Cuando un club hace una temporada ilusionante y realiza una pretemporada en la que acaba imbatido, el resultado final es una sobredosis de ilusión en la afición. Y así fue, el aficionado cordobesista pasó en una temporada de sacar el cava cuando el equipo conseguía la permanencia a exigir el ascenso a Primera División.

Con Charles, Borja García y Paco Jémez como bajas más sensibles en verano, la entidad cordobesista echó un ojo hacia la cantera y subió al entrenador del Córdoba B, Rafa Berges, al primer equipo. Con él, con los que decidieron no bajarse del barco, y con siete incorporaciones más, el Córdoba arrancaba la temporada con una intención muy clara: "Subir".

La temporada se iniciaba con un empate a cero goles en casa del Real Murcia; no fue hasta la 2ª jornada de Liga Adelante cuando el Córdoba capturaba los tres puntos por primera vez en la campaña, sería en el reino cordobesista y frente a un recién descendido como era el Racing de Santander (2-0).

La próxima alegría se la llevaría en Copa del Rey. Dos semanas después del partido contra el Racing, los cordobesistas perdían en liga ante un Elche CF impecable, pero en esa misma semana ilicitanos y cordobeses se verían las caras en Copa, donde el Córdoba, en la prórroga, eliminaría al conjunto que actualmente es equipo de Primera División.

Tras derrotar también al CE Sabadell en Copa, el club cordobesista quedó emparejado con un 1ª División, todo indicaba que la Real Sociedad iba a ser el "caramelo" del que ese año disfrutaría el Nuevo Arcángel, pero, con un poco de irregularidad en Liga, el Córdoba puso todo su empeño en la copa y en desbancar a los vascos, y consiguió traer al FC Barcelona el 12 de diciembre de 2012 al Arcángel. Con el estadio cordobesista hasta los topes, un Barça muy respetuoso con el Córdoba sacando a casi todos los titulares, y un equipo cordobesista ilusionado a más no poder, el Barcelona tuvo que ser de Champions para sacar un resultado positivo frente a un Córdoba que deslumbró a medio mundo embotellando a todo un campeón de seis copas en mismo año en su área durante la primera mitad.

Con el partido del año en el Arcángel jugado, el Córdoba llegaba al parón navideño con la irregularidad como seña de identidad, Berges no terminaba de convencer y el público ya empezaba a enervarse. El Córdoba no hizo más que desprenderse de jugadores insignia en navidad y fichar "nombres". Ídolos como Pepe Díaz, Patiño o Tena tuvieron que buscarse la vida fuera de Córdoba, mientras que otros como Fernández, no dejaban escapar el tren de Primera.

El Córdoba arrancaba el 2013 con un jugador de la Premier League inglesa, uno que venía del Depor, uno que jugó en el Barça, y otro que hizo pruebas en el Real Madrid (Xisco Jiménez, Diego Seoane, Armando Lozano y Pauliño correlativamente), con ellos, un director deportivo que no pareció encajar con lo que la afición esperaba de él, y así fue, Alfredo Duro no duró ni tres meses con su cargo en la entidad blanquiverde.

Pronto, el Córdoba obtuvo el galardón de "mejor equipo europeo de 2013" y se colocó a solo dos puntos del ascenso directo, pero el equipo no supo estar a la altura y entró en un declive de malos resultados, malos resultados que condenaron a Berges que fue destituido a falta de menos de diez encuentros para el final de liga, su sustituto fue Juan Eduardo Esnáider, técnico que no ha sido del agrado del cordobesismo que ha visto como sólo ha ganado tres encuentros y que la portería blanquiverde ha sido penetrada en todos los partidos.

Los blanquiverdes han acabado una ilusionante campaña 14º con 54 puntos, y con un mal sabor de boca para todo el que esperaba que este año iba a ser el definitivo para lograr el ascenso.  

VAVEL Logo
Sobre el autor
Bartolomé Dobao
gestión administrativa con vocación hacia el Periodismo deportivo. He sido redactor en TODOXDEPORTE y Fiebredeportiva, habiendo intervenido también en DYO (Deporte Y Ocio), Nadadores.com y Diario SPORT a parte de haber hecho apariciones en numerosos blogs deportivos. 43 medallas y 3 trofeos ganados en campeonatos de natación y ex-gamer de élite