La hinchada amarilla se encontrará este domingo, a las 11.00 (hora canaria), en el octavo encuentro de la Liga Adelante frente al Real Betis a dos viejos conocidos del Estadio de Gran Canaria. Por un lado, al veterano delantero grancanario Rubén Castro, que vistió la camiseta amarilla desde la temporada 2000-2001 hasta el curso 2004; y por otro, al cordobés, Álvaro Cejudo, un jugador que dejó un gran recuerdo en la grada, siendo uno de los referentes del equipo en la temporada y media que disputó como amarillo.

Rubén Castro

El hermano menor de los Castro llegó al primer equipo de la UD Deportiva tras despuntar, como delantero goleador, en las categorías inferiores del club. El grancanario, hermano de los también futbolistas Álex Castro y Guillermo Castro, nació en el barrio capitalino de la Isleta en 1981, barrio donde comenzó su andadura en el mundo del fútbol en el Artesano, hasta que fue captado por los alevines de la UD Las Palmas.

Hermano de fútbolistas debutó con Las Palmas en 2001

El delantero debutó con Las Palmas en Primera División en el año 2001, aunque no sería hasta la siguiente temporada cuando comenzaría a eclosionar como un gran talento. Fue en esta campaña (2001-2002) cuando Rubén saltó a la palestra mediática, tras hacer doblete en el Estadio Insular en el 4-2 al Real Madrid, donde logró meter un gol de vaselina a Iker Casillas.

Periplo por Primera

Tras varias temporadas siendo el referente del equipo amarillo en la delantera, donde logró el pichichi de Segunda División en la 2003-2004, sus buenas actuaciones llamarón la atención de los grandes clubes de Primera, siendo el Deportivo de la Coruña quién se hiciera con sus servicios en el verano de 2004.

En el club gallego, el ariete de 33 años compartió vestuario con los actuales jugadores amarillos Juan Carlos Valerón, Aythami y Momo, quien estaba incluido en la operación de traspaso junto a Rubén, con la finalidad de eliminar la deuda que la UD Las Palmas mantenía con los coruñeses por el fichaje del argentino Gabriel Schürrer.

Jugó 34 partidos con el Deportivo, siendo cedido siete veces en los seis años que fue deportivista

Sin embargo, el canterano no encontró sitio en el equipo gallego y empezó un peregrinaje por múltiples equipos de Primera.

En la temporada 2004/05 fue cedido al Albacete, y tras su regresó al Deportivo (donde no consiguió la titularidad en la temporada siguiente), volvió a ser cedido, esta vez al Racing de Santander en la 2006-2007.

Castro no duró mucho con los cantabros, equipo que abandonó antes del final de año debido a la falta de oportunidades, para recalar en el Nastic de Tarragona, donde cuajó una buena temporada aunque no pudo evitar el descenso de los catalanes a Segunda División.

Despunte en Segunda

En la temporada 2007-2008 comenzó su tercera etapa con el Deportivo, siendo su participación prácticamente nula, volviendo a ser cedido en la siguiente temporada 2008/2009 al SD Huesca en Segunda División.

Tras cumplir su ciclo en el Huesca, el delantero llegó un acuerdo con el Deportivo para recalar en el Rayo Vallecano, donde vivió su última cesión, completando un gran curso en Segunda a pesar de no conseguir el ascenso a la liga BBVA.

Llegada al Real Betis

Tras casi seis años de continuas cesiones y con un Rubén entrando en su madurez deportiva fue traspasado en la pretemporada 2010-2011 al Real Betis Balompié, terminando su situación contractual con el Deportivo de la Coruña, viviendo desde entonces sus mejores años como profesional.

Con los sevillanos Rubén Castro se ha hecho indiscutible, siendo el delantero titular del equipo cuando las lesiones no le han apartado de los terrenos de juegos. Con el Betis el canario ha conseguido un ascenso a Primera División, sufriendo un descenso a Segunda, anotando dos goles en la Copa de la UEFA y 82 en total con la camiseta verdiblanca en las cuatro temporadas que lleva siendo el ídolo del Benito Villamarín.

Álvaro Cejudo

El extremo cordobés de los béticos es un jugador muy querido por la afición grancanaria, a la cual deleitó durante la campaña 2009-2010 y la mitad de la 2010-2011, antes de ser traspasado al Osasuna en el mercado invernal de 2011.

El centrocampista de 30 años se formó en las categorías inferiores del Real Betis, aunque no consiguió debutar con la primera plantilla verdiblanca, siendo cedido al Coria FC de Tercera División en la 2003-2004 donde se convirtió en uno de los jugadores más destacados del filial bético.

Formado en las categorías inferiores del Betis, despuntó en Las Palmas y brilló en Osasuna

En la campaña 2005-2006 fue renovado por dos temporadas por el club sevillano, disputando esa misma temporada 32 partidos, anotando siete goles, ganándose el derecho de entrenar varias veces con el primer equipo sevillano dirigido por aquel entonces por Lorenzo Serra Ferrer.

Con el filial del Betis Cejudo logró consumar el ascenso a Segunda División B en el año 2006-2007, realizando una magnífica temporada. Sin embargo, no pudo llegar a un acuerdo para su renovación con el Consejo del Club sevillano, desvinculándose del Betis y fichando con el Ceuta en Segunda B.

Cejudo disputó 51 partidos, anotando 11 goles con Las Palmas en año y medio

UD Las Palmas

Tras dos espléndidas temporadas en el Ceuta, completó su fichaje por La UD Las Palmas en la temporada 2009-2010, equipo donde dejó un buen sabor de boca siendo un jugador querido por la afición por sus buenas actuaciones, disputando un total de 51 partidos y anotando 11 goles.

Su buen papel con los amarillos captó la atención del club navarro, que se hizo con sus servicios en el mercado invernal de 2010-2011, siendo uno de los jugadores más destacados de los rojillos en las cuatro temporadas que jugó con el Osasuna en Primera División.

Con los navarros jugó 108 encuentros anotando 12 tantos, antes de recalar en el equipo que lo formó como jugador después de no poder evitar el descenso de Osasuna a la Segunda División en la temporada 2013-2014. Tras nueve años fuera de Sevilla, Álvaro Cejudo vuelve al Real Betis Balompié donde encabeza un nuevo proyecto deportivo, con el objetivo de volver a Primera División.