Antonio Martínez Felipe (Madrid, 7 de marzo de 1990) afronta la que va a ser su tercera temporada en la Agrupación Deportiva Alcorcón. Es uno de los veteranos de un vestuario que cada verano se renueva casi por completo. Criado en la cantera del Real Madrid con compañeros de lujo como Carvajal o Lucas Vázquez, ahora en el primer equipo, su pequeño paso por el Mirandés le supuso la primera experiencia en el fútbol profesional. En el Alcorcón ha encontrado su segunda casa, un vestuario muy unido y las ganas de seguir buscando su sueño: jugar en Primera División.
El centrocampista madrileño ha concedido una entrevista a VAVEL.com en la que nos ha contado su pasado en el club blanco, y como ha vivido sus dos años en el conjunto alfarero. Además nos ha analizado el devenir de la siguiente temporada, y de cómo se preparan para el asalto a una cota mayor como los playoffs, ya que como el mismo define a su club, “somos un equipo humilde pero ambicioso”.
Antonio nos recibe en los campos de fútbol Casa Grande, en Rivas Vaciamadrid. Allí se sitúa su campus por segundo año consecutivo, donde alrededor de cincuenta chavales disfrutan practicando el deporte que más les gusta y aprenden los mejores consejos de un futbolista profesional. Antonio Martínez es uno más de ellos, y su dedicación, al igual que el cariño que les muestra, es la base de su éxito con los niños, esa etapa que él mismo vivió en una de las mejores canteras del mundo.
Pregunta. Entró en la cantera del Real Madrid muy joven, con apenas nueve años, y allí permaneció casi diez. ¿Qué recuerda de toda esa etapa?
Respuesta. Siempre digo que lo mejor que me ha pasado en la vida es el día que entré en el Madrid, vivir lo que es estar allí durante tanto tiempo rodeado de los mejores es como si te toca la lotería. Se te pasa el tiempo muy rápido cuando estas allí, pero me siento muy feliz y muy orgulloso de haber podido pertenecer a la cantera de un gran club.
P. Ha jugado con compañeros que ahora han llegado al primer equipo como Lucas Vázquez o Carvajal. ¿Cómo ve el ascenso de los canteranos al primer equipo?
R. El Madrid es la mejor cantera del mundo, no solo por los medios, el trato que tienes dentro y la gente que rodea el entorno, sino por la formación que allí te dan. Tengo la suerte de tener más de tres y de cuatro compañeros que ahora pueden disfrutar de estar en el primer equipo, pero además hay muchos jugadores que pasan por la cantera blanca y acaban jugando en Primera División.
P. ¿Cree que es más fácil llegar a jugar en Primera o Segunda División siendo jugador de la cantera del Real Madrid o por el contrario es mucho más exigente?
R. Realmente salen jugadores de todas las canteras, pero si miras los jugadores, es cierto que el equipo que más futbolistas ha dado es el Real Madrid. Al final estar rodeado de gente muy preparada, y trabajando con los mejores, que eso no quita que en otros clubes no trabajen profesionales muy buenos, por medios y por todo lo que engloba al club si es cierto que ayuda y mucho a que el futbolista siga creciendo y consiguiendo sus objetivos.
"Lo mejor que me ha pasado en la vida es el día que entré en el Madrid, es la mejor cantera del mundo"
P. Del equipo blanco pasó al Mirandés, donde consiguió el ascenso a Liga Adelante. ¿Cómo fue ese salto al equipo burgalés donde tuvo su primera experiencia con el fútbol profesional?
R. En mi caso fue una decisión acertada, ya que había pasado por una lesión muy larga, pero tuve la suerte de que el entrenador Carlos Pouso se fijara en mí y me dio la oportunidad. También fue complicado, porque salir del Real Madrid siempre es difícil, pero al final te das cuenta de que hay gente muy buena en todos los sitios y caí en un vestuario muy unido. Estuve rodeado de grandes profesionales que me hicieron mi adaptación mucho más sencilla.
P. De ahí pasó a la A.D. Alcorcón, donde ya es casi un veterano. ¿Por qué eligió la oferta del club alfarero?
R. Conseguir primero el ascenso en Miranda y haber jugado una temporada allí como cedido me hicieron darme cuenta que mi etapa en el Real Madrid Castilla había terminado aunque tuviera un año de contrato. Lo que más me decidió ir allí fue el interés del director deportivo, que por aquel entonces era Nico, y el poder estar rodeado de mi familia y de mis amigos cerca de casa, que son los que siempre están ahí en los buenos y malos momentos.
P. ¿Qué fue lo que más le impresionó a su llegada?
R. El Alcorcón seguía las mismas características del Mirandés, era un equipo humilde, y por suerte pude recalar en un club con magníficos profesionales, donde había mucha gente con experiencia en Segunda División y me ayudaron a adaptarme muy rápidamente.
"Con quién yo crecí más y di el salto a ser mejor futbolista fue con Pepe Bordalás"
P. En su primera temporada en el club, pasaron por el banquillo dos entrenadores, Miguel Álvarez y José Bordalás. ¿Cómo definiría aquella situación?
R. Como todo en la vida, lo que mandan son los resultados, y con Miguel Álvarez no tuvimos la fortuna de conseguirlos. Con la llegada de José Bordalás que ya conocía buena parte del vestuario y tenía un estilo de juego muy definido, el equipo empezó a mostrar su mejor cara. En ambos casos para mí fue muy positivo, ya que siempre puedes aprender de todos los entrenadores. Sí que es verdad que con quién yo crecí más y di el salto a ser mejor futbolista fue con Pepe Bordalás.
P. Esa temporada estuvieron mucho tiempo coqueteando con el descenso aunque al final casi alcanzan los playoffs de ascenso. ¿Cómo se vivíó esa situación en el vestuario? ¿Recuerda algún momento clave, en el que cambiaron las cosas?
R. Yo no le llamaría momento clave, sino más bien vestuario. La plantilla llevaba mucho tiempo jugando tiempo y en los malos momentos, si en el vestuario hay unión y con jugadores con tanta experiencia, y que conocen perfectamente la categoría y lo que es un equipo de fútbol ayuda a salir de esas situaciones.
P. Acaba la liga, y renueva por tres años con el Alcorcón, un equipo que no acostumbra a hacer renovaciones con una duración tan larga. ¿Cómo fue la oferta y que le llevó a seguir vinculado con el club?
R. Hicimos un final de año muy bueno, y el club sabía que había ofertas por mí, aunque su deseo y el mío era que permaneciera en el equipo porque fuera del fútbol estoy en casa, pero me siento como en mi casa cuando estoy allí. No hubo ningún problema porque ambas partes queríamos lo mismo, y el sentir que un equipo confía en ti y te da tanta confianza de cara al futuro es primordial antes que cualquier otra cosa.
P. ¿Cómo ha sido en su opinión esta última campaña de la A.D. Alcorcón? ¿Esperaban más de ella o al haber logrado el objetivo de la permanencia están satisfechos?
R. Nosotros somos un equipo humilde pero ambiciosos. Nuestro primer objetivo era salvarnos, que lo conseguimos rápido, pero al final nos queda la espinita de no haber conseguido como mínimo un playoff que es a lo que todos aspiramos ya que todos queremos estar ahí arriba y conseguir el sueño de jugar en Primera División.
P. Personalmente, ¿puede ser el año en el que mejor se ha sentido sobre el terreno de juego?
R. En mi opinión, las comparaciones son odiosas, y cada año es un mundo. En cada temporada surgen diferentes complicaciones porque lo que es muy difícil comparar una campaña con otra. A nivel personal creo que hice un buen año pero siempre se ha de pensar que puedes realizar un mejor año y debes exigirte para hacerlo mejor.
P. Le hemos visto jugar tanto en el doble pivote en el centro del campo como mediapunta detrás del delantero. ¿Cuál la posición en la que se siente más cómodo jugando?
R. Es muy relativo porque depende del equipo contra el que juegues, el entrenador que tengas, el compañero que tengas al lado y otros factores. Al final, lo que uno quiere es jugar y yo me siento cómodo en ambas posiciones y donde el míster decida ponerme para mí es un poco indiferente, me adapto bien a ambas.
"Mi objetivo primordial y por lo que lucho cada día es jugar en Primera División"
P. Sólo tiene 25 años y una carrera larga por delante. ¿Se marcas como objetivo jugar en Primera División e incluso hacer carrera allí?
Mi primordial objetivo y por lo que lucho cada día es jugar en Primera División. El día que pierda esa ilusión igual me tendría que plantear el seguir jugando al fútbol.
P. ¿Qué significa para usted el vestuario del Alcorcón?
R. Para mí el vestuario del Alcorcón se traduce en humildad y compañerismo. Creo que los valores del club son los valores que se deberían tener a nivel personal en la vida y con los que me siento muy identificado: trabajo, humildad y sobre todo constancia. Es un club que ha crecido de menos a más.
P. ¿Cómo ve la llegada de Juan Ramón López Muñiz?
R. Creo que ha sido un acierto total, ya que aunque llevamos poco con él, nos ha transmitido sencillez, humildad y que es una persona muy sensata, ha entrado muy bien con todos los jugadores.
P. ¿Y cómo ve esta nueva temporada que llega con el cambio de entrenador? ¿Se marcan el objetivo más alto?
R. El objetivo en Segunda División, que para mí es la competición más difícil a nivel futbolístico en España, es superar a los demás equipos, ya que son todo muy parejos. Siempre el primer objetivo debe ser la permanencia pero nosotros queremos ser ambiciosos y poder jugar un playoff e intentar luchar por subir a Primera División.
P. Siendo uno de los veteranos, aunque este vaya a ser sólo su tercer año, ¿cómo se recibe a todos los jugadores nuevos que llegan al vestuario?
R. A mí lo que me enseñaron, y que por suerte he vivido, es tratarlos como uno más e intentar hacer la llegada más fácil a la gente que viene porque van a ser los que te van a ayudar a lo largo del año y los que van a estar a tu lado. Realmente la gente que viene nueva son chicos como nosotros e intentamos ayudarles al máximo.
P. Hablando de su campus, ¿cómo surgió la idea de montar este proyecto?
R. Todos hemos sido niños y hemos querido tener la oportunidad de disfrutar de un campus así. Aquí en Rivas, la localidad donde yo vivo, no había ninguno; y al hablar con amigos decidimos crear un campus para estar con los chicos y reírnos y aprender con ellos. Lo hablamos sin saber si saldría o no y la verdad que la experiencia fue mucho más positiva de lo que creíamos. Incluso los niños hicieron emocionarme el último día del año pasado con sus despedidas y agradecimientos. Fue un premio a nivel personal haber logrado hacer el campus.
P. ¿Qué cree que aporta a los chavales jóvenes la oportunidad de tener este tipo de campus en verano?
R. Nuestro principal objetivo es alternar la docencia con el deporte, intentamos enseñarles desde nuestro humilde punto de vista lo que creemos mejor, pulir sus defectos e intentar aprender de ellos. Esto les ayuda a crecer y a continuar con la ilusión, que a veces cuando uno va creciendo se pierde sin darse cuenta y da gusto de ver a los niños con esa ilusión y con las ganas de jugar todo el rato.
"Los niños hicieron emocionarme el último día del año pasado con sus despedidas y agradecimientos"
P. ¿Y qué cree que le aporta a usted como jugador profesional esta experiencia con los niños?
R. Para mí es un premio, me aporta una satisfacción tremenda ver a estos chicos que llevan la camiseta con mi nombre, más allá de que lleven mi nombre es que les podamos ayudar y que al final del campus vengan los padres a agradecernos el trato, lo que hemos hecho con sus niños. Es una satisfacción que aprendan con nosotros y saber que en alguna medida hemos sido parte de su formación como persona y deportista
P. Es la segunda edición del campus, ¿espera que se repita muchas más veces?
R. El campus a día de hoy lo hacemos por estar con los chicos, es una actividad sin ánimo de lucro. El día que vea que algo estoy haciendo mal o que no pueda prestarle la atención que ellos necesitan, ese día dejare de hacerlo. Mientras podamos ayudarles y estar con ellos, y conseguir que sea una experiencia positiva en su vida y que les ayuda a crecer y a ser mejores personas.
P. Para terminar nos gustaría que completara esta frase: Este año de Antonio Martínez podemos esperar….
R. Sacrificio.
P. Un mensaje para los aficionados del Alcorcón acorde a esta nueva temporada.
R. A los aficionados del Alcorcón poco se le puede pedir, porque en las buenas y en las malas siempre están ahí, no es una afición que castiga por los malos resultados y lo que único que podría pedirles es que vinieran a vernos todos los domingos.
