No era un partido más para la Unión Deportiva Las Palmas, ni mucho menos. La necesidad imperiosa de volver a sumar una victoria después de dos tropiezos bastante pronunciados provocaron cierta sensación de presión en una escuadra que no la acusó, que saltó al césped con la clara idea de recuperar el crédito perdido y reafirmar ante toda la categoría de plata su candidatura por la consecución final del gran objetivo, que no es otro que el retorno a la máxima categoría del fútbol español.

Formación de gala para finalizar la crisis

Diversas variaciones las que se dieron en la formación titular de la UD Las Palmas en comparación con la pasada jornada. Las dolencias físicas de Ángel López, que le han mantenido al margen durante toda la semana, hicieron imposible su participación en el trascendental partido de este sábado, por lo que su puesto fue suplido por un Christian Fernández que cumplió con su cometido durante el encuentro disputado en Soria, cuando sustituyó al "6" de Las Palmas en el tiempo de descanso.

Por su parte, la principal novedad llegó en la parcela central del terreno de juego, pues la adaptación paulatina de Culio a los entrenamientos con el resto de sus compañeros acabó por surtir efecto y éste pudo salir de inicio en la media cancha palmense, junto a Hernán y Javi Castellano. El de Zárate se postuló algo más adelantado de lo normal y, junto al regreso del argentino, propició diversos cambios en un equipo que volvió a rendir a un nivel bastante destacado.

De igual modo, Aythami Artiles regresó al centro de la zaga junto al capitán David García, ya que Marcelo Silva debía cumplir un partido de sanción por acumulación de amonestaciones, mientras que el lateral derecho fue ocupado por el hombre habitual en dicha demarcación, un David Simón que no pudo contar con una actuación muy destacada.

El resto de la formación fue la misma que la escogida la pasada semana en Soria, salvo Nauzet Alemán, que volvió a entrar en los planes de Herrera después de quedarse en la isla para la visita realizada al CD Numancia, debido a diversas molestias que le habían impedido ejercitarse con normalidad, mientras que la dupla formada por Araujo y Ortuño nuevamente salió de inicio y maravilló gracias a la aportación ofensiva de ambos.

Un equipo ofensivo intentó asaltar la isla

Por parte del conjunto visitante, éstos no llegaron a Gran Canaria de vacaciones, ni mucho menos. El buen trato al balón realizado por el cuadro liderado por Manolo Díaz fue la principal arma para incomodar a una UD Las Palmas que pudo solventar la papeleta de una manera bastante notoria. Dinu se ocupó de defender el arco foráneo, con una línea de cuatro defensores conformada por Carpio, Óscar, Alan y Castañeda.

En el centro del campo, Jonathan y Andy se encargaron de hacer circular el balón con criterio y, a la vez, de mostrar la garra necesaria para plantar cara a una Unión Deportiva que aportó mayor presencia gracias a la inclusión de Emmanuel Culio, provocando que éstos se tuvieran que exprimir a un nivel bastante elevado para contrarrestar la lucha constante propuesta por los locales.

Las bandas fueron ocupadas por Acorán y Pablo Infante; Berrocal ejerció en una posición más adelantada formando como mediapunta con plena libertad de movimientos y, como máxima referencia, un viejo conocido de la afición grancanaria como es Yuri tuvo la misión de liderar el mayor peligro ofensivo.

Tras un inicio titubeante, Las Palmas se adueñó del encuentro

La petición de Paco Herrera se cumplió. El técnico catalán tenía como objetivo el hecho de recuperar viejos valores que la escuadra palmense habiá perdido con el paso de las jornadas, y así fue. Tras un inicio titubeante con cierto dominio visitante, los amarillos lograron postularse como el equipo dominador en todas las facetas del juego. La recuperación de intensidad a la hora de presionar sirvió como estímulo para que los locales se sintieran más cómodos a la hora de recuperar el esférico en posiciones más favorables para los ocupantes del frente de ataque.

Con mayor presencia ofensiva, las combinaciones fructíferas se comenzaron a suceder. El buen entendimiento entre Araujo y Ortuño era acompañado por un incisivo Nauzet Alemán, que contó con bastante participación y sus ofrecimientos siempre eran bien vistos por sus compañeros, que encontraban en él a un socio de garantías para seguir trenzando acciones de peligro sobre el arco de la Ponferradina.

La entrada de Culio aportó mayor carácter a un centro del campo que parecía muerto durante las últimas jornadas. La picardía del argentino, acompañada por su criterio a la hora de distribuir el esférico y su buen entendimiento con Javi Castellano y Hernán, supuso que los amarillos tuvieran mayor presencia en dicha zona del terreno de juego, donde comenzaron a ganar el partido.

Araujo volvió a sonreir

Pronto comenzó a llegar la recompensa para los amarillos. El buen orden mostrado por éstos sobre el terreno de juego supuso un error en la creación de la defensa visitante que fue aprovechado por el más listo de la clase, un Sergio Araujo que recuperó la sonrisa perdida y finiquitó la mala relación que venía atravesando con el gol durante las últimas jornadas, en las que el ariete argentino no encontraba la fortuna de cara a portería.

El "10" amarillo se plantó cara a cara ante Dinu, le dribló y definió a placer para adelantar a la UD Las Palmas en el marcador. El Estadio de Gran Canaria estallaba de júbilo como claro síntoma de alegría por la recompensa obtenida por uno de los jugadores más destacados del actual plantel, que cuenta con el aliento de una hinchada entregada gracias al gran arranque de competición que protagonizó y, también, por el claro deseo que siempre ha mostrado de sumar en la consecución final del gran objetivo.

A raíz de ahí, el buen juego de los locales siguió haciendo acto de presencia e incluso el propio Araujo estuvo a punto de aumentar la renta, pero el disparo realizado desde el borde del área se marchó desviado por centímetros. No obstante, ésto sería la antesala de una gran jugada encabezada por Hernán que acabó suponiendo el segundo tanto amarillo de la tarde, obra de Nauzet Alemán.

El de Zárate arrancó con potencia en dirección al área visitante y encontró como socio a Sergio Araujo, que dentro del área volvió a ejercer a buen nivel para driblar a un defensor visitante, haciendo imposible cualquier intento de arrebatarle el esférico, mientras que el pase de la muerte realizado por el argentino acabó siendo empujado por Nauzet Alemán, que llegó en carrera para fusilar la portería visitante y, de este modo, aumentar la renta local en el marcador.

Un fallo de concentración supuso el tanto de Berrocal

Corría el minuto 28 y en la grada se festejaba el tanto materializado por el jugador de Las Mesas pero, no obstante, un fallo de concentración tras el saque de centro supuso el tanto visitante que acortaba distancias en el marcador, pues solamente dos minuto después del segundo gol amarillo, la SD Ponferradina logró anotar su primer diana de la tarde, obra de Berrocal, que mandó a la red una buena acción ofensiva comenzada desde la banda derecha.

El partido se volvió loco en cuestión de dos minutos pero, sin embargo, Las Palmas supo imprimir la calma necesaria para seguir mandando en el marcador, pese al claro intento visitante de igualar la contienda antes del descanso, contando con un Pablo Infante que suponía el mayor quebradero de cabeza para la retaguardia local. La figura de Culio se agrandó para que el conjunto local tirara de oficio para pausar el intento de reacción protagonizado por los peninsulares.

El cuadro grancanario perdió ritmo, pero ésto no fue suficiente para que los de El Bierzo consiguieran igualar el marcador, por lo que el partido llegó al tiempo de descanso con la Unión Deportiva mandando por la mínima gracias a los goles de Sergio Araujo y Nauzet Alemán, mientras que el tanto materializado por Berrocal hacía que aún hubiera mucha tela que cortar, sobre todo por sus buenas formas a la hora de hacer circular el balón con criterio.

La dupla Araujo/Ortuño acabó con la emoción

Tras la reanudación seguiría siendo el conjunto local el que contara con mayores prestaciones ofensivas y, fruto de ello, Araujo pudo sellar el tercer tanto de la tarde para Las Palmas y el segundo en su cuenta particular. La presión realizada por Nauzet y el buen entendimiento con Ortuño sirvió para que el argentino mandara el balón al fondo de la red con un bonito disparo cruzado ante el que nada pudo hacer el guardameta visitante.

Las Palmas aumentaba la ventaja y la victoria parecía no peligrar, pero un error defensivo acabó con Castañeda siendo derribado en el interior del área amarilla por David García, por lo que el colegiado decretó una pena máxima transformada por Yuri tras errar el lanzamiento inicial, pero el rechace volvió a caer por sus proximidades y éste no falló.

Los visitantes no bajaron los brazos en ningún momento e intentaron seguir inquietando el arco defendido por Casto, pero Herrera ya había movido fichas para evitar cualquier tipo de contratiempo en un partido en el que la victoria no podía peligrar en ningún sentido para un equipo necesitado de puntos. De este modo, Guzmán, Vicente Gómez ingresaron en el terreno de juego, mientras que minutos más tarde lo haría Juan Carlos Valerón. El de Arguineguín le supo poner la pausa necesaria a un partido en el que Las Palmas había podido volver a marcar.

Ortuño selló con gol su gran actuación y Las Palmas volvió a vencer

La dupla formada por el atacante murciano con Sergio Araujo fue lo mejor de la tarde. Ambos futbolistas demostraron entenderse a las mil maravillas y, a la vez, saber compaginar su juego con el único fin de que la escuadra palmense contara con mayores opciones ofensivas. El "8" de Las Palmas protagonizó una actuación bastante destacada que pudo sellar anotando el cuarto y definitivo tanto en el marcador.

Una gran acción individual de Guzmán Casaseca acabó con éste encontrando a Ortuño libre de marca en las inmediaciones del área, lo que terminó con el murciano definiendo al palo corto del guardameta visitante para acabar de sentenciar un encuentro al que no le faltó emoción y que, sobre todo, sirvió para que la Unión Deportiva volviera a reafirmar su candidatura al ascenso.

El conjunto de Paco Herrera recuperó viejos valores que sirvieron para observar ciertas similitudes con el equipo que maravilló en su juego durante las primeras jornadas del campeonato, pero los despistes defensivos se quedan como la nota negativa, ya que los amarillos los pagaron a un precio bastante elevado.

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