La plantilla del Levante retomó el viernes los entrenamientos en sesión vespertina en el Ciutat de València de Orriols. El equipo inició así los preparativos del duelo del próximo domingo ante el Athletic Club a las 12:00 horas de la mañana en feudo granota. Rubi dirigió la habitual sesión post-partido donde los jugadores con más presencia en el choque ante el Granada realizaron un trabajo de regeneración para recuperar piernas de cara al domingo y en lo que será una nueva final con la que soñar para permanecer en la máxima competición del fútbol español. Por su parte, el resto del grupo aumentó las exigencias. La sorpresa del entrenamiento la dio Iván, que completó el entrenamiento después de varias semanas alejado del colectivo tras la lesión que se produjo en el choque ante la Real Sociedad. Como quedó previsto tras el término de la sesión de recuperación el plantel se ejercitó hoy sábado a puerta cerrada en las instalaciones del Ciutat desde las 16:00 horas de la tarde.

El grupo busca reponerse de la dura derrota sufrida en Los Cármenes por cinco tantos a uno y que dejó muy tocado al equipo ante la pobre imagen mostrada, sobre todo, en la primera parte. Rubi ya escenificó su malestar y se exhibió muy crítico con sus hombres por el partido que habían realizado, a sabiendas lo que se jugaba el equipo y el esfuerzo que habían hecho sus seguidores para animar y dar fuerzas a la plantilla. El club también se apoderó de esa idea y manifestó sus disculpas con un mensaje en Twitter en el que agradecía a la afición el traslado a Granada para animar a su equipo ante una de sus finales contra un rival directo. Ahora tanto Rubi como su equipo esperan que la plantilla vuelva a responder este domingo en el Ciutat y poder borrar, con una victoria, las malas sensaciones que acontecen.