Los pupilos de Lucas Alcaraz trabajaron en la mañana de este viernes en la Ciudad Deportiva de Buñol, poniendo punto y final a la semana, ya que disfrutarán de un fin de semana libre, ya que, al disputarse partidos de selecciones, no hay liga. El Levante UD regresará a la competición doméstica el próximo viernes, en el Ciutat de Valencia ante el Sevilla FC, a las 20:30 horas.

La jornada comenzó a las 9:30 horas con una charla del entrenador Alcaraz, acompañado de su cuerpo técnico, a toda la plantilla. Primero empezaron con trabajo físico, para luego continuar con ejercicios de balón. Los jugadores realizaron ejercicios de presión y posesión, alternativamente, en espacios limitados del terreno de juego, con el principal objetivo de resolver con exactitud situaciones límite en las que, por ejemplo, el equipo rival pueda montar rápidamente una contra. Los tres porteros, Rubén, Jesús Fernández y Mariño, realizaron ejercicios de balones aéreos junto a Pepe Martínez Puig.

Pero sin duda, la gran noticia para la afición granota ha sido la vuelta a los entrenamientos de David Navarro, que completó la totalidad de la sesión tras unos ensayos a menor ritmo, y de Nabil Ghilas, tras recuperarse de un proceso gastrointestinal por el cual apenas se ha ejercitado esta semana. Por su parte, el delantero brasileño Deyverson está completamente en forma, tras estar unos días renqueante de las molestias que sufrió en el partido del pasado domingo ante Las Palmas. 

Los jugadores volverán a entrenar el próximo lunes con vistas al compromiso frente al Sevilla. Saben que se la juegan mucho, ya que la semana siguiente toca visitar el Camp Nou. ''Ahora tenemos dos partidos muy importantes, sobre todo el de casa ante el Sevilla'', asegura el centrocampista Rubén García, quien cree que pueden dar la sorpresa, y regalar así a su afición los primeros tres puntos de la temporada.