Una de las características del Girona de esta temporada es que la línea defensiva, además de estar impecable en tareas destructivas, tiene una facilidad inusual a la hora de ver portería. Ramalho lleva dos goles, Richy lleva cuatro y Lejeune, otros cuatro más. Además, Juncà también anotó dos en el tramo inicial del campeonato doméstico. El pasado sábado, ante Osasuna, fue de nuevo el turno del francés.

Tras un saque de esquina botado por Granell y rematado por Richy, un rechace dentro del área pequeña lo aprovechó el ex jugador del Villarreal para hacer subir el tercero en el marcador. "Estoy muy contento. Quizás no sea un gol muy bonito, pero es muy importante para mí. Hay que seguir así", reconocía Lejeune al término del encuentro.

También se refirió al encuentro que ganó el cuadro de Montilivi por 3 a 0. "Ha sido un partido difícil, como siempre. En la primera parte pudimos ganar por más de un gol, y en la segunda parte seguimos igual", decía el zaguero galo, que apuesta por disfrutar de la clasificación. "Seguimos arriba. Metemos un poco más de presión a todos los equipos y sólo intentamos seguir ahí", explicó.