Doce años han pasado desde que la UD Las Palmas pisó por última vez los terrenos de juego de la Primera División española. Mucho tiempo en el que el corazón de la afición amarilla ha sufrido y ha visto como se producían demasiados cambios, en ocasiones difíciles de asimilar.

Desde el dolor de tener que abandonar un estadio legendario, mágico e inolvidable como el Estadio Insular, a tener que luchar por no descender de categoría en Segunda División o volver de nuevo al barro y tener que subsistir en la división de bronce. Sin contar además los problemas económicos, que han llevado a la entidad a estar al borde de la desaparición y de romper definitivamente de dolor un corazón amarillo acostumbrado a sufrir por su equipo.

Todo eso llegó después de haber jugado durante 30 temporadas en la élite del fútbol español, siendo un club histórico en el país. Esa antigua herencia es la que precisamente se recuerda con orgullo en las islas y se usa aún más en las circunstancias actuales, para empujar definitivamente a un equipo que está de nuevo ante una oportunidad única de volver al lugar que dejó hace tiempo atrás.

Tras quedarse a las puertas del ascenso la temporada pasada, esta vez Las Palmas ha vuelto a clasificarse para el playoff, aunque en esta ocasión ha conseguido llegar a los dos partidos donde todo se decide, habiendo además cosechado en la ida un empate sin goles fuera de casa.

Las Palmas lleva doce años sin estar en Primera

Una afición amarilla en ocasiones criticada, está respondiendo en un momento importante y fueron más de 500 los aficionados que viajaron hasta Córdoba de diferentes puntos de la geografía española, para alentar a sus jugadores en tan importante cita. En casa el escenario será aún mejor, con todas las localidades vendidas, el Estadio de Gran Canaria volverá a convertirse en una olla a presión llena de almas con la ilusión de que en la tarde del domingo, la historia vuelva a la isla para convertirse en presente y que con el aura inconfundible del antiguo Insular, la afición lleve en volandas a su equipo de nuevo al olimpo del fútbol español.

Ilusión cordobesa

Pese a los motivos más que suficientes para desear el ascenso en la parroquia amarilla, los cordobeses se han volcado con su equipo ante una oportunidad histórica de volver a una categoría, en la que no están desde hace 42 años y que no muchos hoy en día recuerdan.

En el partido de ida el Nuevo Arcángel la afición blanquiverde llenó el estadio a rebosar y no paró de animar a su equipo. Ensordeciendo el ambiente con una espectacular pitada cuando el balón estaba en los pies rivales, intentando que el nerviosismo se apoderase de ellos.

Sus buenos resultados fuera de casa, donde ya venció por ejemplo al Real Murcia en la eliminatoria anterior, son la esperanza de los cordobeses para afrontar el duelo en Gran Canaria con la ilusión de poder derrotar a los de Josico. La solidez defensiva del conjunto amarillo, que no ha encajado ningún gol en los tres partidos del playoff, sirve a la afición local para confiar en un buen resultado de su equipo ante los suyos.

Declaraciones previas

Josico habló hoy en rueda de prensa, donde destacó que pese al cansancio de sus jugadores, Las Palmas "merece el ascenso" y que espera un encuentro diferente al del pasado jueves. También comentó que el público les puede llevar en volandas, aunque advirtió que hay que tener en cuenta un posible exceso de motivación por el ambiente y el recibimiento que se espera a la llegada de los jugadores al estadio.

Por parte del equipo andaluz, Albert Ferrer aseguró que sus jugadores están convencidos de que pueden conseguir el ascenso: "Los jugadores están muy bien, hay muy buen ambiente, están muy metidos, mentalmente muy convencidos y en ese sentido estoy muy tranquilo porque estamos en un momento en que todo el mundo cree que se puede conseguir el ascenso".

Bajas

En el cuadro local, Nauzet es la única duda con la que cuenta Josico, tras retirarse lesionado el pasado jueves en el Nuevo Arcángel. Las bajas seguras del entrenador amarillo son Dani Castellano por lesión y Masoud, que se encuentra en el Mundial de Brasil participando con Irán.

El Córdoba por otro lado, sigue contando con las bajas de Caballero y Pelayo por lesión, a la que se une la de Luso, que tampoco pudo acabar el encuentro de ida.

Onces probables