Lucas Alcaraz, entrenador del Levante, compareció ante los medios tras la derrota de su equipo frente a la Real Sociedad (0-4) en el encuentro correspondiente a la jornada nueve, en los que ambos conjuntos se daban cita en Orriols, en un claro choque por la permanencia. 

Sin entrar en valoraciones sobre su posible marcha del club valenciano por la situación en la que se encuentra el equipo, sí que se ve "con fuerzas para revertir la situación negativa del equipo". "Me dedico a trabajar, a vivir la profesión y, a partir de ahí, es lo único en lo que me ocupo a diario", indicó el técnico andaluz en la rueda de prensa postpartido. "Por los recursos que tenemos, la actitud que veo y el trabajo, el equipo va a ir para arriba, seguro. Veo la energía y predisposición de la gente no solo para superar esta fase del calendario". Así de contundente y confiado se mostró, pese a perder en casa por goleada frente a un rival directo. 

Algo similar a lo ocurrido jornadas atrás en Getafe, y que puede pasar factura de cara a los desempates. Al igual que entonces, el míster asegura que han estado "imprecisos en general. No creo que haya que focalizar la atención en una parte. No tengo absolutamente nada que reprochar a los jugadores, porque han intentado hacer el partido que teníamos previsto, no hemos sido capaces de hacerlo, pero en ningún momento han desistido en el empeño. Hay que levantarse, ajustar las cosas que no se hayan hecho bien, pero en cuanto a actitud y sacrificio no hay nada que reprochar".

Sin que sonara a excusa, Lucas Alcaraz se lamentó, al tiempo que recordó, las claras ocasiones de su equipo, que por diferentes motivos y circunstancias fueron erradas. Asumió sin pudor que la Real Sociedad fue superior en todo momento, sin dejar de reconociar que sus jugadores se han "matado" a trabajar y apuntó que le hubiera gustado que el partido "se hubiera desarrollado de otra manera. Por los jugadores, que se lo merecen, por la afición... pero entre que han sido superiores y que en momentos puntuales no hemos sido capaces de meternos en el partido ha llevado a que apareciera esa distancia en el desarrollo del juego, que podría haber sido de otra forma pero no hemos acertado en ese momento".

No se olvidó, eso sí, de hablar de la afición. Pese a que algunos aficionados hayan pedido su marcha, consideró que "la grada ha estado muy bien para el partido que ha podido ver" y que hacer visible "su disconformidad es lícito y normal". Añade además que "han estado siempre intentando también entrar en el partido y cuando el equipo le daba algo, ha ido detrás del equipo siempre", concluyó.