Esta mañana, Miguel Ángel Villafaina junto al segundo entrenador del Atlético Levante, Alessio Lisci, no han podido recibir peor noticia, pues se les ha comunicado su no continuidad al frente del filial granota.

La racha

El Atlético Levante, sobre el campo no ganaba desde el 3 de enero (ante Olot por 3-0), el anterior partido con victoria se sitúa ya en noviembre de 2015 (vs Valencia Mestalla por 1-0), período donde el filial granota ha conseguido cinco empates y dos victorias hasta hoy, una la del encuentro frente al Olot y la otra por la eliminación del Huracán Valencia de la liga. Debido a esta mala racha liguera y a estar colistas en la Segunda División B, Grupo III y con solamente 24 puntos esta temporada, se ha decidido la destitución del primer y segundo entrenador del equipo. Tras la derrota contra el Villarreal B por 2-4 en la Ciudad Deportiva de Buñol, se le preguntó a Villafaina si temía por su puesto, a lo que contestó que no temía, que siempre trataba de hacer las cosas bien e intentaba sacar el equipo adelante.

El Atlético Levante estuvo cerca de conseguir la victoria hace dos jornada frente al colíder, el Reus Deportiu en un partido donde los locales dominaron y supieron aguantar la ventaja que les dio el gol anotado de penalti pero, en el último suspiro de partido, cuando ya la victoria estaba casi cantada, el colegiado señaló penalti a favor del Reus, no falló desde la pena máxima y se instaló el marcador definitivo con empate a uno.

La historia se repite en el choque frente al Villarreal B, donde el Atlético Levante supo aguantar muy bien al filial groguet, pero una vez marcaron gol, el equipo local se desordenó y llegaron los goles en masa ante la impotencia de la afición local, quienes sólo podía ver cómo encajaban un gol tras otro.