La leyenda del Girona de Machín sigue creciendo a pasos agigantados. El mejor equipo de 2015 sigue pisando fuerte y ayer asaltó otro campo, el Heliodoro Rodríguez López de Tenerife. Son ya ocho victorias lejos de Montilivi y cuarto triunfo consecutivo en liga, lo que permite que el Girona atrape al líder, Las Palmas, que cayó en Lugo (2-1) y se ve involucrado en esta preciosa lucha por el ascenso a Primera División.

El técnico de Gómara introdujo la novedad de Aday en detrimento de Coris. Fue la primera titularidad del de Sentmenat, que se midió a sus ex compañeros hasta que el físico aguantó, porque tuvo que retirarse por pequeños problemas musculares. El Girona marcó muy pronto y tuvo varias oportunidades de marcar el segundo y no sufrir tanto en el segundo tiempo, más por la incertidumbre del marcador que por el peligro real de los hombres de Agné.

Lejeune golpea pronto

Empezó con mucho empuje el cuadro de Raül Agné, dispuesto a dar otro aire al conjunto isleño tras la marcha de Álvaro Cervera. Dos llegadas en pocos minutos fueron la carta de presentación de un Tenerife que recibió el primer batacazo muy pronto. Tras una llegada de Felipe que Cifuentes remató con la oposición de un zaguero local, Lejeune, a la salida de un córner botado por Granell, cabeceó y anotó el primero y único de la tarde (0-1, min. 8). Gol número 300 del equipo catalán lejos de Montilivi en Segunda y primer tanto del defensa francés.

Intentó despertar el cuadro isleño, consciente que tenía que dar un paso adelante si quería dar una alegría a la afición. Los canarios colgaban balones al área buscando la altura de Aridane, aunque el Girona replegaba bien y se sentía cómodo en todo momento. Aitor Sanz probó fortuna desde fuera del área, aunque su remate se fue muy desviado (15’). El Girona, especialista en gestionar estas situaciones, esperó su oportunidad para buscar, casi, la sentencia.

Así, en algo más de un cuarto de hora, tuvo cinco oportunidades clarísimas para anotar el segundo. Primero fue una contra comandada por Eloi la que culminó en un centro de Felipe que despejó de puños Dani Hernández (27’). El meta local también salvó un disparo de Sandaza tras una combinación perfecta con Felipe (31’). Un minuto después, el pequeño ariete no acertó a rematar con precisión tras un pase de Sandaza porque Cámara fue más rápido y se lanzó a sus pies.

También tuvo su oportunidad Aday, que centró muy bien para que se luciera Dani Hernández, y el rechace de éste lo hizo rebotar Felipe en el cuerpo de un providencial Carlos Ruiz (43’). Antes que el colegiado señalara el descanso, Sandaza se vio rodeado por cuatro contrarios en el área y, aun así, sacó un disparo magistral que volvió a repeler Dani Hernández. El único pero que el Girona le podía poner a la primera mitad era no ir ganando por más goles, dada su manifiesta superioridad.

Mejoran los canarios

En la segunda mitad, el Tenerife subió una o dos marchas y lo notó el Girona, que sufrió, aunque sin exceso, para mantener la renta de la primera parte. Es lo que tiene ir ganando por la mínima, que no permite, en ningún momento, la relajación. A excepción de un lejano remate de Sandaza que se marchó desviado a la izquierda del marco local (57’), los de Raül Agné encadenaron ocasiones que pusieron en alerta a los gerundenses.

Albizua cabeceó a las manos de Becerra (55’) y el cancerbero barcelonés salió de puños ante la internada de Ifrán, tras la que el rechace cayó a pies de Víctor, que no supo definir con el portero todavía a media salida (60’). También Ifrán, de lo más peligroso del cuadro insular, botó una falta ligeramente desviada (63’). Entretanto, se iban sucediendo las sustituciones en el conjunto local. Agné hizo las tres sustituciones en 20 minutos. Juan Carlos, Víctor García y Cristo González dieron más mordiente al equipo.

Por otro lado, empezaban a flaquear las fuerzas en el bando gerundense, y tanto Aday (67’) como Sandaza (77’) se retiraron del terreno de juego por pequeños problemas musculares. Al primero lo sustituyó Coris, cuando hasta ayer el cambio había sido justo al revés. El canterano dio mucha sensación de peligro en todo momento, y más con la entrada de David García (82’), lo que adelantó su posición. De hecho, una jugada del de Tossa, en la que entró en el área y su disparo lo mandó a córner un defensa (71’), fue lo más peligroso hasta el momento del Girona en la segunda parte.

Con el ingreso de David García por Felipe, el Girona supo gestionar la situación para mantener el resultado. Coris, de nuevo con un eslalon en el que se zafó de tres contrarios, disparó a muy pocos centímetros a la derecha del marco de Dani (84’), mientras que Mata, que últimamente no anda muy fino de cara a portería, no supo culminar una excelente contra entre él mismo y Eloi. Cuando lo tenía todo de cara para sentenciar, el madrileño chutó al muñeco y Dani Hernández pudo rechazar (91’). Al final, el cuadro de Machín no tuvo que lamentar esta ocasión fallada y pudo llevarse los tres puntos, que le aúpan al coliderato de Segunda, con 47 puntos, empatado con Las Palmas (primero) y Sporting (tercero). La semana que viene, duelo por todo lo alto en Montilivi, donde el Girona recibirá la visita del Sporting. Por su lado, Agné tendrá otra oportunidad de girar el rumbo de su equipo en el estadio del Mirandés.