David contra Goliat, un recién descendido ante un finalista de la Champions League, el colista frente a un aspirante al título liguero, Levante contra el  Atlético de Madrid. Las apuestas daban como claro ganador al conjunto colchonero por su gran estado de forma y porque los granotas no se jugaban nada, o eso decían algunos. Descendidos o no, la plantilla levantinista es consciente de que los resultados no han reflejado sus buenas actuaciones durante esta campaña y querían demostrarlo ante todo un coloso como el Atlético de Madrid. La permanencia no estaba en juego, pero sí que lo estaba el orgullo granota.

Torres adelantaba al Atlético

El encuentro arrancaba de la peor manera posible para el conjunto granota. Apenas habían transcurrido dos minutos de partido y el Atlético de Madrid ya había plasmado sobre el terreno de juego la enorme diferencia de intensidad con la que ambos equipos habían saltado al verde del Ciutat de València. Por un lado, el Levante pretendía despedirse por todo lo alto de la Liga BBVA en el último duelo liguero disputado en su estadio. En cambio, los colchoneros pisaron el césped siendo conscientes de que se jugaban el título liguero.

Con esas premisas completamente opuestas, el inicio decantó el resultado hacia los atléticos. Enchufados como motos, los jugadores del Cholo empezaron presionando muy arriba al Levante, sin dejarle jugar. Fruto de ese intenso arranque, los colchoneros cuajaron un gran inicio que les permitió protagonizar una exquisita triangulación que acabó con un pase en profundidad a Fernando Torres, que se quedó frente a Diego Mariño y le batió con una soberbia vaselina. Se adelantaban los visitantes.

Fernando Torres celebrando el gol | Foto: Ángel Gutiérrez - Atlético de Madrid
Fernando Torres celebrando el gol | Foto: Ángel Gutiérrez - Atlético de Madrid

Con el viento a favor, los madrileños levantaron un poco el pie del acelerador, lo que se tradujo en un mayor dominio granota. El Levante se hizo dueño de la posesión y trató de acechar la portería defendida por Oblak, pero en frente tenía a uno de los equipos que mejor realiza las labores defensivas. A pesar de ello, los locales conseguían inquietar al guardamenta rojiblanco, aunque sin demasiado peligro. Tras el ímpetu inicial de los levantinistas por conseguir el empate, el ritmo fue decayendo progresivamente.

El orgullo granota

Las ocasiones por parte de ambos equipos fueron disminuyendo y las pocas que habían tenían dos claros protagonistas: Mauricio Cuero y Fernando Torres. El primero de ellos sería el encargado de engrasar la maquinaria granota para poner las tablas en el marcador. Tras un mal pase de Morales, Cuero le robó la cartera a la zaga atlética, se marchó de Savic y colgó el balón al área desde la línea de fondo para encontrar a un Casadesús que propinó un severo testarazo para superar a Oblak. El luminoso reflejaba las tablas en el Ciutat de València.

Morales, Casadesús y Cuero tras el empate | Foto: Levante UD
Morales, Casadesús y Cuero tras el empate | Foto: Jorge Ramírez - Levante UD

Los atléticos trataban de recuperar su intensidad inicial, pero la medular granota estaba impidiendo que los visitantes fueran capaces de llegar al área de Mariño con excesivo peligro. Sin embargo, la velocidad y la electricidad de Torres y Correa amenazaba constantemente a la zaga del Levante, ya que un contraataque de los colchoneros podía resultar letal. Sin embargo, el Cholo Simeone necesitaba más y no dudó en ordenar que Griezmann y Carrasco iniciaran ejercicios de calentamiento en el descanso.

Los cambios se hicieron notar y el conjunto madrileño reanudó su lucha por seguir la estela de un Barcelona que iba ganando en el Camp Nou y de un Real Madrid que estaba en disposición de arrebatarle la segunda plaza gracias al 2-0 que brillaba en el luminoso del Santiago Bernabéu. Los visitantes gozaron de dos oportunidades muy claras al inicio de la segunda parte, con un cabezazo de Saúl y otro de Savic. Sin embargo, ese nuevo empujón no duraría mucho, ya que los colchoneros no consiguieron ser tan incisivos en los siguientes minutos.

El contrarreloj acabó con el Atlético

A medida que se acercaba el minuto 90 el Atlético de Madrid conseguía posesiones más largas tratando de superar la maraña defensiva de un Levante que no estaba dispuesto a irse a Segunda División sin protagonizar un lavado de cara. Griezmann tuvo la ocasión más clara de la segunda mitad para adelantar a su equipo de nuevo en el marcador. Tras un gran eslálon y un buen pase de Carrasco, el francés trató de superar a Mariño en un uno contra uno, pero el guardameta granota sacó una mano memorable para mantener el empate a falta de 15 minutos.

El conjunto del Cholo Simeone empezó a volcarse en ataque para conseguir un gol que les permitiera mantener sus opciones de alzarse con el título liguero. A medida que se acercaba el final, el Atlético sumaba más efectivos en ataque, dejando muy despoblada la zona defensiva. El Levante, no contento con el empate, le quería regalar a su afición una victoria frente a todo un finalista de la Champions League. Con esa intención, los granotas empezaron a armar contragolpes letales para aprovechar la velocidad de Morales. Y lo hizo. El '11' levantinista protagonizó una carrera trepidante y asistió a a Giuseppe Rossi.

Celebración del gol de la victoria | Foto: Levante UD
Celebración del gol de la victoria | Foto: Jorge Ramírez - Levante UD

Rossi consigue la remontada

'Il Bambino' se quedó frente a frente con Oblak y decidió rematar al primer toque para batir al guardameta rojiblanco con un toque de calidad con la zurda ajustado al palo de la portería atlética. El delantero italiano adelantaba al Levante en el marcador por primera vez en el partido. El conjunto granota había luchado contra viento y marea para cuajar una remontada de ensueño en su último partido de la Liga BBVA en el Ciutat de València. El feudo levantinista se despedía de la mejor manera posible de la máxima categoría del fútbol español.

El Levante sumaba los últimos tres puntos disputados en el Ciutat de València para darle el mejor regalo posible a una afición que ha sufrido de lo lindo a lo largo de toda la temporada. Una victoria que le permitía reconciliarse con el levantinismo antes de convertirse en un equipo de la Liga Adelante, una victoria a costa de un Atlético de Madrid que perdía todas sus opciones de convertirse en campeón de la Liga BBVA. Con la victoria del Barcelona, los colchoneros decían adiós al título liguero.

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