La derrota del Real Oviedo en Almería ​sumada a la victoria del pasado sábado frente al Mallorca ​por un gol a cero sitúa, al conjunto gerundense, por primera vez en lo que llevamos de temporada en zona de "play-off" y dependiendo de si mismo a falta de tres jornadas para que el campeonato llegue a su fin. La extraordinaria reacción del equipo en este 2016 ha ascendido al equipo de Pablo Machín ​en los puestos delanteros de la clasificación a pesar del mal inicio de campaña. Por su parte, el conjunto vallisoletano, intentará sumar una victoria ante su afición que le comporte la salvación matemática tras un año para olvidar.

El Valladolid quiere lavar su imagen

El conjunto entrenado por Alberto López ​no pasa por su mejor momento tras instalarse en una negativa dinámica de resultados que le ha obligado a olvidarse de cualquier meta mínimamente ambiciosa. El bagaje en los últimos meses es para echarse a temblar tras conseguir únicamente una victoria y dos empates en los últimos nueve encuentros. Cinco puntos de 27 que, incluso, han echo mirar de reojo la zona de descenso, situada a seis puntos a falta de nueve por disputar. Los números como local tampoco invitan al optimismo: dos victorias, cuatro empates y dos derrotas en los últimos ocho encuentros.

Tras la derrota en Tenerife ​de la pasada jornada, el técnico del conjunto vallisoletano confesó esperar más de alguno de sus jugadores y todo indica que habrá ciertos cambios en el once inicial. La recuperación de hombres clave en el esquema como Juan Villar y Tiba ​(ausentes por lesión) y la vuelta de Álvaro Rubio tras cumplir ciclo de amonestaciones harán que Borja, Leao ​e incluso Manu del Moral no tengan clara su participación de inicio. ​Mojica también es seria duda al no entrenar ayer con el grupo debido a un golpe sufrido en el último encuentro.​ No se esperan cambios ni en la zaga ni en la punta de ataque, donde la defensa del Girona (la menos goleada del campeonato, con 28 goles encajados en 39 encuentros), deberá prestar especial atención a Roger, el mayor peligro ofensivo vallisoletano junto a Villar​.

El Girona llega con la moral por las nubes ​​​ ​ 

Tras la decepción sufrida en el tramo final del curso pasado, el ambicioso proyecto creado para esta campaña pasa por luchar por una plaza en la máxima categoría, objetivo que, 39 jornadas después de haberse iniciado el campeonato, está más cerca que nunca. Por primera vez en lo que llevamos de liga, el conjunto gerundense se ha situado entre los seis primeros clasificados y depende de si mismo en las tres jornadas que restan para disputar las eliminatorias de ascenso. Los números confirman la trayectoria ascendente de un equipo muy peligroso como visitante; no en vano, es el segundo mejor equipo de la categoría en ese aspecto y en sus últimas nueve salidas ha logrado cuatro victorias, tres empates y tan solo dos derrotas.

Pablo Machín ​recurrirá a las rotaciones en la semana más importante del curso, al haber en disputa tres encuentros en un plazo de ocho días. El técnico soriano recupera a Alcalá y Granell ​tras sus respectivas sanciones. El central reemplazará a ​Richy ​en el once y la duda es si el centrocampista catalán entrará por Eloi o Borja​, la gran duda gerundense en el centro del campo, sin descartar la presencia de ​Rubén Alcaraz.​ Machín también dará entrada a Maffeo ​por un desacertado Javi Álamo y a Mata por Lekic ​en la punta de ataque (el serbio ni ha viajado), dejando en el aire la posible titularidad de Sobrino en detrimento de Cristian Herrera​. ​​El técnico de Gómara aún no puede contar con Aday​, en el tramo final de su recuperación.

Ruipérez Marín es el elegido

El colegiado manchego ​Ruipérez Marín ​volverá a dirigir un encuentro entre ambos conjuntos tras ser el elegido también en el lejano partido de ida, disputado en Enero en ​Montilivi ​y que terminó con la victoria gerundense por un gol a cero tras un gol de Jairo Morillas​. Precisamente, esa victoria fue la que impulsó al Girona ​a un cambio de tendencia ya que, por aquel entonces, el conjunto catalán había logrado únicamente 19 de los 59 puntos que tiene actualmente.

Los 40 puntos logrados en este 2016 tras 11 victorias, siete empates y tres derrotas dejan al conjunto entrenado por Pablo Machín ​como el equipo con mejores números del año, por delante del ​Leganés, todo lo contrario que un Valladolid ​que tan solo acumula 25 puntos tras seis victorias, siete empates y ocho derrotas.

Pese a ello, el ​José Zorrilla ​es un estadio maldito para los gerundenses, que no han logrado puntuar en sus visitas al caer derrotado en los cuatro desplazamientos a ​Valladolid​. La más reciente, la victoria del conjunto pucelano la temporada pasada por dos goles a uno. Anteriormente, sendos uno a cero decantaron la balanza para los locales que también se impusieron en el primer partido disputado entre ambos conjuntos la temporada 58-59 por un claro ocho a uno.

Posibles alineaciones