Hay que retornarse mucho tiempo atrás para poder presenciar la última derrota de la UD Las Palmas en el Estadio de Gran Canaria. El rival era el Barcelona B, y fue el canterano Munir el que amargó ña tarde a los aficionados amarillos. En esta ocasión, han sido dos viejos conocidos en Gran Canaria: Nino, por su pasado blanquiazul, y Roberto Sanatamaría, ex-portero amarillo que tuvo sus más y sus menos en su salida del club.

Todo apuntaba a que el encuentro no iba a tener muchos problemas. El conjunto entrenado por Paco Herrera partía como favorito y, de hecho, se adelantó en el marcador, con el gol olímpico de Momo que puso en pie a todo el estadio. A lo largo de la primera mitad, el conjunto navarro apenas llegó a la portería defendida por Casto debido al gran dominio de los locales.

Nino hizo el empate y Santamaría evitó la igualada local

Sim embargo, la fatiga y el cansancio producido por haber jugado cuatro partidos de manera consecutiva hizo mella en los canarios. Prueba de ello fue el empate de del Osasuna, donde Cedrick superó en velocidad a Christian Fernández y se la puso en bandeja a Nino, que no desaprovechó la oportunidad y marcó. Con el gol de Merino en un córner y con el 1-2 en el electrónico, fue Roberto Santamaría el responsable de que los amarillos no empataran el choque. Prueba de ello fue la oportunidad que tuvieron Guzmán y Asdrúbal, donde el guardameta pamplonés evitó el gol con dos grandes intervenciones.

De esta manera, Las Palmas suma la segunda derrota en la Liga Adelante y la primera en casa, por lo que Paco Herrera deberá trabajar después el periodo invernal para evitar que esta desafortunada derrota vuelva a suceder.

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Sobre el autor
Nehemías Dorta
Periodismo en la ULL. Coordinador adjunto de las redacciones de la UD Las Palmas y Portugal. El fútbol portugués como gran pasión. Aprender haciendo lo que más quieres, eso no tiene precio. ¡Nos leemos!