Partido vibrante el que disputó este domingo en la Nueva Condomina. Lo cierto es que el nivel de expectativas ya era alto de por sí mismo antes de que el árbitro pitase el inicio del duelo, ya que el Real Murcia debía ganar sí o sí para reencontrarse con un triunfo perdido desde hacía 8 jornadas, mientras que el Barcelona B buscaba  refrendar la mejoría de los últimos dos partidos y alcanzar su tercera victoria consecutiva.

Posesión contra contragolpe

Como era previsible, el filial azulgrana llevó la posesión del juego en los primeros compases del compromiso liguero, mientras el Murcia esperaba atrás, bien replegado y presionando la salida del balón, para robar rápido e intentar encontrar un buen contragolpe.

Los pupilos de Eusebio intentaron constantemente trazar jugadas elaboradas, mientras que el conjunto local apenas tocaba el cuero, y cuando lo hacía, le duraba escasos segundos. El Real Murcia intentaba buscar la espalda de los centrales, con balones largos a Tete y, sobre todo, a Kike García, el mejor del partido por la parte grana. No hubieron apenas ocasiones reseñables en los primeros quince minutos del enfrentamiento, únicamente un despeje de Casto, que rebotó en Edu Bedia y casi le cuesta un disgusto al Murcia, al salir el cuero repelido hacia la meta murciana.

Se sacudían bien la elevada presión pimentonera de los primeros minutos los jugadores del Barcelona, con mucha participación de Samper, Sanabria y Denis, que intentaban trazar triangulaciones pero sin fructificar en ninguna oportunidad de peligro. Por otra parte, los futbolistas granas no estuvieron acertados en el último pase.

El primer disparo del Real Murcia vino gracias a una jugada personal de Kike García en el minuto dieciséis, pero el esférico salió rebotado en un jugador del filial barcelonista.

El dominio del Barcelona en la primera parte era total, dando la sensación de tener el partido totalmente controlado. La posesión era muy favorable al equipo catalán, con un 72 por ciento de posesión, por un 28 del Real Murcia, aunque lo cierto es que el control del balón no es una de las armas del cuadro que dirige Velázquez, sino que centran su juego en la velocidad y desequilibrio de sus extremos, sobre todo.

En el minuto veintidós de la primera mitad llegó una buena ocasión para el conjunto visitante, tras un buen centro de Planas desde la izquierda que no acertó a rematar Sanabria en primera instancia; Alex Martínez despejó y Sanabria, muy avispado, volvió a intentar un remate, esta vez de chilena, que se marchó fuera por poco, aunque la jugada estaba anulada por juego peligroso.

A partir de ese momento, el Barcelona creció y su rival, todo lo contrario. No le salían las jugadas de estrategia al equipo que dirige Julio Velázquez y Tete no estaba teniendo la oportunidad de realizar demasiadas jugadas para desbordar, con pocos espacios en la banda izquierda.  Los jugadores pimentoneros decayeron en intensidad y los pupilos de Eusebio lo estaban aprovechando.

Dominio azulgrana

Denis Suárez, que  manejó perfectamente los ‘tempos’ del juego, sirvió un cuero medido a Dongou, que significó el estreno goleador del camerunés en Segunda esta temporada. Una perfecta triangulación entre Sanabria, Denis Suárez y Dongou, para que este último pusiera el 0-1 en el marcador en el minuto treinta y tres del primer período.

El Real Murcia debía dar un paso adelante, y empezar a buscar la portería, ya que hasta esos momentos poco ímpetu y ocasiones habían demostrado. Golpe para el conjunto local, que vio como se le volvieron a adelantar en el marcador.

Kike García protagonizó la jugada más peligrosa del Real Murcia hasta ese instante por la parte pimentonera; se revolvió en el área, en el treinta y ocho de partido, pero su tiro se fue demasiado cruzado y acabó en la banda.

El partido se rompió en los últimos minutos de la primera mitad. Tete logró conectar un buen disparo que desvió el guardameta  Ortolá, quedando el cuero en los pies de Kike que, incomprensiblemente debido a su enorme capacidad goleadora, la echó fuera en boca de gol, si bien es cierto que tenía la oposición de Bagnack.

Se animó el Murcia en los instantes finales del primer acto. Los granas buscaban el empate con ahínco, con un Kike García que se echó echando el equipo a la espalda.

Finalmente se llegó al descanso de la primera mitad con derrota momentánea del equipo de la capital del Segura. Vencía el FC Barcelona B por 0-1, tanto logrado por el camerunés Jean Marie Dongou.

Todo por decidirse en la Nueva Condomina y el destino deparaba muchas emociones para el segundo período, que empezó con una gran jugada individualde Tete por banda izquierda, que logró irse del muleño Patric y sacar un centro al área, pero ni Kike ni Eddy lograron conectar el remate.

El Real Murcia mostraba más intensidad y mejores intenciones de peligro en este comienzo de segunda parte. Salió enchufado el equipo murcianista, con un Tete que se cambió de banda y volvía a ser un incordio para el conjunto rival.

Malonga, revulsivo

Julio Velázquez volvió a darle media hora de juego a Dominique Malonga, y el conjunto pimentonero volvía a jugar nuevamente con dos puntas buscando la remontada. El partido se tornó más emocionante en los primeros quince minutos de la segunda parte, dando la impresión de estar más igualado, pero sin ocasiones claras de gol por el momento.

Corría el minuto sesenta y cinco de juego cuando Dongou, una pesadilla para los defensas murcianistas, no aprovechó  un pase a la espalda de los centrales granas, y el balón se marchó por encima de la meta defendidad por Casto. Primer aviso de peligro del FC Barcelona B, que intentaría sentenciar el duelo cuanto antes. Así fue como, dos minutos más tarde, de nuevo Jean Marie Dongou recortaba con su pierna derecha dentro del área, para disparar finalmente con la izquierda colocado, pero Casto demostró sus reflejos con una gran estirada abajo que evitó el 0-2.

Parecía que se volvía a enchufar el conjunto barcelonista en el partido, tras las dos ocasiones consecutivas del delantero camerunés Dongou. Sendos ataques catalanes fueron contrarrestados por Tete, que exhibió su efectividad en el regate en una baldosa, para sacar un centro medido que se paseó con mucho peligro por el área pequeña de Ortolá, sin encontrar un compañero que rematara la faena. Instantes después, Malonga le daba una buena asistencia a Molinero, que esquivó a Ortolá pero se quedó sin ángulo para finalizar en condiciones.

No se iba a rendir el Real Murcia, y comenzó a asediar las inmediaciones del área azulgrana. Kike García, hombre referencia de los murcianos, se sacó un ‘chut’ de rosca desde fuera del área, pero el balón se marchó un tanto desviado. Lo intentaba con coraje el Murcia, pero hasta el momento no   sonreía la fortuna de cara a gol.

Quedan quince minutos para la finalización del choque y el conjunto dirigido por Velázquez se mostraba muy superior a los pupilos de Eusebio sobre el verde de la Nueva Condomina. Los locales rozaban constantemente el tanto del empate, arriesgando cada vez que se venían arriba, ya que existía la posibilidad de que los blaugranas hicieran gala del contragolpe para poner la sentencia. No le quedaba de otra al Real Murcia.

Sanabria estuvo a punto de finiquitar el partido tras un centro de Denis Suárez. Casto se encontró la pelota y logró mandarla a córner, por suerte para los pimentoneros. Casto estaba salvando al Real Murcia del 0-2, y el equipo grana continuaba así con opciones en el partido.

Final de locura

Sin embargo, y por una vez en muchas jornadas, la suerte le sonrió al equipo de la capital del Segura. Quedaban ocho minutos para la conclusión del duelo cuando Saúl Berjón, que había entrada hacía escasos segundos por Tete, era el encargado de botar un córner que acabaría con un remate de cabeza en el primer palo de Kike García, que anotó así la igualada en el marcador. 1-1 y restaban siete minutos más el añadido para la finalización del compromiso. De nuevo la estrategia en el Real Murcia, y de nuevo la superioridad de Kike García, que lograba su décimo gol de la temporada.

Los murcianos se lanzaron entonces en tromba a por la victoria. Malonga se sacó un fuerte latigazo desde muy lejos, en el minuto cuarenta, obligando a Ortolá a quitársela de encima. Muy enfadado el meta del cuadro catalán, que se quejaba de la bajada de intensidad de sus compañeros. Lo pasaba mal ahora el cuadro de Eusebio, cuando quedaban apenas cinco minutos para el final del partido.

Un error defensivo de Bagnack hipotecó la remontada del Real Murcia; el central cedió a su portero en corto, pero Kike García estuvo muy atento, interceptó el balón y se la pasó a Malonga en boca de gol , que nada más tuvo que empujarlo. Remontaba el cuadro pimentonero con coraje y creyendo en sí mismo. El tanto llegó en el minuto ochenta y seis, y significó el primer gol de Malonga en la Liga Adelante.

Un nuevo error de Bagnack, que parecía gafado, obligó a Sergi Samper a cometer penalti, por derribar a Kike García que se disponía a tirar. El encargado de transformar el penalti, y de hacer el definitivo 3-1 favorable el Real Murcia fue Saúl Berjón.

Minutos finales de locura en la Nueva Condomina. El equipo pimentonero consigue una victoria tras ocho jornadas sin ganar, en las que acumuló seis empates y dos derrotas, mientras que el FC Barcelona B se marchaba a tierras barcelonesas con la sensación de que sus graves errores defensivos condicionaron el resultado final. En cualquier caso, el cuadro grana vuelve a zona de playoffs, y se instala sexto en la tabla, con 26 puntos, mientras que el filial azulgrana ocupa la decimoseptima plaza, con 22 puntos.