La sanción de Isma López le reabre las puertas de la titularidad en el lateral izquierdo a Alex Menéndez, donde en estos últimos partidos que ha disputado parece haber dado un paso al frente en el aspecto del rendimiento. Agrega que "en este equipo nadie es más que otro" haciendo referencia a la posible entrada en el once y en un equipo donde cuentan todos por igual. Considera clave está faceta ya que "mejora el nivel de uno mismo y del grupo" con la competencia que existe. Deja atrás sus lesiones, para volver con más ganas que nunca de entrenar y mejorar.
Da gracias a las pocas tarjetas que ha visto la defensa rojiblanca "en especial a los dos centrales" matiza en sus palabras dando la importancia que merece a este hecho poco común en el fútbol. Con la mirada puesta en su compañero de zaga Alberto Lora, el cual "espera que comience a trabajar fuerte y llegue al partido" y que continua pendiente de evolución. No quiere hablar de los árbitros ni sobre su expulsión rigurosa en Zaragoza, ya que solo piensa "en trabajar como hasta ahora y depender de ellos mismos" y seguir sumando para continuar con el sueño del ascenso.
Habla del rival del domingo, el Llagostera, el cual lleva once jornadas sin perder y será una buena prueba de fuego para las aspiraciones rojiblancas. Recuerda ante ese dato que "vamos segundos y son ellos los que tienen que estar pendientes de nosotros" y no se preocupa más que del trabajo que desarrollen ellos mismos. Tras ser un tema tabú el ascenso, Alex habló sin tapujos lo que cualquier aficionado piensa que yendo segundos, a falta de ocho jornadas, es de locos no pensar en el ascenso directo. Pero con cautela matiza que en lo único que piensan es en el partido del domingo, y de reojo en ese Las Palmas - Valladolid de esta jornada.
Valora el aspecto defensivo de este Sporting, alegando que "cualquiera que vea los entrenamientos sabrá que el que salga lo hará bien" cumpliendo el tópico de que se juega como se entrena. Cuenta con las bajas de Luis e Isma, pero no descarta aun a Lora. Por último habló del hombre estrella estas semanas en Gijón, como es Jorge Meré, ya habían coincidido en el filial el curso pasado y alega "que tiene la cabeza bien fría y bien amueblada" lo que le permitirá tener un futuro prometedor pese a su edad, debido a su gran concentración durante los partidos.