó en un desentendimiento total en ataque, y finalmente se iría de vacío de Anoeta.

Ahora, con Casadesús y Simao sancionados por acumulación de tarjetas y con Barral, Camarasa y Vyntra aprecibidos de sanción, Alacaraz encara el próximo encuentro ante el Altético de Madrid con bajas notables, pero todo parece apuntar que el técnico granota planteará un partido bastante similar al de Anoeta, pero deberá corregir muchos errores para que no vuelvan a ocurrir con el cuadro colchonero.