Prohibido fallar. Esta es la mentalidad de Girona y Mallorca a falta de tan solo cuatro jornadas para la conclusión de la Liga Adelante. Con doce puntos en juego por delante, ambos equipos llegan a la fase final del campeonato con todo por decidir. Los locales, tras una gran segunda vuelta, se encuentran a tan solo dos puntos de la zona de "playoff", por lo que se antoja clave una nueva victoria que les permita mantener esperanzas de disputar las eliminatorias por el ascenso a la máxima categoría. Por su parte, los baleares tienen tan solo tres puntos de margen con la zona de descenso así que cualquier traspié puede ser definitivo pese al esfuerzo económico realizado durante el mercado de invierno.
Alcálá y Granell, bajas considerables en los locales
El empate del pasado domingo en Elche conlleva dos bajas trascendentales en el conjunto gerundense. Pablo Machín no puede contar con Alcalá y Granell, ambos titulares indiscutibles, debido a la expulsión del central y a la acumulación de amonestaciones del centrocampista, por lo que Richy se intuye titular en el centro de la zaga y Borja en la media punta. Lo más probable es que el técnico soriano también de entrada a Lekic en la punta de ataque en detrimento de Jaime Mata y queda la duda de quién ocupará el carril derecho ya que ante la lesión de Aday, tres hombres (Javi Álamo, Sebas Coris y Pablo Maffeo) se han ido alternando en las últimas semanas.
Pese a tan solo lograr un punto de seis en los dos desplazamientos consecutivos que el Girona ha tenido que afrontar en las dos últimas jornadas, las aspiraciones del conjunto gerundense siguen intactas. Situados a dos puntos de Osasuna (conjunto que cierra la zona de "playoff"), conquistar una victoria en Montilivi ante uno de los equipos de la parte baja de la tabla se antoja crucial para seguir con aspiraciones. Precisamente, ante los baleares empezó la reacción de un conjunto que antes de Navidad se encontraba cerca de la zona de descenso.
No quieren ni oir hablar del descenso
El conjunto balear ha pasado de militar en la Liga BBVA a luchar por evitar el descenso a Segunda División B, hecho impensable a tenor del derroche económico realizado por la entidad para luchar por volver a la máxima categoría. El equipo dirigido por Fernando Vázquez llega al encuentro sin bajas importantes e incluso con la recuperación de Colunga pese a que, finalmente, el jugador se quedó en la isla. Con tres puntos de margen sobre la zona de descenso, una derrota en Montilivi haría saltar todas las alarmas en el cuadro balear de cara a las tres últimas jornadas.
El once que presentará Fernando Vázquez puede variar en función de las rotaciones que vienen siendo habituales en las últimas jornadas siendo posible la entrada de Company en alguno de los dos laterales e incluso no se descarta la presencia de Truyols si apuesta por adelantar a Yuste en un centro del campo inamovible con la presencia del "trivote" formado por Sabater, Sissoko y Pereira. En la punta de ataque, asegurada la presencia de Ortuño, Arana, Lago Júnior y Salomao lucharán por dos sitios que acompañen al ex del Girona en tareas ofensivas.
Los números dan como favorito al Girona
La racha del conjunto gerundense en sus partidos como local en Montilivi y los nefastos números de los baleares en sus desplazamientos dan como claro favorito al Girona antes de la disputa del encuentro. En 2016, el conjunto entrenado por Machín no conoce la derrota en su estadio con un bagaje de seis victorias (las dos últimas de forma consecutiva) y cuatro empates en diez encuentros. Su último traspié fue en diciembre y únicamente su mal inicio de temporada hace que los números presenten unas estadísticas totales más discretas con un total de siete victorias, ocho empates y cuatro derrotas en los 19 partidos disputados.
Los últimos tres desplazamientos del cuadro balear han terminado con derrota y eso explica el porqué de su situación en la parte baja de la clasificación. El equipo de Fernando Vázquez ha logrado tan solo una victoria y un empate en sus siete últimos partidos a domicilio y, si repasamos su trayectoria durante toda la temporada, las estadísticas no son mucho mejores al comprobar como tras 19 partidos el conjunto balear ha logrado dos victorias, cinco empates y doce derrotas.
