Desde que llegó en verano de 2013, el portero de la Salzadella (Castellón) ha tenido un papel muy residual en lo que a minutos se refiere. Aparte de disputar dos partidos en liga la temporada pasada por una grave lesión que sufrió Isaac Becerra, el meta procedente del Villarreal ha sido el elegido para disputar las competiciones del KO, esto es, tanto la Copa del Rey como la Copa Catalunya.

En estos torneos se ha erigido como un gran parador de penaltis, permitiendo a su equipo avanzar varias rondas gracias a sus reflejos. El año pasado el Girona disputó la semifinal de la Copa Catalunya y alcanzó los dieciseisavos de final de la Copa del Rey, eliminatoria en la que fue apeado por el Getafe (5-2 en el global). Este año, en el torneo español el cuadro gerundense duró muy poco, pero en el catalán llegó hasta la final gracias, en parte, a las paradas de Palatsí en varias rondas. Sólo en el partido clave perdió por 2 a 1 ante el Europa.

A pesar de no haber jugado en liga, Palatsí es uno de los grandes activos en el grupo, especialmente por su implicación dentro del vestuario. Una de las claves de la gran temporada que ha cosechado el Girona actual ha sido, en gran parte, por la unión que se ha formado entre los jugadores, y el meta castellonense ha contribuido a buena parte de ello. Sin embargo, el hecho que acabe contrato, su poca participación dado que Becerra está a un nivel altísimo y una inoportuna lesión de menisco -por la cual estará entre uno y tres meses de baja- propiciarán, con casi total seguridad, su adiós de la disciplina rojiblanca.