Si tuviéramos que resumir el partido con una expresión, lo podríamos hacer perfectamente con una latina: coitus interruptus. El Sabadell se jugaba mucho este domingo en la Nova Creu Alta ante su afición. Los resultados de la jornada habían acompañado. Con el empate de Osasuna, los arlequinados dependían de sí mismos para conseguir la permanencia de aquí a final de temporada. El Mallorca, además, llegaba relativamente tranquilo a este encuentro, pues tenían igual de lejos el ascenso que el descenso.

Los pupilos de Juan Carlos Mandiá llegaban con ese plus de motivación. Vistos los resultados y lo que eso suponía, sólo valía ganar. A parte, habían sumado cuatro jornadas sin perder y tan solo dos goles en contra. La solidez defensiva era el gran problema del Sabadell, algo que parece solucionado desde la llegada de Mandiá al equipo. El problema hoy, pero, no ha sido eso, sino el no acierto de cara a puerta. A los catalanes les ha faltado cerrar el partido con un segundo tanto en la primera mitad. 

El conjunto lanero presentaba hoy una novedad importante en su alineación. Eguaras, tras muchas jornadas relegado del equipo, ha reaparecido en la once inicial. El centrocampista vasco parecía no entrar en los planes de su técnico, pero hoy ha sido la gran sorpresa en la Nova Creu Alta.

El dominio fue arlequinado

Las gradas del estadio presentaron buen aspecto a pesar de la hora. El club ha dado facilidades esta vez para presenciar el partido sin tener que echarse la mano al bolsillo. Llevando cualquier prenda del equipo, podías adquirir una entrada de forma gratuita. El encuentro empezó con un Sabadell muy superior. El conjunto arlequinado administró el balón de inicio a fin creando ocasiones peligrosas en el área de Cabrero. El Mallorca se dedicó a mirar como rodaba el esférico durante 45 minutos. El público esperaba con ansias ese primer gol que le hiciera soñar con una victoria que sería una de las más importantes de la temporada, y no tardó en llegar.

El mexicano volvió a anotar con el Sabadell

A los 15 minutos, Collantes se interna por banda derecha, hace una gran asistencia al segundo palo, y Aníbal envió el balón al fondo de la red. El único intento del Mallorca fue a los 28 minutos, cuando Nauzet tuvo que intervenir de forma providencial para evitar la igualada, que hubiese sido obra de Arana. Hasta el descanso, Collantes se erigió como uno de los protagonistas, junto con Marcos García y Aníbal Zurdo, autor del único tanto del partido. Las ocasiones, pero, no se materializaron y condenaron al Sabadell a marcharse con el 1-0 al descanso.

El Mallorca fue algo más ofensivo

La tortilla pareció darse la vuelta en la segunda mitad. El Mallorca salió algo más adelantado, tirando todas las líneas más arriba y controlando la posesión del balón mucho más tiempo que en el primer tiempo. El conjunto bermellón presionó algo más las salidas de los laneros, encerrándolos durante gran parte de los minutos. Fue entonces cuando el Sabadell empezó a aprovechar la velocidad y tirar contras. Las ocasiones, a pesar del control por parte de los visitantes, fueron escasas. Incluso los laneros gozaron de alguna oportunidad más que el Mallorca para poner el segundo en el marcador.

Fueron demasiado inocentes

El Sabadell sufrió hasta el final, y lo pagó. A medida que pasaban los minutos, el conjunto de Miquel Soler se iba insinuando cada vez con más intención a la portería de Nauzet Pérez. Agus, Arana y Joselu fueron los jugadores más peligrosos hasta el final del encuentro. Llegado el minuto 90, el estadio veía como Pizarro Gómez decidía añadir cuatro minutos y protestó la decisión. Casualidades de la vida, a falta de 20 segundos para el final, Pau Cendrós igualó el partido poniendo un balón dividido al fondo de la puerta arlequinada.

La última puñalada, que le dolió mucho a todos los aficionados del CE Sabadell. Con el partido ganado, dependiendo de sí mismos para salvarse y te empatan en el último minuto. Es doloroso e injusto para los catalanes. La buena noticia es que siguen a cuatro puntos de Osasuna, el primer equipo que se salvaría ahora mismo. La próxima jornada, el conjunto de Juan Carlos Mandiá visita Anduva para enfrentarse al CD Mirandés e intentar sumar tres puntos que sabrían a gloria.