Lo de hoy del Leganés no tiene nombre. David volvió a vencer a Goliat. Los jugadores dieron una lección de casta y buen juego desde el primer minuto y realizaron el hasta hoy, mejor partido de la temporada. El conjunto pepinero vuelve a la senda de la victoria tras no haber puntuado en las tres jornadas anteriores y no dio opción a un Betis que hoy no tuvo su día. Las gradas del coliseo verdiblanco contaron con la presencia de apróximadamente 400 aficionados del Leganés, que no olvidarán la tarde de hoy en Sevilla.

Baño del Leganés en la primera parte

A pesar de que la primera gran oportunidad del partido tuvo como protagonista a Jorge Molina, el Leganés asoló la portería de Adán durante casi toda la primera parte. El primer gol del Leganés llegaría en el minuto 20 tras un testarazo de Diamanka ante el que no pudo hacer nada Adán. Sin embargo, fue invalidado por el árbitro por un fuera de juego inexistente. Aun así, el Lega no cesó en el intento y consiguió su premio dos minutos después por mediación de Eraso, que adelantaba a su equipo en el Villamarín.

Los blanquiazules, hoy de negro, siguieron intentándolo y desaprovecharon varias ocasiones para poner tierra de por medio. El Betis, por su parte, se asfixiaba ante la presión de los madrileños, algo que Pepe Mel quiso cambiar dando entrada a Ceballos a los 35 minutos.

Sin embargo, todo parecía torcerse en el minuto 39 cuando el árbitro mostraba a Diamanka la segunda cartulina y hacía quedar al Leganés en inferioridad numérica. También acompañaría le acompañaría a la caseta Asier Garitano, que fue expulsado por protestar al colegiado su decisión. No obstante, no tardaron en reponerse, y pocos minutos después, Marc Bertrán hacía el segundo gol del Leganés al filo del descanso. El Leganés se marchaba a los vestuarios con un merecido resultado en el marcador, ante un rival que tuvo en su portero, Adán, a su mejor jugador.

El Betis, sin síntomas de reacción hasta el último tramo del encuentro

La segunda parte del partido comenzó tal y como acabó la primera: con gol del Leganés. Falta lateral que votaban los pepineros que aprovechó el capitán Postigo para hacer el segundo gol ante una pasiva defensa verdiblanca. Ni béticos ni pepineros se lo creían en la grada.

El Betis buscó la reacción dando entrada a Vadillo y a un delantero más, Vicenzo Rennella. La entrada del canterano dio un soplo de aire fresco a su equipo, aunque el mejor continuaba siendo Adán. El Lega, muy ordenado atrás, buscaba hacer daño a la contra a un Betis volcado al ataque.

Sin embargo, el crono apretaba a los verdiblancos, que tiraron de corazón para crear peligro a la portería defendida por muy buen Serantes. Vadillo y Rubén lo intentaban sin suerte desde la frontal del área, topándose con guardameta el primero, y con la cruceta el segundo. Ya entrando en los últimos veinte minutos de partido, Vadillo se marcó una gran jugada individual para dejar el balón en bandeja a un Jorge Molina, que no fallaría y recotraría distancias para el Betis. Aún quedaría tiempo para más ocasiones del Betis, y algún que otro susto del Leganés, pero el marcador no volvió a moverse.

El Leganés dio un auténtico espectáculo y se hace con tres puntos de oro que sirven como bálsamo para olvidar las tres últimas derrotas. El Betis, hoy irreconocible, pierde una valiosa oportunidad de afianzar su liderato, y vuelve a caer derrotado tras hacerlo en 15 jornadas, siendo la última vez en noviembre, en aquella derrota ante el Alavés que acabó con Julio Velázquez destituido.

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