La UD Las Palmas ha tenido que esperar 14 jornadas de competición en la Liga Adelante para poder disponer de un lanzamiento desde los once metros. Zorrilla fue testigo del primer gol de la UD Las Palmas de penalty en esta temporada 2014/15, en una jugada donde el local Peña derribó claramente al joven Roque Mesa. El colegiado Figueroa Vázquez no lo dudó y señaló la pena máxima para los amarillos, aparte de amonestar al jugador pucelano.

Eran tres los candidatos para ejecutar el penalty. El primero de ellos era el argentino Araujo. El futbolista cedido por Boca Juniors sigue siendo el máximo anotador del equipo y continúa a la cabeza de los pichichis de la categoría. El segundo era Nauzet Alemán. En un partido en el que los canarios estaban por detrás en el marcador y ante un rival muy complicado como es el Valladolid, la experiencia del grancanario podría haber sido útil en la pena máxima. Sin embargo, el elegido fue Momo, que era el encargado de lanzar los penaltys la pasada temporada y con una buena fiabilidad. El mayor de los hermanos Figueroa asumió responsabilidades y no falló, aunque cierto es que Javi Varas estuvo muy cerca de pararlo.

Parece ser que este es uno de los aspectos que Paco Herrera no se ha atrevido a cambiar respecto al equipo de la temporada pasada. Con Sergio Lobera a la cabeza, Momo fue el lanzador principal de los amarillos, marcando penaltys de gran importancia, como el que supuso el 2-1 frente al Sporting de Gijón, pero también fallándolos, como el que mandó por encima del larguero contra el Barcelona B en encuentro en el que el filial blaugrana se llevó los tres puntos del Gran Canaria (0-2).

De momento, lo más probable es que sea Momo el que siga asumiendo la responsabilidad de ejecutar desde los once metros. Cierto es que, llegada la ocasión, sea el que los lance, o también Alemán, pero mientras Gerónimo Figueroa siga marcándolos, Herrera no lo moverá de ahí.