La estela gerundense jornada tras jornada, en esta segunda vuelta, brilla con luz propia y cada vez con más intensidad y aún más después de demostrar ser mucho mejor que el Almería. El Girona había conseguido en estas últimas semanas encadenar una racha titánica y ver el play-off a la punta de los dedos. Se habían ganado puntos lejos de Montilivi,  como en Huesca y en Palamós, sin haber generado ni mucho menos las ocasiones de peligro que hizo ante el Almería, donde pareció digno de un maleficio que los blanc-i-vermells no consiguieran marcar y llevarse la victoria.

Pablo Machín lo tuvo claro y dijo esto en la rueda de prensa posterior al partido: "Lo ha visto todo el mundo. Ha sido cuestión de acierto".  Las palabras del técnico fueron firmes: "Hemos hecho un partido muy digno, por no decir bueno. Muchas veces se gana haciendo menos de lo que hemos hecho hoy". Su asombro era impresionante después del gusto amargo que le quedó después de esta derrota. "La realidad es que ellos, la primera vez que han disparado, lo han hecho. Y nosotros hemos tenido de todos los colores y formas, y no ha habido manera. Hemos hecho de todo, menos marcar el gol", dijo el técnico, que resumió el choque en dos acciones claras y de lo más similares: "La diferencia es que ellos, después de la lesión de Aday, y en la continuación de una pelota parada, han marcado. Nosotros, a raíz del cambio de Dubarbier, hemos tenido una clarísima, y ​​no entró".

Por el contrario, en Almería, estaban más que satisfechos después de haber derrotado uno de los equipos que más ha peleado para conseguir la victoria, e instantes antes Néstor Gorosito había alabado al conjunto catalán en rueda de prensa. Pero Pablo Machín no podía sentirse más impotente. "Esto siempre jode, porque cuando te vas elogiado suele pasar que has perdido. El reconocimiento, en cualquier caso, está bien. Mandan los resultados, pero las sensaciones que deja el equipo son buenas. Seguimos siendo muy competitivos, y por esfuerzo, implicación, ganas y actitud felicito a mis jugadores".

La racha de ocho victorias sin conocer la derrota llega a su fin pero el técnico de Gómara no pierde la esperanza en seguir luchando. "Alguna vez se tenía que romper. No debería haber sido hoy, porque lo normal era que, aunque fuera equivocándonos, hubiéramos marcado. Pero ya dije que prefiero perder un partido y ganar el siguiente". La cuestión sobre la asuencia de un enorme pilar como es Pere Pons tenía que salir, y Machín dijo: "Para mí sería fácil decir que echamos de menos los que no están, pero no es mi estilo. Lo más normal es que hubiéramos materializado las ocasiones, y nadie se acordaría. Siempre insistimos que los entrenamientos son básicos, y Rubén Alcaraz ha cumplido bien, más allá de que la hayan desbordado en la acción del gol". Tras la derrota y diciendo adiós a la gran racha que encadenaba el conjunto de Montilivi, hablar de la visita del líder era inevitable para terminar la comparecencia del entrenador blanc-i-vermell. "El Leganés está demostrando que es el mejor equipo de la categoría, y tenemos que demostrar a qué nivel estamos".

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