El mediocentro Íñigo Eguaras no ha tenido un camino demasiado sencillo para llegar a la élite del fútbol español. Esta temporada está teniendo el lujo, con su excelente trabajo jornada tras jornada, de disfrutar del momento que está atravesando tanto él como el Mirandés.

El comienzo del mediocentro no fue nada fácil. Sus primeros pasos fueron en la cantera del Athletic, en la temporada 2010/11 se marchó al Basconia. En el club vasco disputó un total de 31 encuentros en los que logró perforar la portería rival en dos ocasiones.

Íñigo Eguaras comenzó en la cantera del Athletic

En la siguiente campaña, el Athletic repescó al jugador, nacido en la localidad navarra de Ansoáin, para que se enrolara en la filas de su segundo equipo. En el Bilbao Athletic estuvo tres años convirtiéndose en una pieza muy importante para los suyos. Su presencia en el mediocentro y su manejo de las dos piernas son una garantía para sus compañeros. Durante su estancia en este club jugó 87 partidos y marcó seis goles además de facilitar muchas asistencias.

En la temporada 2014/15 el futbolista de 23 años decidió emprender una nueva aventura fuera del País Vasco. El Sabadell, club de la Liga Adelante, iba a ser su siguiente equipo. El año no fue demasiado bien, ni para el equipo ni para el futbolista. Tras una temporada para olvidar, el equipo catalán descendió a Segunda B. Eguaras entró con asiduidad en el once del Sabadell. Disputó 34 partidos de la Liga Adelante y dos en la Copa del Rey en los que anotó un gol y dio una asistencia. El 16 de mayo del año 2015 marcó su primer tanto como profesional en el partido ante el Leganés en el que los suyos empataron a uno en Butarque.

Eguaras firma por el Mirandés por dos temporadas

En 17 de julio se hizo oficial su fichaje por el Mirandés para las próximas dos temporadas. Terrazas confiaba en el trabajo y en la calidad de Eguaras y le iba a dar la gran oportunidad de demostrarlo en un equipo llamado a luchar por el ascenso a la Liga BBVA.

Las cosas no empezaron muy bien para el mediocentro navarro. En los primeros cuatro partidos de liga no apareció en el once titular de los mirandesistas. Su trabajo en cada entrenamiento hacía presagiar que poco a poco tenía que ir entrando en los planes del técnico vizcaíno. Su polivalencia en el centro del campo iba a ser muy importante como se ha ido demostrando.

En la quinta jornada Íñigo Eguaras debutaba con la camiseta del Mirandés. El rival era el Albacete y el encuentro acabó con empate a uno. El mediocentro sustituyó a Lago Junior en el minuto 85 y apenas entró en juego. Su presencia en el campo durante ese tiempo para intentar lograr la victoria no fue suficiente ya que los albaceteños lograron el uno a uno en los últimos segundos.

El partido contra el Tenerife fue un punto de inflexión para el jugador. A pesar de la dura derrota por tres goles a cero, Eguaras disputó un total de 37 minutos al sustituir a Carlos Moreno. Con Rúper y Provencio en el centro del campo el equipo mejoró en la segunda parte aunque sin tener opciones de sacar algo positivo de su visita al Heliodoro.

Su golazo al Real Zaragoza confirma su buen momento futbolístico

A partir del encuentro ante la Ponferradina, que se saldó con empate a dos, se ha convertido en uno de los fijos en el once de Carlos Terrazas. Su presencia en esa posición con Rúper y Provencio se antoja muy importante para los rojillos. El trabajo que día tras día realiza y lo que aporta al equipo está siéndole muy productivo al Mirandés. Sus ayudas al central derecho, unas veces Galán y otras Carlos Moreno pasando por Gaffoor, y su labor a la hora de construir el juego están siendo vitales para el buen hacer de los de Miranda de Ebro. En lo que llevamos de campaña, un gol y una asistencia es su aportación en cuanto a números.

Íñigo Eguaras Álvarez está ante su gran oportunidad de consolidarse en la élite del fútbol nacional y lo está aprovechando. Su gran gol ante el Zaragoza será, sin ninguna duda, su gran inicio para seguir escalando en el día a día buscando lo mejor para el escudo que defienda en cada minuto de partido.