El sueño cada vez está más cerca de hacerse realidad. Porque la UE Llagostera ya encadena catorce partidos consecutivos sin conocer la derrota y, con la victoria de ayer en El Toralín, acumula 54 puntos en su haber y está a solo tres del sexto clasificado, el Real Zaragoza (57 puntos), a falta de cuatro jornadas para que finalice la competición liguera. Nadie imaginó a comienzos de temporada que este equipo estaría, a estas alturas de campaña, a un paso de la sexta plaza. El trabajo y el esfuerzo, en el fútbol, casi siempre ponen a cada uno en su lugar. Y siempre con humildad, rasgo característico de este pequeño gran equipo.
El encuentro en tierras leonesas no fue sencillo para los gerundenses, pues los locales tuvieron muchas oportunidades de gol que no supieron aprovechar y también llevaron el peso del partido. La vuelta al once de Yuri (16 goles hasta la fecha), el mejor del equipo, le dio al conjunto berciano muchas posibilidades en la zona de ataque, con sus movimientos y su calidad. No obstante, se quedaron sin anotar. La UE Llagostera, por su parte, se comportó con respeto hacia el rival pero nunca temorosa, pues lejos de quedarse atrás, buscó desde el inicio sus opciones de ataque, la mayoría en el balón parado. En una jugada de este estilo, los visitantes gozaron de una ocasión muy clara. Tras rechazar la defensa un saque de esquina, Tito consiguió empalmar en el borde del área un buen derechazo que sacó el meta Kepa Arrizabalaga con una estupenda intervención.
Yuri, omnipresente pero fallón
El conjunto local dominaba el esférico y, así, el encuentro. En un contragolpe, Yuri aprovechaba un pase medido de Rueda para internarse y acabar rematando con todo a favor, pero su disparo salió demasiado centrado y René pudo detenerlo. Pocos minutos después, y de nuevo bajo las botas de Yuri, la 'Ponfe' tendría otra oportunidad. El atacante brasileño regateó al defensor visitante pero su remate lo sacaba de nuevo el meta andaluz René. En el tiempo reglamentario de la primera mitad, un centro de Acorán fue rematado por un Yuri omnipresente con una buena media-chilena, y cuando parecía que iba a llegar el primero, entre el guardameta del Llagostera y el poste el balón no acabó entrando. Así, se llegó al descanso sin goles; con tablas en el luminoso.
Expulsión de Aimar y final de infarto
En el segundo tiempo, la UE Llagostera estiró líneas y salió decidida a hacer un gol. El cambio del defensa Jorge, que obligó a reconstruir el equipo, y la entrada del ariete Sergio León le dieron a los de Lluís Carrillo más mordiente arriba, y las mejores llegadas seguían acechando el área de los leoneses, sobre todo con acciones a balón parado. Pero, a falta de quince minutos para el final, Aimar fue expulsado por agarrar a Sobrino cuando éste ya se iba cara a portería rival.
Pablo Infante pondría en juego ese libre directo picando el balón por encima de la barrera y Andy, sin marcador alguno, remataría de media volea. El esférico, no obstante, no encontraría portería y salió rozando la madera. Dos ocasiones clarísimas de gol resueltas sin acierto. Cuando el encuentro estaba equilibrado, esta acción (a pesar de no acabar en tanto) desequilibró la balanza y obligó a los gerundenses a remar contracorriente. Disputarían los últimos minutos con un jugador menos sobre el terreno de juego.
Alberto Perea, el héroe
Las agujas del reloj avanzaban a demasiada velocidad para los locales. En cambio, el tiempo transcurría lentamente y se hacía eterno para los visitantes. Pasaban los minutos y ninguno se veía capaz de hacer el tanto final, aquél que diera la ventaja y la victoria a unos o a otros. Hasta que ese momento llegó. Perea, en el útimo instante de partido, culminó una fabulosa acción individual después de regatear a los defensores locales que le salían al paso y puediendo batir al portero Kepa con un disparo seco, cruzado, al poste contrario. La locura se desataba en el conjunto visitante, y ya no habría tiempo para más. La UE Llagostera volvía a ganar y rompía la racha de cinco empates consecutivos. Suman... y siguen.