El Real Murcia ya ha conseguido el objetivo que se marcó a principio de temporada que era llegar a los 50 puntos que supusiesen la permanencia en la categoría de plata. Aún queda poco para ejecutar ese objetivo pero es cierto que tras esas dos victorias en casa la han dejado más cerca, incluso para poder pensar en algún objetivo más alto.

El gran estado de forma del jugador Wellington Silva ha sido la principal causa de los últimos buenos resultados, destacando sobre todo el último encuentro ante el Lugo donde marcó un doblete. Su velocidad y desborde han mareado a las defensas rivales, y sus pases y centros medidos han conseguido generar la chispa que le faltaba al Real Murcia, tras la lesión de Tete. Su adaptación al equipo ha sido algo tardía, también debido a que se incorporó a la disciplina pimentonera posteriormente, se le achacaba de individualista y poco trabajador en defensa pero gracias a Velázquez ha corregido en esa faceta.

Cuando el extremeño Tete se lesionó haciéndose previsible que el jugador estaría de baja mucho tiempo, casi toda la segunda vuelta, saltaron las alarmas en el equipo ya que el extremo zurdo era el que más peligro generaba. Pues tras varios cambios del entrenador Julio Velázquez por esta lesión encontró en Wellington un carrilero que ocupase toda la banda desplegando poderío físico y calidad. Finalmente el esquema le funcionó a Velázquez tanto que ha hecho que el brasileño cedido por el Arsenal haya mejorado los registros de Tete.

Con Tete entrenando con el resto del grupo en los últimos entrenamientos, Velázquez tendrá que elegir si meter poco a poco al extremeño o seguir apostando por Wellington que tan buenos resultados le ha dado. Quizá el entrenador grana opte por poner a los dos extremos y cambiar el sistema quitando uno de los dos delanteros titulares en este momento, Malonga o Saúl que a pesar de su calidad a balón parado no está rindiendo a su mejor nivel. Lo menos acertado en este momento seria apartar a Wellington de los once jugadores titulares.