El Girona ha conseguido hacer 'lo más difícil todavía': encadenar dos 'playoffs' consecutivos. Se antojaba -casi- imposible repetir la gesta de la temporada pasada, primero porque los 82 puntos de la campaña pasada eran una locura, y segundo porque la marcha del equipo a principio de temporada auguraba un año para sufrir. Una de aquellas campañas -una de cada dos- en la que el rendimiento es mediocre, como ya pasó en 2014, 2012 o 2010. La plantilla no cambió radicalmente, pero la adaptación de los nuevos jugadores no fue nada sencilla. Sin embargo, la entrada del nuevo año permitió a los de Pablo Machín hacerse fuertes en casa y llegar hasta las eliminatorias de ascenso.

Las incorporaciones en el mercado invernal dieron un plus de calidad para que el equipo mejorara sus prestaciones en lo que a resultados se refiere, ya que en cuanto a juego, no distaba mucho de lo que se vio el año pasado. El empate 'in extremis' en Mallorca justo antes del parón de Navidad permitió a los catalanes seguir fuera del descenso -zona que no han pisado en toda la temporada-, y a partir de ahí, el camino fue un ascenso increíble. El equipo dejó de perder en Montilivi, hizo de su feudo un fortín y fue sumando lejos de casa para obtener un total de 41 puntos (había cosechado 25 en las primeras 21 jornadas) en la segunda vuelta.

Ahora, el reciente recuerdo del doble K.O. de unas fechas similares de 2015 puede servir como experiencia positiva, en el sentido de no repetir los errores del pasado. El 1-1 del Lugo y el 1-4 del Zaragoza deben ser un estímulo para los jugadores que lo vivieron en sus propias carnes y también para aquellos que se han incorporado esta temporada. 

Los jugadores del Girona celebrando un gol | Foto: LFP.
Los jugadores del Girona celebrando un gol | Foto: LFP.

Nefasta primera vuelta

No era sencillo afrontar la temporada para un Girona que se quedó a las puertas del ascenso el curso pasado tras una fatídica última jornada. Las comparaciones son odiosas y, más aún, tras el mejor curso en la historia del club. Pese a ser uno de los presupuestos más pequeños de la Liga Adelante, el acuerdo que el club gerundense cerró con el Manchester City en pleno verano, sumado a los ingresos obtenidos y a un pequeño aumento de capital permitió a Quique Cárcel (director deportivo) y Pablo Machín (entrenador) formar una plantilla lo suficientemente competitiva como para aspirar a algo más que la simple permanencia.

Sin embargo, los resultados no acompañaron en el inicio de la temporada, especialmente en Montilivi. Los recién llegados tardaron en adaptarse al particular esquema táctico utilizado por el técnico soriano (3-5-2) y los problemas físicos de varios pesos pesados en la plantilla no ayudaron a que el equipo cogiera el rodaje suficiente durante las primeras jornadas. Pese a que el juego del equipo y el balance defensivo seguían siendo óptimos, los problemas a la hora de materializar las ocasiones eran un lastre demasiado grande durante los encuentros. La sensación tras el primer tercio de la tabla, con el equipo muy cerca de la zona de descenso, era que los rivales necesitaban muy poco para conseguir un botín demasiado amplio en comparación a los méritos contraídos.

Reacción para entrar en 'playoff'

El mercado de invierno y la llegada de un nuevo año permitieron coger aire y empezar a cambiar una tendencia que, incluso, podría haber conllevado la destitución de Pablo Machín. El club incorporó a tres nuevos jugadores, dos de ellos en la parcela ofensiva para paliar el enorme problema del conjunto gerundense cara a portería. Los fichajes de Cristian Herrera y Dejan Lekic, con el tiempo, han resultado ser clave para el resurgir del club catalán que, números en mano, ha sido el mejor en la segunda vuelta con únicamente dos derrotas y ambas por la mínima.

La mejoría en cuanto a resultados conllevó una mejora psicológica que se acentuó con el paso de las jornadas hasta llevar al equipo a la parte alta de la tabla. Montilivi fue un fortín durante el segundo tramo del campeonato (el equipo ha terminado la temporada sin caer derrotado en casa desde el mes de diciembre) y el conjunto entrenado por Pablo Machín siguió con los buenos números actuando como visitante (quinto mejor equipo en ese aspecto). Defensivamente, el balance ha sido inmejorable e Isaac Becerra se ha consolidado como el guardameta menos goleado de la categoría, con tan solo 28 goles encajados en 42 jornadas.

Con la victoria en Ponferrada tras el gol de Cristian Herrera en los últimos minutos, el equipo gerundense termina la temporada en cuarta posición con 66 puntos (17 victorias, 15 empates y 10 derrotas) y disputará la primera eliminatoria de 'play-off' de ascenso frente al Córdoba con el factor campo a favor.

Estandarte del equipo: Isaac Becerra

Sin duda alguna, el mejor del equipo durante la temporada regular ha sido Isaac Becerra. El portero de Santa Coloma de Gramanet es el nuevo 'Zamora' tras haber encajado tan solo 28 goles, siendo el único portero que ha encajado menos de 30. Su seguridad en la portería ha dado mucho al Girona, que muchas veces (18 en total) ha acabado con la portería a cero gracias al cancerbero del Barcelonès

Becerra crea tal seguridad en la portería que permite a la defensa estar más tranquila, un aspecto muy importante. Es un portero que debería tener muchas 'novias' en el mercado de fichajes, esta temporada ya decidió quedarse para ver un Girona en primera división, un objetivo que está a 360 minutos. 

Cabe mencionar también la grandísima temporada que han hecho Kiko Olivas y Pere Pons, ya que ambos han sido los más utilizados por Machín en toda la Liga Adelante, es decir, han disfrutado prácticamente de todos los minutos. La solidez defensiva de Olivas y el descaro de Pons han permitido al conjunto gerundense tener un juego más vistoso que otras temporadas.

Becerra planta el balón. | Foto: Andrea Ruiz (VAVEL).
Becerra planta el balón. | Foto: Andrea Ruiz (VAVEL).

Antecedentes en 'playoffs'

El Girona afronta el tercer 'playoff' en cuatro años, lo que le convierte en uno de los equipos que más veces ha disputado esta eliminatoria de ascenso en las últimas temporadas. En los dos precedentes, ha tenido distintas emociones; si bien es cierto que siempre es duro caer eliminado y no ascender a la máxima categoría, en la primera temporada se encajó mejor que la campaña pasada, aunque el golpe más grande -contra el Lugo- se había producido una semana antes.

En la temporada 2012/2013, el conjunto dirigido por Joan Francesc Ferrer Sicília, 'Rubi' -que este último tramo de temporada ha dirigido al Levante- disputó las eliminatorias de ascenso por vez primera en la historia del club. Los gerundenses consiguieron 71 puntos y fueron los cuartos clasificados. Almería (3º), Alcorcón (5º) y Las Palmas (6º) fueron los otros pretendientes a la Primera División. Los de 'Rubi' basaron su gran temporada en una solidez brutal en Montilivi, donde solo dejaron escapar 15 puntos (tres empates y tres derrotas).

En el tramo final de la temporada, una sospechosa derrota ante un ya descendido Xerez (2-4) y alguna decisión arbitral más que discutible, impidieron que el Girona subiera directamente, por lo que recurrió a los 'playoffs' para hacerlo. En la primera eliminatoria, un empate a uno en Alcorcón le daba muchas opciones para la vuelta, en la que endosó un 3-0 a los alfareros. Sin embargo, en el duelo frente al Almería, que había eliminado a Las Palmas, Charles y Esteban se conviertieron en los héroes de los suyos. El primero de ellos anotó tres de los cuatro tantos de la eliminatoria y el segundo detuvo un penalti a Felipe Sanchón en el partido de ida. El 4 a 0 global (0-1 en Montilivi y 3-0 en el Estadio de los Juegos Mediterráneos) mostró la clara superioridad de los de Javi Gracia.

Los jugadores del Almería se abrazan en el ascenso a Primera de 2013. | Foto: 20minutos.es
Los jugadores del Almería se abrazan en el ascenso a Primera de 2013. | Foto: 20minutos.es

La temporada pasada, la andadura por los 'playoffs' vino marcada por la forma cómo llegaron los catalanes. Los de Machín apostaron todas sus cartas para ascender directamente, pero los 82 puntos cosechados al final no fueron suficientes para subir. Un empate 'in extremis' del Lugo (1-1) en Girona y la victoria por 0-3 del Sporting en el Benito Villamarín dieron el ascenso a los asturianos y los catalanes tuvieron que recurrir al 'playoff'. 

El 0-3 en Zaragoza mostraba, otra vez, que aquel equipo y aquellos jugadores estaban hechos de otra pasta, pero la vuelta a la cruda realidad se produjo tres días más tarde, con un cruel 1-4 por parte de los maños. El doble batacazo en una semana fue un episodio que será muy difícil de olvidar por los aficionados rojiblancos, pero también para los jugadores, a los que les ha costado varios meses arrancar en la presente temporada. La tercera oportunidad para subir mediante el 'playoff' está a la vuelta de la esquina.

Los jugadores del Zaragoza celebran su pase en Montilivi mientras Jandro (Girona) está cabizbajo. | Foto: extradigital.es
Los jugadores del Zaragoza celebran su pase en Montilivi mientras Jandro (Girona) está cabizbajo. | Foto: extradigital.es

Análisis táctico

Desde su llegada a la ciudad catalana en marzo de 2014, Pablo Machín ha implementado un sistema tan novedoso como efectivo. Solo hay que mirar los números y los resultados conseguidos por el técnico de Gómara y se constatará que el éxito ha sido total. El 3-5-2, con tres centrales y dos carrileros largos, ha sorprendido no solo a la mayoría de rivales a los que se ha tenido que enfrentar el Girona, sino también a la propia parroquia gerundense, habituada a ver sistemáticamente el 4-4-2 de los entrenadores precedentes. 

Hay que señalar, sin embargo, que el entrenador soriano ha usado este 4-4-2 en algunas ocasiones a lo largo de la temporada, especialmente durante la primera vuelta. Cuando los partidos, sobre todo lejos de casa, estaban atascados o el equipo iba perdiendo por la mínima, el cambio del 3-5-2 al 4-4-2 solía ser habitual, para tener un activo más en ataque. El esquema inicial, no obstante, ha sido el que le ha dado mejores y mayores frutos a Machín.

Con Becerra como titular indiscutible, los centrales se los han repartido, principalmente, Kiko Olivas, Alcalá y Lejeune. Richy ha jugado mucho menos que el año pasado y Carles Mas ha tenido una presencia testimonial. En los carriles, Javi Álamo y Clerc han disputado la mayoría de minutos, aunque Aday, y en menor medida Coris, Pol Llonch o Pablo Maffeo han ocupado estas demarcaciones. Los carrileros no solo defienden y ayudan a los tres centrales, sino que aparecen a menudo en ataque, con internadas por la banda o con centros para los delanteros.

El centro del campo ha tenido un baluarte principal: Pere Pons. Aunque el de Sant Martí Vell estuvo lesionado durante varias semanas, su progresión ha sido constante y en muchos partidos ha sido el mejor. Ha estado bien secundado por Eloi y Granell, aunque en la segunda vuelta también ha tenido mucho protagonismo Borja García como enganche. Alcaraz tuvo una participación muy activa, especialmente durante la primera vuelta, en la que anotó dos goles.

Los delanteros de Machín suelen ser altos y muy contundentes. A pesar de apostar por Felipe Sanchón durante la primera parte de la temporada, el veterano jugador ha dejado de aparecer en sus convocatorias y las irrupciones en el mercado invernal de Lekic y Christian Herrera han servido para dar más competitividad en un sector que sufrió mucho durante varios meses. Mata ha sido el delantero fijo, mientras que Sobrino ha sido una de las notas negativas del curso, por sus constantes lesiones. En el tramo final puede ser un buen 'fichaje'.

Alineación titular en la primera jornada ante el Bilbao Athletic, en San Mamés (0-1). Los suplentes fueron Jairo (autor del gol), Aday y Vivancos.
Alineación del Mirandés 1-0 Girona de la 7ª jornada. Los cambios fueron Felipe, Borja y Llonch.
Alineación titular de la 14ª jornada frente al Albacete en casa (3-0). Debut de Sobrino y primera victoria en Montilivi.
Alineación titular del Girona en la penúltima derrota del curso en Alcorcón (1-0). Los cambios fueron Javi Álamo, Borja y Aday.
Alineación que venció en Llagostera (0-1) en la jornada 27. Los cambios fueron Richy, Borja y Clerc.

La plantilla

Porteros:

Germán Parreño (1). El notable meta cedido por el Espanyol no ha debutado en Liga por el gran estado de forma de Becerra, y únicamente una sanción (lleva cuatro tarjetas amarillas) o una lesión de éste último le daría la titularidad. Ha disputado todos los minutos de Copa del Rey y Copa Catalunya.

Isaac Becerra (13). El guardameta de Santa Coloma ha demostrado otra temporada más que está a un nivel sensacional. Con 28 tantos encajados en 42 jornadas, se convierte en el nuevo 'Zamora' de la Liga Adelante. Ha dejado la portería a cero en 18 ocasiones durante el presente curso.

Defensas:

Coris (2). El canterano ha tenido menos protagonismo que la temporada pasada porque ha tenido muchos problemas con las lesiones. En la mayoría de partidos ha salido desde el banquillo y ha actuado de revulsivo.

Carles Mas (3). El central bañolense ha tenido pocas opciones de hacerse con la titularidad durante este curso. Sus cinco apariciones se han sumado a una inoportuna lesión del ligamento cruzado anterior, lo que le mantendrá alejado de los terrenos de juego entre seis y ocho meses.

Lejeune (4). Fichado por el Manchester City en verano y cedido de nuevo al club presidido por Delfí Geli, el francés no empezó la temporada al nivel que había mostrado la temporada anterior, aunque en consonancia con el equipo, ha acabado siendo providencial en muchos partidos. Ha marcado tres tantos.

Alcalá (5). Llegó procedente del Llagostera a cambio de 200.000 euros y empezó siendo suplente. A partir de la décima jornada, las cosas cambiaron y se quedó con la titularidad hasta -casi- el final, cuando Richy ha alternado con él en los últimos encuentros. Marcó un golazo al Oviedo.

Richy (7). Con 40 partidos a sus espaldas la temporada pasada, el curso ha sido difícil para el gallego. Empezó siendo titular, pero Alcalá le ganó el puesto y posteriormente una inoportuna lesión le apartó dos meses del equipo. Ha acabado jugando las últimas jornadas y puede ser un buen activo de cara al 'playoff'.

Maffeo (15). Llegó en el mercado invernal en forma de cesión por parte del Manchester City. Su condición de lateral derecho puro ayudaba a Machín en el caso de cambiar a un 4-4-2 para que el joven jugador actuara en esa demarcación, aunque en los últimos encuentros ha intervenido en el carril derecho, donde ha dejado partidos muy notables.

Clerc (17). Lo ha jugado casi todo -ha sido titular en 37 encuentros- y ha ido de menos a más. Empezó algo dubitativo, dada su condición de lateral o de central, pero poco a poco ha ido incorporando los automatismos del carril y ha sido un peligro constante para las defensas rivales. Su velocidad e incorporación al ataque le valieron para anotar un gol al Albacete.

Kiko Olivas (22). Fichado del descendido Sabadell, su rendimiento ha sido excelente. Con criterio con el balón, seguro atrás, correctísimo en sus acciones y autor de cuatro goles, Olivas ha sido el jugador de campo que más minutos ha disputado. Solo se perdió 14 minutos frente al Córdoba, en la primera vuelta.

Marcelo Djalo (33). El ex jugador del Granada no llegó a debutar con el Girona en liga, y solo lo hizo en Copa del Rey, donde anotó un gol, y en Copa Catalunya. A mediados del mes de abril se anunció su traspaso al UCAM de Murcia de Segunda División B, que ha ascendido a la categoría de plata.

Centrocampistas:

Granell (6). Sin duda una de las piezas claves del equipo, aunque con algo menos de protagonismo que la temporada pasada, en la que se salió. Ha intervenido como titular en 30 partidos y ha colaborado en la faceta goleadora con cuatro tantos.

Pere Pons (8). Los engranajes de Machín pasan por su emblema, por uno de los jugadores con más proyección de la Liga Adelante y que, de no conseguir el ascenso, el Girona tendrá muy difícil retener. Se perdió cinco jornadas consecutivas porque tuvo que ser operado en la pierna por un edema.

Eloi Amagat (10). Demasiada irregularidad para un 'gironí' de pura cepa como lo es Eloi. Ha disputado 1.879 minutos repartidos en 28 encuentros y ha anotado un gol, al Lugo. Su garra, su temple y su calidad pueden ser un factor muy a tener en cuenta para un jugador que disputará su tercer 'playoff'.

Aday (11). Parece que por fin ha dejado atrás las lesiones que le han amargado la segunda parte de la temporada. También ha tenido apariciones demasiado esporádicas para su gusto y para el del espectador. Su versatilidad le permite jugar en cualquier posición y hacer siempre un buen papel. 

Nwakali (12). El nigeriano estuvo más relacionado con sus problemas burocráticos que con sus apariciones sobre el verde. Cedido por el Manchester City el último día de mercado, no llegó hasta el 5 de octubre, debutó en la Copa Catalunya y volvió a su país... ¡hasta que regresó el 10 de febrero! Su nula participación en liga le hizo buscar otro destino y ahora prueba suerte con el IK Start del campeonato noruego.

Alcaraz (14). El ex jugador del Hospitalet ha tenido un buen rendimiento en la temporada de su debut. En la primera vuelta consiguió anotar dos goles, y en las jornadas en las que sustituyó a Pere Pons rindió a un gran nivel. Buen centrocampista con futuro.

Pol Llonch (21). El jugador cedido por el Espanyol ha desaparecido por completo de los planes de Machín. Empezó teniendo minutos en nueve jornadas consecutivas (de la cinco a la 13), donde actuó más de carrilero derecho que de centrocampista, y no desentonó para nada, pero ha quedado relegado al ostracismo.

Javi Álamo (23). Llegó como una promesa y ha ido demostrando destellos de lo buen jugador que es, pero de forma intermitente. Sus problemas físicos, en unas ocasiones, y su pobre rendimiento, en otras, han decantado la balanza en su contra, especialmente en las últimas jornadas. 

Borja García (24). Cuando Borja García ha jugado, el Girona ha ido bien. Podría perfectamente ser un resumen de lo que ha sucedido en la segunda parte de la actual campaña, en la que el madrileño empezó a coger la confianza y los minutos que no tuvo en el primer tramo de temporada. Su constante magia con el balón hace de él un gran jugador para el futuro más inmediato del Girona.

Delanteros:

Mata (9). El único delantero que ha tenido la continuidad durante toda la temporada. Con un bagaje goleador ligeramente inferior al del año pasado (nueve tantos por 12 un año atrás, y aun así ha sido el máximo goleador del equipo), el madrileño promete pelea, lucha, esfuerzo y todo el sudor que haga falta. No ha renovado con la entidad gerundense y su futuro es ahora mismo una incógnita.

Cristian Herrera (16). Llegó en el mercado invernal pero se ha hecho con un puesto en la delantera. Empezó dubitativo de cara a gol, aunque su juego de espaldas es más que interesante. Lleva cinco dianas -la última certificó el 'playoff'- y llega más en forma que nunca a la eliminatoria de ascenso.

Jairo (18). Y nunca más se supo de Jairo. Lamentablemente, éste es la realidad del sevillano a partir de la jornada 32, la última en la que disputó algún minuto. En los 24 encuentros en los que ha hecho acto de presencia, el jugador cedido por el Espanyol marcó seis goles, una notable cifra para un delantero debutante en Segunda. Machín ha prescindido de sus servicios de forma incomprensible.

Felipe Sanchón (19). Algo similar a Jairo le ha sucedido al jugador más veterano de la plantilla gerundense. El barcelonés empezó siendo titular indiscutible, y lo fue casi toda la primera vuelta. Su sorprendente incapacidad de ver portería (cero goles) y una inoportuna lesión le han apartado definitivamente del equipo.

Sobrino (20). Uno de los fichajes frustrados de la temporada por sus constantes lesiones. El de Daimiel llegó al Girona como la gran incorporación del verano, pero ya lo hizo lesionado, y a la hora de la verdad se ha podido disfrutar de él en cuentagotas. No debutó en liga hasta el mes de noviembre y volvió a lesionarse varias semanas. Las últimas jornadas ha tenido una participación muy activa y en total suma dos tantos.

Lekic (25). Otra de las incorporaciones del mercado invernal, Lekic llegó tras haber pasado por la liga india. El ex de Osasuna no tardó en debutar y ha anotado algunos goles claves para las aspiraciones gerundenses. Su imponente 1,93m y sus cinco tantos pueden ser un buen aval, no solo para el 'playoff', sino también para su continuidad en el futuro.